El día del ex.

02-10-29

Querido diario perdón por tenerte tan abandonado pero… pasaron muchas cosas, las peleas con mi papá siguen, no quiere que le hable a Vladimir insiste con que es el peor hombre del mundo.  Por otra parte Laura esta insoportable quiere que se cancele nuestra fiesta de cumpleaños para irnos de viaje, lo que realmente quiere es que mi mamá no venga.

Por otro lado no hemos podido averiguar nada sobre porque mi padre odia tanto al de Vladimir es como si todos hayan hecho un pacto para no darnos información cada vez que hablo con mi tía Layla sobre el tema ella lo cambia o hace como que no me escucha; Vladimir esta igual nadie le quiso decir nada, sea lo que sea lo vamos a averiguar. También siento que Leo esta raro sé que a veces por nuestros deberes, la universidad y el conservatorio no tenemos tiempo para salir y charlar pero siempre existe ese momento en el día donde hablamos un poco de cómo nos va sin embargo en las últimas semanas ha estado evitándonos a todos.

En fin tengo que irme ya necesitaba escribirte para desahogarme.

Baje al comedor deseando con todas mis fuerzas que por alguna razón mi padre tuviera que salir temprano y que ya no estuviera en casa, pero esto no es un cuento de hadas porque ahí estaba con su cara larga, bebiendo su café sin azúcar – Buenos días princesa, pensé que te levantarías tarde – Papá ya tengo profesor de fotografía que bueno que siempre estas al tanto de lo que pasa en tu conservatorio – Perdón, perdón lo había olvidado hija ¿Quieres que te lleve al conservatorio? – Otra vez, ya me quedo claro que no puedo ver a Vladimir, no es necesario que me trates como niña pequeña y me quieras llevar a todos lados perfectamente puedo ir en mi auto papá,  gracias – por el rabillo del ojo pude ver a Laura alzando una ceja en desaprobación ella odia que le alce la voz a mi padre – Esta bien hija yo solo decía y que bueno que te quedo claro que ese rufián no es alguien para ti, es mejor que te concentres en tus estudios – Si padre ahora es mejor que salga de aquí no quiero llegar tarde – estaba a punto de salirme con la mía – Eli, querida no vas a desayunar algo, no sé qué les pasa hoy Leonardo, solo tomo café y salió corriendo, ahora tú también  que ejemplo le están dando a su hermano – (Él no es mi hermano, él es el resultado de una relación por despecho, de una calentura y cómo eres una conservadora mujer que tiene una vida perfecta manipulaste a mi padre para que se casara contigo.  Y ahora te sientes amenazada por que una mujer de la cual realmente sí estuvo enamorado vendrá por lo cual ahora quieres jugar a la madre perfecta) Supongo que el ejemplo de ser responsable solo queremos llegar a tiempo por lo que es mejor que salga de aquí – tome una rebanada de pan tostado mis cosas y salí de ahí lo más rápido posible.

Subí a mi auto para dirigirme al conservatorio, era mi momento para relajarme y olvidarme de todo lo que pasaba en mi vida; puse mi playlist favorita a todo volumen, abrí todas las ventanas para simplemente disfrutar. En un santiamén llegue al conservatorio y pude notar que había un auto extraño a lado mío, lugar donde suele aparcar tío Josema supongo que sería algún padre de algún compañero o algún directivo.

Mientras sacaba mis conclusiones pude ver quien salía del auto, bueno realmente solo vi su espalda por cierto se veía un tipo fornido, tengo que dejar el cotilleo o será tarde para llegar a mi clase  ya que mi padre y mis tíos al parecer lograron ponerse de acuerdo para conseguir un profesor de fotografía a un  con el contratiempo de solo faltar un par de semanas para terminar el semestre, suspire y tome mi mochila para salir de mi auto.

-¿Por qué tan sola? – Me sobresalte  al escuchar esa voz - ¿Qué te pasa estúpido? - ¿A si tratas al chico que te gusta? – Me quede callada fijamente a manera de desaprobación – En primera ¿Quién te dijo que me gustas? Y en segunda  no podemos estar juntos aquí alguien nos puede ver y decirle a mi padre – Cálmate ya todos están en clase, tampoco soy tan inconsciente  ¿Lograste averiguar algo? – Eso espero no quiero más problemas y no nadie me quiere decir nada es como si todos olvidaron el por qué mi padre odia al tuyo – Solo escuche un suspiro como respuesta – Vlad es mejor irnos o nos van a dejar entrar a clases – Si… tienes razón, hablamos en la noche – Camine hacia mi salón, mentira la verdad corrí, temía que el nuevo profesor  fuera muy estricto y me sacara de la clase. Entre  con mucho cuidado al salón, para mi fortuna mi hermano me guardo un lugar por lo que mi única misión era sentarme sin hacer mucho ruido; lo cual creo que logre, me senté tranquilamente y pude darme cuenta de que el nuevo profesor era el tipo fornido que se estaciono a un lado mío, hasta ahora solo eh podido verle la espalda. – Bien ya que mi última alumna se dignó a venir a mi clase podemos comenzar. Mi nombre es Gonzalo Santillán, profesor Santillán para ustedes, siempre quise decir eso – comenzó a reír mientras tanto yo sentía como el rubor comenzaba a notarse; no era alguien que le gustara ser notada ya era suficiente con ser la hija del decano.

- Bueno según esta guía del profesor que he estado leyendo dice que tengo que pasar lista, me parece muy anticuado, eso debe de ser obra de Antua – Conforme hablaba más sentía que esa voz se me hacía muy familiar – Oye Eli esa voz me es familiar ¿A ti no?- Si ¿Pero de dónde? – voltee a ver a mi hermano pues me agradaba saber que no solo era yo la de la idea – No se… ¿Algún amigo de papá? – Puede ser, seguro es por eso que consiguieron tan rápido un profesor –

- Leonardo Maximilano Curent Castello ¿Esta aquí? – El profesor al fin volteo hacia nosotros – Bien veo que no se encuentra  Leonardo con nosotros ¿Sara Elizabeth Curent Castello? – Leonardo salió de su trance – Yo ¡Presente! - Todos comenzaron a reír – Que bonito nombre señorita Elizabeth – Yo… no soy Elizabeth, soy Leonardo una disculpa estaba distraído – Bien espero que no vuelva a suceder ¿Entonces quién es la señorita Curent? – Yo soy Elizabeth profesor Santillán,  presente – Levante mi mano para que supiera quien era yo, quería que me tragara la tierra y sé que Leo quería lo mismo - .