Mi nombre es Luke Fisher, tengo doce años, vivo con mi tía y mi primo por cosas que pasan en la vida y que a veces explicarle a un niño puede ser difícil, soy de tez blanca y ojos grises, los ojos más apagados que verás, nunca tuve hermanos, mi padre no lo e visto y tampoco se nada de él, los recuerdos se vuelven borrosos cada vez, mi vida es un caos en este momento y apenas tenía cuatro años de edad cuando todo comenzó…
La edad de cuatro años, probablemente no la más importante de tu vida, a los cuatro años, a tan corta edad puedo recordar casi toda mi vida, es como cuando sientes que estás a punto de morir y tú vida está pasando frente a tus ojos
La vida te enseña muchas cosas, buenas, malas, pero siempre se aprende de ellas, yo e cometido errores, errores de los cuales me arrepiento y en este momento de mi vida me gustaria pedirles disculpas a esas personas, estoy de nuevo en mi lugar seguro, veo el cielo y cada vez se tiñe de un color rojizo por el atardecer, quisiera que las cosas fueran más simples
*╔═══❖•ೋ° °ೋ•❖═══╗*
~ 8 años antes~
-Vamos mami, no quiero ir- digo mientras mamá me despertaba, ella sonrió negando y me abrazo
- Será divertido ya verás, a muchos niños les agrada ir- ella sonríe y me carga hasta el baño, ahí me despoja de la ropa y comienza a bañarme
A terminado de alistarme y me lleva al kinder, mi primer día, estamos cerca y yo ya no quería seguir
- Estoy cansado, no quiero seguir, ojalá tuviéramos superpoderes, sería grandioso verdad mami- ella sonríe y me ve
- Que poder te gustaría tener?- me quedo pensando un rato y doy un brinco de alegría cuando lo tengo
- Umm…, me gustaría poder volar, así no tendría que caminar- ella ríe y me mira
- Quieres intentar?, Vamos salta y lo lograras- ella hace la mímica mientras avanza, yo comienzo a saltar intentando volar, pero no lo logro, doy un salto más y me levanto del suelo, miro a mi mamá y me a tomado en sus brazos haciendo que vuele
- Mira mami estoy volando- ella sonríe mientras yo reía por eso
Las madres siempre complacen a sus hijos, no importa que, ellas son geniales, pueden con cualquier adversidad, son nuestras heroínas y no lo sabemos, dicen que nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde, yo digo que todos sabemos lo que tenemos, pero no lo sabemos valorar hasta que algo nos lo arrebata
Ya me a bajado y empezamos a caminar, yo me detengo viendo la heladería
- Vamos cariño, no querrás llegar tarde tu primer día de clases o si?- niego y con una hermosa sonrisa me acerco a ella tomándola de la mano
- Mami, al volver podemos ir por un helado?- pregunto y ella asiente feliz
Llegamos a la escuela, mi mamá me ve y sonríe, me da un beso en la frente
- Mi pequeño ya está grande, estoy orgullosa de ti cariño- sus palabras me hacen sonreír y le doy un fuerte abrazo, me separó y veo a la directora hacer señas de que debo entrar- vamos Luke, ve a clase y has que mamá se sienta más orgullosa de ti, te quiero
Y con esas palabras se despidió de mi, le digo adiós con la mano, ella me ve alejarme y al estar dentro de la escuela entre a mi salón, este día era el mejor de mi vida, Era un día para recordar, la pasaría muy bien y al regresar a casa le contaría a mamá como me fue, quería aprender de todo para mostrarle a mamá lo que aprendí
- Muy bien niños, soy su maestra Wendy, vamos, tomen un lugar en la alfombra es hora de que les lea un cuento, después podrán colorear- me alegro y al igual que los demás niños chillo de emoción- El título es, El patito feo...
Comenzó el cuento y luego nos repartieron un dibujo del cuento, nos dieron colores y yo pinte de un color bonito mi dibujo, a mamá le encantará, me levanto para mostrarle a la maestra como a quedado mi dibujo, ella sonríe y me da una estrellita
- Muy bien Luke, ahora sí quieres puedes tomar algo de plastilina y hacer algo con ella- yo asiento y me llevo mi dibujo, busco la plastilina y comienzo hacer un pato, no se cómo hacer uno así que me sale algo mal, un niño llega hasta donde de mi y me ve
- Oye niño, esa es mi plastilina, damela- yo lo veo y no se la doy
- No es tuya, la maestra me la dió, es de la escuela
- Claro que no, mi mamá me la compro, así que déjala donde estaba o le diré a la maestra que me robaste- me quedo pensando y no se la doy
Después de tanto el me ve extendiendo su mano para que se la de, yo niego y sigo con mi pato, lo veo y el me ve enojado, me empuja y yo caigo al suelo, empieza a golpearme y yo lo empujó haciendo que este caiga de espalda y comience a llorar, la maestra se acerca rápidamente y me ve enojada yo no tengo la culpa, él comenzó, la maestra me regaña y me manda a un rincón
-Luke porque lo hiciste?, Deja la plastilina estás castigado por empujar a tu compañerito y tomar cosas ajenas- me ve y me señala un lugar
Mi castigo termina y me manda a comer, a llegado la hora del recreo, saco de mi mochila la comida que mi mamá preparo, ella es una gran cocinera, espero cocinar así cuando sea grande, le cocinare siempre y ella se pondrá orgullosa de mi, tomo mi sandwich y le doy una mordida, después de tres mordidas solo falta un poquito, veo de nuevo acercarse a ese niño, miro mi jugo y al querer terminar mi sandwich me lo tira de la mano
-A ver si así aprendes a no tocar lo ajeno, ladrón- susurra pero lo escucho, para ser un niño es demasiado... No sé que palabra utilizar
A llegado la hora de salida, los padres empiezan a llegar y yo salgo del salón y voy a la entrada donde veré a mamá, espero y espero, nada, absolutamente nada pasa, me siento en la banca, se esta haciendo tarde, me está empezando a dar miedo, veo a un señor alto cerrar el portón, me bajo de la banca y salgo de ahí, espero en la acera, pero nadie llega por mi, siento que me mueven y me levanto del suelo tallandome los ojos, no me di cuenta cuando me dormí, un señor de traje negro me mira y sonríe con tristeza