Sinopsis.

En la época donde reinaban aun los dioses, no existía nada más que la armonía entre los siete reinos, la paz y la esperanza estaba entre dioses e inmortales, lo llamados inmortales eran los hijos de los dioses mandados a cada reino a poblarlos con forme a sus profecías, pero había una profecía que todos temían, un amor prohibido entre el dios de la naturaleza y el dios de la tierra.

Por eso el dios supremo prohibió el amor entre estos dioses, no tenían permitido conocerse, interactuar o simplemente tener una vista más allá de su lugar a menudo. La diosa de la naturaleza por su belleza sin igual y su gran poder no podía tener hijos solo podría tener uno en sus más de quinientos décadas de vida, aún era joven y aunque era las más hermosa entre los siete reinos, tenía muchos enemigos, por eso ella nombro a cada uno de sus inmortales con forme a la estación de los años, la inmortal de las flores era su allegada más preferida, su belleza era comparada incluso con la diosa de la naturaleza, sin embargo ella tenía a su cargo a los inmortal de invierno, inmortales de verano, inmortal de agua, inmortal de primavera, inmortal otoño, junto con su ejército de inmortales reinaban la diosa de la naturaleza en plenitud.

El dios de la tierra era un apuesto y joven poderoso e arrogante, él tenía a disposición a miles de diosas e incluso mujeres inmortales, su arrogancia no tenía fin, él quería algo y simplemente lo tenía, el reinaba con sus hijos e hijas inmortales en la tierra, el inmortal de los árboles, inmortal de Vulcano, inmortal de lava, inmortal de clima, inmortal de viento, inmortal de sol, inmortal neblina, junto con sus más allegados gobernaban en armonía y satisfacción el reino, sus inmortales eran categorizados uno de los mejores en los siete reinos, eran el orgullo del dios de la tierra, que junto con ellos poblaron inmensos y grandiosos reinos.

Cada uno de los reinos tenían sus propios inmortales, encargados de tener armonía, entre dioses, inmortales, ángeles, ángeles caídos, nefilim,  elfos e humanos, todos tenían un lugar importante en cada profecía, todos gozaban de sabiduría y sobre todo de honradez, aunque en los siente reinos estaba en reino infernal, que no lo veían muchos parte de la armonía celestial, solo por el hecho de tener demonios y ángeles caídos, pero el reí supremo era bondadoso con ellos, tenía paz entre estos, los inmortales estaban convencidos que esto era un error, pero con el tiempo estos demostraron lealtad, a pesar de hace más de mil años que se profano una guerra entre el reino infernal esta se ganó con la tregua y sacrificio de muchos dioses e inmortales involucrados.

En este tiempo el dios supremo dejo que el tiempo pasara, dejo de vigilar a los siete reinos, pensando en su bien, pensando en que todo tiene que llegar y todo tiene que pasar, el junto con la diosa suprema dieron vida a su primogénito y heredero de todos los reinos, el inmortal del fuego o alguno lo llaman el inmortal de la guerra, el solo tiene una década de nacido y tiene todo el mundo a sus pies, es muy arrogante que es lo que lo caracteriza entre las mujeres, pero sobre todo su fuerza inigualable y su destreza lo llevaran a ser el dios ideal que gobierne al reino en futuros inconvenientes.

Las décadas y años pasaron, junto con sus reinos en paz y armonía, aunque esto es lo que siempre se creía, ya que muchos inmortales querían más, pero siempre sus dioses los tenían bajo control, todo tenía un inicio y ellos ponían el final, cada profecía de los siete reinos se habían cumplido, la única profecía que faltaba era la involucrada en el mundo general, donde se involucraría a los siete reinos y la guerra seria catastrófica.

El dios supremo jamás hablo de esta profecía con nadie solo con su allegado inmortal de la paz, entre ellos quedaron que para no tener pánico y sobre todo para que el equilibrio se mantuvieran, la profecía estaba entre los libros prohibidos que solo con el poder del fuego y agua que tenía el dios supremo podrían abrir e incluso leer, ya que esta tenia magia sinigual que se revelaría ante el único elegido para gobernar.

Con los años, el hijo del dios supremo se volvía cada vez más y más fuerte, a su corta edad de cuatro mil años, la diosa de la catástrofe le advirtió a los dioses supremos el presagio que había tenido, es la guerra inmortal, la guerra entre ángeles y demonios, donde la causa seria el inmortal de la guerra, donde el lucharía junto a la inmortal prohibida, donde ellos propagarían su amor incondicional e incluso acabarían con la deshonra de la catástrofe que seria, la diosa de la catástrofe advirtió que no tenía otro método para que esta no se volviera real, ya que índigo una y mil maneras de evitarlas, pero en todas aparecían ellos, son tres jóvenes que se bastarían en guerra, una guerra necesita una iniciativa y eso involucraba a la inmortal prohibida.

El dios supremo junto con el dios de la paz no entendían como es que esta profecía llego a su luz, por eso prohibieron a la diosa de la naturaleza y al dios de la tierra una amista o incluso una cercanía, ellos temían más que a nada en el mundo, porque sabían que esta profecía que faltaba podría destruir en universo e incluso desvanecer a cada uno de los reinos.