Pasamos la tarde en terapia con Paola, nos orientó sobre que hacer y que no hacer cuando Luciano cuando entre en crisis, qué actividades hacer con él y sobre todo hablamos del colegio, me recomendó un colegio especializado en niños especiales y esa idea me gustó mucho.
Salimos del consultorio y los lleve a cenar, escogimos un lugar más tranquilo en donde Luciano se sienta tranquilo, comimos y después regresamos a casa, mi hijo se durmió, lo baje en mis brazos y lo lleve a su habitación, al bajar a mi despacho Mario había llegado, me sirvo un whisky y le doy uno.
—Cada día estoy más confundido, pero hago todo esto por mi hijo, conocer su condición, que es un niño especial aunque físicamente no tenga rasgos, su lenguaje corporal y otros síntomas que no había puesto atención y ahora más que nunca lo protegeré, la psicóloga me recomendó un colegio para niños especiales y mañana iré a verlo.
—Y cuentas conmigo, somos amigos y Luciano es mi ahijado, por lo que yo estaré siempre ahí para él, en lo que necesites, Santiago te admiro eres un gran padre y hermano que estás apoyando a tu hermana, parezco un cursi diciéndote palabras de amor, espero no te lo tomes a pecho te aclaro no eres mi tipo, ja, ja, ja
—Imbécil, tampoco eres mi tipo, soy más de las dulces mujeres, no alguien como tú, ok, ya hablando en serio, necesito de tu ayuda, Sara va a entrar a trabajar conmigo, y Luciano se irá al colegio. Sé que tú tienes muchas influencias y quiero abusar de tu inteligencia, consígueme una buena niñera para Luciano, que se encargue de recoger a Luciano de la escuela y ayudarlo con sus tareas en casa, ¿podrías hacerme ese favor?
—Claro jefe, ¿algo más?, deja todo en mis manos y buscaré a alguien que esté capacitada y tenga conocimiento en todo lo que tenga que ver con la condición de mi campeón, y bueno te dejo, tengo una cita con mi esposa y no puedo faltar, dale un beso a mi ahijado, dile que pronto lo vendré a ver —se despide saliendo de la oficina
— ja, ja, ja, la comadre te tiene a la raya, salúdala de mi parte, buenos nos vemos amigo, espero noticias pronto —me río de mi amigo
Mario se retiró y me quedé un rato en el despacho trabajando, después subí a descansar, mañana tengo una reunión con una empresa transnacional, ese contrato es muy importante para mi empresa y espero que lo logré, este contrato me ayudará a estar dentro las diez mejores empresas del país.
— Santi, ¿a qué hora tienes la cita en el colegio de mi principito? Me gustaría ir contigo, conocer las instalaciones.
—De hecho, si me gustaría que me acompañes, antes de ir ahí, vamos a una reunión con unos posibles socios y necesito de tus conocimientos para convencerlos, si logramos ese contrato, hermana mía, nuestra empresa se colocará en una de las mejores del país.
Nos fuimos a la empresa, deje a Sara en su oficina después de presentarla como la vicepresidenta, fui a la mía a prepararme para la reunión, mi asistente y yo comenzamos a analizar los posibles pro y contra de esta firma. Salimos con Sara a dicha reunión, en donde ella me sorprendió con su habilidad logrando que firmamos el contrato, no sabía esos dotes de mi hermana, me ha superado en la forma de hacer negocios, es segura y sobre todo se supo navegar entre estos grandes tiburones.
El colegio que Paola recomendó es muy bueno, pague las colegiaturas de Luciano, mañana empiezan sus clases, como sé que no le gusta estar con mucha gente. Sara me ayudo para comprar su uniforme y materiales para la escuela, al llegar a casa le dije a Luciano que ya tenía escuela nueva, se emocionó, ahora sé que le gusta, espero ahí reciba la ayuda y apoyo que tanto necesitamos.
Un nuevo día, y una nueva rutina para Luciano, lo ayudo a arreglarse y bajamos a desayunar para después irnos, Sara y yo lo llevamos al colegio, y lo dejamos hasta su salón, ahí la que será su maestra lo recibió con una sonrisa, y nos saludó.
—Miss, Luciano viene contento, a Luciano le gusta mucho venir a la escuela, voy a pintar y construir —le cuenta a su maestra sonriendo y entra a su salón.
—Muy bien Luciano, entra al salón con tus compañeros, buen día, señores Montemayor, yo soy la maestra de Luciano, a partir de hoy, mi nombre es Molly Aquino —se presenta la maestra de mi hijo
—Mucho gusto Miss Aquino, yo soy Sara, tía de Luciano y él es mi hermano Santiago Montemayor, espero conocernos más, ya que estaremos en contacto en todo lo que tenga que ver con mi sobrino.
—mucho gusto Miss, me gustaría a la salida poder hablar con usted respecto a la condición de mi hijo, me imagino que usted debe de tener conocimiento de su caso.
—Claro señor Montemayor, tengo conocimiento de que Luciano es un niño especial como todos mis niños que tengo a mi cargo, a la salida del colegio podemos platicar y yo le puedo mostrar mis observaciones que le haga a Luciano el día de hoy. Solo le puedo decir que hoy voy a trabajar con él en observar su comportamiento, aptitudes y habilidades, nos vemos a la salida señor Montemayor, señorita con su permiso deseo iniciar mi clase, pasen un buen día.
—Waaa, guapa la maestra de mi principito, hermanito ni creas que no me di cuenta como la mirabas, ojalá que puedas darte una oportunidad al amor, me gustaría verte feliz —se burla Sara y me sonrojo
—no digas tonterías, no estoy para esas cosas y bien sabes que no puedo ni quiero andar con esas cursilerías, mejor apúrate que llegaremos tarde a la oficina y hoy hay mucho trabajo —la regaño y subimos al auto.
Salimos del colegio y nos fuimos a la empresa, deje a Sara en su oficina y fui a la mía, mi asistente me estaba esperando con los pendientes del día de hoy. Le pedí que me dejara un espacio a la hora de la salida del colegio de Luciano para ir por él, nos pusimos a trabajar, tuve dos reuniones y una videollamada, al llegar la hora tome mis llaves y celular y me fui por Luciano al colegio.
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Editado: 27.10.2024