NUESTRA DULCE Y FELIZ GRADUACIÓN, Y CON ELLO LA TRISTE DESPEDIDA.

Y así de rápido nos encontrábamos ya en nuestra ceremonia de graduación, puede que al principio no me interesaba nada de lo que estuviera a mi alrededor, pero conforme fui creciendo y comprendiendo varias cosas, eso fue cambiando poco a poco.

La ceremonia fue como todas las que hemos tenido hasta ahora, el director daba su discurso el cual en esta ocasión fue demasiado largo, dieron la excusa del por qué esta sería la última graduación que tendríamos en este establecimiento, no negare que me quede dormida por unos minutos, después de despertar comencé a distraerme con la más mínima cosa que no puse asunto a lo que estaba diciendo.

Después del discurso llego la hora de dar a conocer a los alumnos destacados y quienes tienen la oportunidad de obtener una beca debido a sus calificaciones, gracias a mis esfuerzos me encontraba entre los cinco mejores, así que tenía la oportunidad de obtenerla. Después de todo ya me había decidido qué carrera quería seguir y donde quería estudiarla, cuando lo hablé con mis padres se negaban rotundamente a ello, pero les hice un gran berrinche hasta que accedieron. Aunque aún no estaban muy convencidos, yo si lo estaba y eso era lo que más importaba.

Después de nombrar a los acreedores de las becas, procedieron a llamar y entregar los diplomas a cada uno de mis compañeros, se tardaban una eternidad en nombrarlos, creí que no saldríamos el día de hoy de ahí. En fin, continuamos con la ceremonia, varios compañeros dieron palabras de despedida y de aliento a los demás en el camino que iban a recorrer después de esto. Vi a varios llorar y decir que extrañarían todo esto. Yo solamente extrañaría a una persona. Pero contuve mis emociones. Al finalizar nuestros padres comenzaron a felicitarnos por nuestro logro. Después de ello mis padres y yo iríamos a comer a un pequeño restaurante para poder celebrar. Mi madre estaba apresurándonos diciendo que debíamos aprovechar el tiempo para poder arreglarme ya que en la noche se realizaría lo más esperado por todos durante estos años, así es, el baile de graduación, me negaba rotundamente a asistir, pero mi madre insistió, e insistió, no me quejo, después de todo yo hice lo mismo para que me dejaran asistir a la universidad en Australia.

La comida estaba deliciosa, puede que este restaurante no sea de lujo como otros, pero su comida es mucho mejor que la de esos restaurantes de lujo. Aaaaaah,disfruté tanto la comida que no medí lo que comía, solo veía el rostro de mi madre enfurecido, diciendo entre dientes, “de esa forma no entraras en el vestido”. Pero vamos, se supone que vine a disfrutar de la comida no podía desperdiciar esta oportunidad de comer todo lo que quería.

Después de terminar de comer, mi madre me obligo, bueno, a mi padre también, caminar hacia la casa, según ella para que la comida hiciera digestión lo más rápido posible. A mi padre y a mí no nos quedó de otra más que obedecer. Mi madre vio en Internet un hermoso vestido gris, de mangas largas, estas eran transparentes con flores bordadas pegadas en ellas. Tenía una cinta gris en la cintura la cual podías acomodar a tu medida, gracias a esta también permitía que lo largo del vestido se viera con pequeños dobleces, no lo negare, mi madre y yo teníamos gustos similares. La primera vez que me lo probé, se veía hermoso, y eso que los vestidos no mucho me convencen, pero este era perfecto. El escote era triangular, pero bueno, no es como si tuviera mucho que mostrar ahí. En fin, también había una pequeña rosa gris hecha con la misma tela la cual se colocó en mi mano, se veía hermosa. El peinado fue simple, fueron dos trenzas pequeñas las cuales se encontraban en cada lado de mi cabeza, se le colocaron pequeñas flores blancas y grises. Los zapatos tenían forma puntiaguda en la parte de adelante, el tacón era bajo, color piel. Bien, ya todo estaba más que perfecto. Mi hermano se encargaría de llevarme a la escuela.

Si se preguntan, porque en esta ocasión no hable de lo del adorno y organización de la ceremonia de graduación y todo eso, es porque de esto se encargan primero y segundo, es como su forma de darnos la despedida. Así que nosotros nos libramos de realizar esto, aunque pensándolo bien era mucho más pesado, ya que si nosotros nos hubiéramos encargado de ello habría sido una vez, pero tuvimos que hacernos cargo dos veces de esto. Aaaaaaaaah. Ya no importa, total ya no estaré en esta escuela.

Bien, llegamos a la escuela, estaba preparada a que se burlaran de mi o algo, ya saben, puede que ahora me dijeran que soy un palillo con vestido, ooooh, parece que todos han decidido actuar maduramente ahora, por favor sigan así, wooow, al parecer los chicos y chicas de primero y segundo se esforzaron demasiado en la decoración del salón, se veía como una fiesta de lujo, pilares de flores, luces tenues, también habían bebidas. La música era suave, bueno, esta gano en su mayoría de peticiones. Al menos nos permitían elegir la música. Los grados anteriores siempre pedían música para bailar así que la temática de su baile parecía de antro. Por supuesto, no lo estoy haciendo de menos, simplemente lo estoy dando a conocer. Comencé a pasear en todo el salón, todos estaban felices y lucían muy elegantes. Era como estar en una de esas fiestas a las cuales solo la gente adinerada asistía. Como dije, los de primero y segundo hicieron un excelente trabajo reuniendo todas nuestras ideas.

Mis compañeros seguían llegando, pero la persona a quien quería ver aún no había llegado, si, recorrí el salón para poder buscarlo. Después de varios minutos en dar vueltas por aquí y por allá, lo vi entrar, Kei se veía espectacular con ese traje gris, además, me emocioné aún más porque la también venia de gris, era como si tuviéramos un vestuario de parejas, como esos que están saliendo de moda ahora. No pude evitar sonreír. Quería acercarme a él, hablarle como normalmente lo hacíamos, pero mis pies no se movieron, me quede pasmada en ese lugar admirando su belleza.