1912.

Abrí mis ojos lentamente mientras me acostumbraba a la luz, mire a mi izquierda y lo vi durmiendo, sonreí, la verdad si que me hacia falta una noche con alguien desde hace mucho tiempo. Me acerque a el y comencé acariciar su espalda, el al sentir mi contacto se despertó.

- Hola.- Dije sonriendo.

- ¿Cómo amaneció la mujer mas hermosa?.- Me dijo.

- Bien, gracias a ti.

El se acerco para besarme.

- Espero que tus hermanos no me maten por esto.- Se burlo.

- No creo, ya te consideran parte de la familia.

Connor me volteo a ver.

- Enserio, hasta Kol ya te llama cuñado.- Rei.

- Vaya, quien diría que los Mikaelson les agrada alguien como yo.

- ¿Sabes porque?.

- ¿Porque?.- Sonrió.

- Porque se que darías la vida por mi, lo has demostrado muchas veces.

- Y lo seguiría haciendo.

Me volvió a besar y cuando todo parecía que íbamos a terminar como anoche mi teléfono sonó. 

- Dime Bekah.

- ¿Dónde estas?.

Mire a Connor y este rio.

- Estoy en un día de descanso.

- Pues eso se acabo Beth.- Suspiro.- Creo que estamos en problemas.

Fruncí mi ceño.

- Explícate mejor.

- El árbol que da el roble blanco, ¿Te acuerdas que lo quemamos?.

- Si, lo recuerdo a la perfección.

- Pues al parecer este volvió a crecer, y no sabemos donde esta, si alguien se entera de que aun esta por ahí, no dudaran en ir tras el para matarnos.

- ¿Dónde quieres que nos veamos?.

Connor comenzó a besar mi pecho.

- En el Mystic Grill.

- Claro, nos vemos allá.- Colgué.

- Cariño.- Le dije.

- Dime.- Dijo aun besándome.

- Necesito irme.

- ¿Ahora?, justamente cuando nos vamos a divertir.

- No seas llorón.- El volteo a verme.- Tengo que ir a discutir un asunto con Bekah.

- Esta bien.- Me beso.- De todos modos Evan viene hoy.

- ¿El viene hoy?.

- Si, debí decírtelo pero queria que fuera sorpresa.

- Y si que lo fue, ahora me voy a bañar.- Lo empuje y camine hacia la ducha.

- Si quieres te acompaño.- Grito, lo mire y le saque mi dedo del medio para luego seguir avanzando.

Había llegado al Grill, mire a mi alrededor hasta que vi a Bekah, me acerque a ella.

- ¿Cómo supiste acerca del árbol?.- Pregunte.

- Cuando estaba torturando a Elena en la cueva, la grabe y después de mirar detenidamente la grabación vi el dibujo del roble blanco.

- ¿Cómo se supone que lo encontremos?.

Rebekah me señalo donde estaban sentados Damon y Stefan.

- Ellos nos darán las respuestas.

Nos acercamos a ellos.

- En 1912 mataron a un Salvatore.- Termino de decir Damon.

- ¿Y a cual Salvatore fue?.- Pregunto Bekah uniéndose a la conversación.

Me senté primero, al lado de Stefan y Bekah al lado mío, Damon comenzó a contarnos la historia.

- ¿Y Sacarahia Salvatore era su sobrino?.- Pregunto Bekah.

- Nuestro padre embarazo a una mucama en la guerra civil, ella tuvo al niño, pero según todos los demás Stefan y yo morimos, el apellido tenia que prevalecer.- Tomo un poco de su trago.

- Y, ¿Su familia tenia la maderera?.- Mire a Bekah en señal de reproche.

- Creo que tienes demasiadas preguntas.- Le respondió el pelinegro.

- Solo investigo la historia del pueblo, Elizabeth y yo crecimos aquí.

- No tienes que disfrazar tus motivos ricitos de oro, si buscan un acoston, solo pídelo.

Mi cara se transformo en una mueca de asco.

- Hay por favor Elizabeth no están malo.- Continuo Damon.- Además, creo que estas haciendo lo mismo con tu novio.

Stefan me volteo a ver.

- ¿Y que tiene que ver Connor con todo esto?.- Pregunte con una sonrisa falsa.

- Si se me hacia raro que el nos ayudo, la verdad pensé que estaba para cortarnos la cabeza.

- No tientes al destino.

- ¿Connor es tu novio?.- Pregunto Stefan.

Asentí y el tomo un poco de su trago.

- Respondiendo a Damon, jamás, nunca estaría tan borracha.- Hablo Bekah cortando el silencio incomodo.

- Ay por favor, te gusto demasiado para que ahora no lo admitas.

Stefan agarro la botella y se fue.

- Por favor disculpen a mi hermano, necesita una O+.

- Eso no es verdad.- Volvió a acercarse.

- ¿Y atraparon al asesino?.- Pregunte corriendo un puesto mas.

- No, culparon a los vampiros.

- Tal vez fue uno.- Dijo Bekah.

- Si, tal vez fue un vampiro Damon.- Reprocho Stefan.

- No creas que no he pensado en ti hermanito.- Lo miro.- Pero ese no es tu estilo, ¿O si?, además no había mas vampiros entonces.

- Bueno, si había otro vampiro.- Hablo Stefan.- ¿Estas olvidando a Seich?

- Ah Serch, hablando de buen sexo, uf.- Bebió de su trago.

- Nosotras conocimos a una Seich, era tan corriente.- Continuo mi hermana.

- ¿En serio crees que Serch allá matado a esos fundadores?.