Gallagher atravesaba con su mirada al extraño ser que se encontraba de pie frente a Una, a simple vista parecía un simple humano pero si observabas con mucha atención podías distinguir pequeñas escamas cubriendo la parte trasera de su cuello y las filosas uñas que se esforzaba por mantener ocultas.
_ ¿Quién eres?_ Le pregunto Una con tanta autoridad que sorprendió a todos en la habitación.
_ Mi nombre es Ra, mi señora. Soy un Kirin, una creación del Ancestral Absalón…
_ El culpable de la muerte de mi madre._ le interrumpió la nueva líder de los Fuath.
En aquel momento Gallagher vio el odio y la cólera tiñendo la mirada de su prometida, un sentimiento de profunda oscuridad comenzaba a abrirse paso desde el fondo de su alma y estaba a punto de salir al exterior en forma de cruda y cruel venganza. Lentamente se acercó a ella y coloco su mano sobre su hombro para llamar su atención, Una le miro y de pronto su mirada se suavizo mostrándole de vuelta la compasión y la dulzura que formaban parte de su carácter.
_ Tranquila._ Le susurro.
Ra podía ver cuánto había afectado a la líder del Clan, estaba consciente de que se exponía a ser torturado y a perder la cabeza en cualquier momento, pero también sabía que era la única oportunidad que tenía.
_ Mi señora, lamento mucho la muerte de su madre…
_ ¡No te creo!_ Le grito Una al tiempo que se ponía de pie y se plantaba imponente ante el Kirin._ Tú y toda tu gente son una aberración, un veneno para todos aquellos que poseen alma, son el pecado hecho carne.
_ Alguna vez fuimos hombres y mujeres con alma…
_ Pero ya no._ Interrumpió Gallagher._ Ahora solo son el espejismo de ese recuerdo, su alma se ha perdido para siempre.
_ Pero necesitamos su ayuda._ De pronto Ra comenzaba a sentir que su esfuerzo seria en vano, nunca le creerían._ Necesitamos de ustedes para librarnos de Absalón.
_ Nuestro deber es con los Hijos de Adán, ustedes son seres creados desde la oscuridad y por tanto no tenemos ningún motivo para ayudarlos.
Ra miro fijamente a Una y descubrió en su mirada más bondad de la que mostraban sus palabras, ella era una mujer herida a causa de la brutal muerte de su madre, solo estaba dejando que el dolor y la rabia salieran en contra de él.
_ Yo no pedí esto._ Ra extendió sus manos hacia ellos._ Solía vivir en un pequeño pueblo de agricultores, tenía una novia preciosa con la que pensaba casarme y una familia que me amaba. Pero una noche después de guardar las herramientas en el viejo cobertizo fui atacado por Absalón, me arrastro por los prados y me llevo a una vieja iglesia donde comenzó a hablar sobre la inmortalidad, su ejército de Kirin y la extinción total de los hombres._ Ra recordaba aquella noche como su infierno personal._ Esa noche perdí mi vida en las manos de un hijo del demonio, al día siguiente desperté como la oscuridad misma.
Los ojos de Una comenzaron a llenarse de lágrimas, dio un paso hacia atrás en busca del calor y la fuerza de Gallagher y se refugió entre sus brazos mientras la pena por aquel extraño ser se abría paso hacia su corazón.
_ Absalón nos robó la vida, los sueños y las ilusiones, nos robó el alma y la posibilidad de vivir una vida plena y una muerte justa. Yo le odio con todas mis fuerzas._ Las manos de Ra se cerraron en puños._ No todos pensamos igual, pero muchos estamos cansados de este calvario, de seguir sus órdenes y de causarle la misma tortura a aquellos que aún conserva su alma intacta.
_ Le quieren traicionar ¿Verdad? _ Pregunto Gallagher.
Ra asintió.
_ ¿Has venido a pedir nuestra ayuda?_ Continuo preguntado.
_ He venido a prevenirlos, mañana por la noche Absalón les atacara. Invadirá su castillo con la ayuda de los Malignos, asesinara a todos a su paso y la dejara a usted hasta el final._ Ra bajo la cabeza con vergüenza._ La utilizara como a un juguete y cuando se canse la matara cruelmente.
La sangre de Gallagher hirvió con furia, jamás permitiría que ninguna escoria demoniaca causara ningún daño a Una. Primero tendrían que matarle antes que dejarla en manos de un bastardo como Absalón.
_ ¿Qué son los Malignos?_ Una se alejó de los brazos de Gallagher pero no soltó su mano.
_ Demonios, los causantes de la muerte de su madre.
_ Sigo sin entender que es lo que quieres conseguir contándonos todo esto.
_ Un trato._ Gallagher y Una se miraron confundidos._ Queremos que Absalón muera, con él fuera de nuestras vidas podremos seguir adelante. Solo les pedimos que nos permitan permanecer en la isla, no tenemos a donde ir y a cambio de ayudarnos prometeremos que jamás le causaremos daño a ningún Hijo de Adán. Permaneceremos ocultos en la isla.