El 5to. De dragones.

DITROUS Y LAS 7 CELESTES. 

Ditrous remontó el cráter del volcán Necro con rumbo a Daro’s Eretum, y al avistar los enormes panales habitados por dragones, se dirigió a la fortaleza de obsidiana de Daro’s, ya que tenía una gran noticia que darle.

  -¡Daro’s, Daro’s! –gritaba mientras entraba al salón. -¡Han derrotado a los tornados, han derrotado a los tornados de Mirídia y yo lo vi!

  -¿Qué has dicho, que derrotaron a los tornados de Mirídia, quién fue, acaso las legiones de criaturas infernales no naturales del rey Vlad de Lúa Dark al fin lo han logrado? –preguntó el Rey dragón muy intrigado.

-¡No, los tornados cayeron ante un solo guerrero, ante el humano que buscabas, el poseedor de la Espada del Destino! Derrotó al ejército de Mirídia comandado por Júpiter Fidius; ¡En unos cuantos minutos!

  -¿Así que el humano poseedor de la Espada del Destino ya empezó a destruir Fíria? ¡Tendremos que prepararnos! Si derrotó a nuestros más fuertes enemigos tendremos que estar listos para todo, es tiempo ya de liberar a la última magia, que se preparen los dragones rojos, que despierten a Thermofría y llamen a los dragones mágicos, el humano en éste momento debe de estar devastando la ciudad de Mirídia; ¡Será nuestra oportunidad de llegar al Templo de los Dioses Olvidados! Pero antes tendremos que desafiarlo.
 

  -Sí logramos derrotarlo de alguna manera, entonces la espada pasará a nuestras manos y con el ejército de Mirídia destruido podremos despertar a nuestro dios para pedirle el deseo de ser devueltos a la Tierra, el tiempo de la venganza de los dragones ha llegado, tomaremos la Espada del Destino y con la ayuda de Bahamut (1) destruiremos el mundo de los humanos y a todos y cada uno de los miembros de esa maldita raza; ¡Ditrous! Prepárate con las demás, quiero que me digan todos los pasos que da el humano en Fíria, y cuando pretenda atacar otro de los reinados me avisan, es necesario que vea los poderes de la espada para conocer su fuerza y sus técnicas; ¡No lo pierdan de vista! Ditrous, ahora eres la líder de las dragonas exploradoras; ¡No me falles!

  -¡Eso nunca, mi Rey!

Dijo aquella dragón hembra de color azul celeste y se retiró del palacio de obsidiana de Daro’s, al salir voló directo a la cima del volcán Necro ya que ahí era el punto de reunión de las exploradoras, un grupo de dragones femeninos de color azul celeste a las cuales les era muy fácil esconderse en el azul del cielo durante el día y no por ser dragones femeninos eran menos fieros y peligrosos que los demás, al llegar entró a una cueva que era conocida.

Como el centro de reunión de las 7 celestes y sopló un cuerno puesto ahí para llamar a las demás, que al poco rato empezaron a llegar, 6 impresionantes dragonas de tamaño regular y formas estilizadas, el color azul celeste a pesar de ser monstruos mitológicos les daba un aspecto agradable, hijas del milenario rey de los dragones, eran prácticamente las princesas dragón de aquel reinado de fuego; Glaurungia, Uruloky, Elfia, Eskatia. Mara, Abriga y Ditrous, eran las 7 dragonas que tenían el cargo de espías reales de Daro´s, ya que el color de sus escamas eran el camuflaje perfecto para aquellos cielos firianos.

  -7 celestes, nuestro padre me ha nombrado líder del grupo de exploradoras y nos ha encomendado una misión, tenemos que vigilar al guerrero humano, yo lo ubiqué ayer en Mirídia, porque mientras patrullaba los cielos en su búsqueda, noté desde los Montes Lunares que había nubes de tormenta en un día soleado en los cielos del Valle de Mirídia y me acerqué a investigar, desde las alturas vi como un solo guerrero derrotaba a Júpiter y sus tornados en unos cuantos minutos, pues bien, ése guerrero es precisamente el humano que nuestro padre anda buscando, nuestra misión es esa, ubicarlo en todo momento y cuando esté por atacar otro de los reinados de Fíria, avisarle, el necesita ver sus técnicas de combate para saber cómo vencerlo. –el grupo de las celestes escuchaba atenta a Ditrous.

  -Cuando lo encontremos; ¿Podemos matarlo? –pregunta Eskatia, una impulsiva dragona del grupo.

  -¡No! Bueno… en realidad no lo sé, ustedes concrétense a ubicarlo e informarme de los pasos que da en Mirídia.
 

  -¡Eskatia! No seas impulsiva y no te acerques al humano, recuerda que el sólo derrotó a nuestros más fuertes enemigos, alguna de nosotras tendrá que dar aviso al rey Vlad de Lúa Dark y a la reina Amorn de Alcalá.

  -¿Y por qué tenemos que avisarle a ellos de lo que pasa?

Pregunta extrañada Ábriga, otra de las 7 celestes, fácilmente distinguible de las demás por sus largas crines azules, como las de una yegua.

  -¡Porque el humano en estos momentos debe de estar devastando la ciudad de Mirídia y matando a todos sus ángeles con la Espada del Destino! Recuerden que es muy poderoso porque derrotó al ejército que nunca antes había sido derrotado, tal vez tengamos que formar una alianza, con las legiones no naturales de Vlad y con los ejércitos tecnológicos de Alcalá, como sea, es la orden que les doy y tienen que cumplirla como si fuera orden del mismísimo Daro’s. –dijo Ditrous resuelta.

  -Muy bien, entonces yo iré al castillo Stoker a dar aviso al rey Vlad. –dice Elfia.

  -¿A ver quien dará aviso a los inmortales de Alcalá?

Pregunta inquisitiva Ditrous mientras las demás se miraban unas a las otras.