Los 4 salen de la cueva.
Sara: Por fin. Ya me estaba cansando de tanta oscuridad y humedad.
Diana: Yo también prefiero la superficie. Aquí puedo rastrear mejor las cosas.
Sara: Ahora tenemos que volver hasta la Smap. La verdad es que no tengo muchas ganas de estar 3 días caminando.
Rin: Es lo que tienen los viajes. Después de ir te toca volver.
Sara: Tus bromas no tienen gracia Rin.
Los 4 salen andando de la ciudad. No se alejan demasiado cuando se paran.
Sara: Ya no puedo más.
Se cae al suelo.
Rin: Aún no hemos recorrido nada. Se ve la ciudad cerca.
Diana: Yo creo que sería buena idea parar también. Ya está anocheciendo.
Rin suspira.
Rin: Está bien. Descansaremos aquí esta noche.
Los 4 se paran y empiezan a montar las tiendas. Al cabo de un rato, tienen las tiendas montadas y están todos durmiendo. Sara se despierta por un ruido de fondo. Sale de la tienda y avisa a los demás.
Sara: Despertaros todos. Hay unos ruidos muy raros que proceden del bosque.
Rin: (Somnoliento) Es un bosque. Siempre hay ruidos. Ahora déjame dormir.
Sara: Estos no son los típicos ruidos de bosque.
Rin: Esta bien, esta bien. Iremos a echar un vistazo.
Entrando en el bosque se ve una luz que se mueve y deciden ir a investigar.
Sara: El ruido parece que viene del mismo lugar que la luz.
Cuando se están acercando, el ruido cesa. Al llegar ven a un hombre en un claro del bosque. Está de pie con el brazo estirado y con una esfera blanca flotando debajo de su mano. Debajo hay un agujero en la tierra bastante profundo. Es un hombre con el pelo blanco, largo hasta el cuello y liso. Sus ojos son negros con el iris blanco. Viste un traje totalmente blanco con guantes y calzado blancos. En la cara tiene una expresión seria.
Sara: (Susurrando) ¿Sabéis que está haciendo ese hombre?
Los 3 niegan con la cabeza. La esfera blanca se vuelve roja y hay un pequeño temblor. Del bosque sale una bestia roja con forma de perro (bulldog). Tiene ojos verdes y por donde pasa derrite la hierba y los árboles. Mide unos 3 metros.
Sara: ¿Que se supone que es eso?
Los demás la callan tapándole la boca. Revisan al hombre que no parece haberla escuchado. La bestia se lanza a por el hombre pero este lo apunta con la palma de la mano y lanza una luz cegadora que desintegra a la bestia y a todo lo que hay en esa dirección.
Rin: Creo que tendríamos que salir de aquí. Ese hombre parece peligroso y no quiero meterme en asuntos que no me afectan.
Hombre: No os molestéis en esconderos. Se que lleváis ahí desde que habéis llegado. Por desgracia para vosotros, habéis visto algo que no tendríais que haber visto.
Rin: Esto es malo. Tenemos que correr.
Cuando se dan la vuelta el hombre está allí.
Sara: ¿Cómo puede haberse movido tan rápido?
Hombre: Si no os resistís no os dolerá.
El hombre estira su brazo hacia ellos pero Sara coge su espada y ataca al hombre. Este lo esquiva y se pone detrás de ella.
Hombre: Dije que sería mejor si no os resistís.
Cuando el hombre va ha atacar, una espada lo ataca y este da un salto hacia atrás casi hasta donde estaba antes.
Ruben: No voy a permitir que le pongas un dedo encima.
Hombre: No se que pasa contigo niño pero no tengo tiempo de jugar.
Ruben: Pues sera mejor que acabemos pronto.
Ruben salta con la espada cubierta de hielo y ataca al hombre pero este lo esquiva y lo agarra del cuello estrellándolo contra el suelo. Rubén suelta la espada, que vuelve a convertirse en daga, mientras le sale sangre por la boca.
Sara: RUBÉN.
El hombre levanta a Rubén y lo lanza hacia los demás. Mientras aún está en el aire, abre su mano hacia ellos y lanza el mismo rayo de luz de antes, arrasando con la zona.
Editado: 25.09.2020