La Muerte De Uno.

Había decidido ignorar por completo lo que paso anoche, Stefan Salvatore ama a Elena Gilbert y punto, además yo amo a Connor, desde hace mucho lo he amado. Mientras pensaba mi teléfono comenzó a sonar. 

- Ha despertarse hermanita.

- Rebekah, déjame un día de paz y tranquilidad.

- No lo podremos tener hasta averiguar acerca del árbol, así que levanta tu trasero como una buena hermana y ven, la alcaldesa esta restaurando el puente y va a hacer una celebración así que aquí te espero.- No me dio tiempo a responder y colgó.

Me levante me bañe, me vestí y me arregle, cuando iba por una bolsa de sangre me di cuenta que Connor no estaba, decidí llamarlo pero no contestaba. Llame a Evan y tampoco contesto, ¿Dónde rayos se metió?. En fin no podía preocuparme por el ahora así que fui donde Rebekah.

Baje del auto y camine hacia toda la gente.

- Genial, como si una Mikaelson no fuera suficiente.- Dijo Damon.

- Hola a ti también Damon, Rick.- Lo mire y el asintió con la cabeza.- Chica que no conozco.- Ella sonrio.

- Soy Meredith Fell.- Me extendió su mano.

- Elizabeth Mikaelson.- La acepte.

- La hereje, ¿Cierto?.

- ¿Cómo lo sabes?.

- Ella sabe del mundo paranormal.- Me respondió Rick, asentí para mirar a Damon.

- Dime que no es quien creo que es.- Le dije.

- Sip, Serch esta viva.

Damon y yo nos dirigimos hacia allá.

- Mi estudiante favorito, Damon Salvatore.

- Mi maestra mas linda Serch, ¿Qué haces aquí?.

- Solo voy de paso.

- Por favor, nadie va de paso en Mystic Falls.

- Espero que solo sea de paso.- Dije interrumpiendo.

- Tranquila Elizabeth, ella golpeaba hombres por deporte.

- Eso solo lo hace la gente vulgar.

- Elizabeth, que bonita sorpresa.

- Dime porque realmente estas aquí.

- Supe que Finn ya salió del ataúd en el que tu salvaje hermano Klaus lo encerró hace años.

- Uy que mal ya se fue, nos dejo y no le dijo a nadie donde se dirigía.

- Es probable que me este buscado.

Rei.

- O es posible que ya te olvido.

- Lo dudo.- Sonrió.

- ¿Si?, porque nunca te menciono, que mal que vinieras por nada, ten linda vida.- Le dirigí para ir a buscar a Rebekah.

Vi que Damon había dejado de hablar con Serch y ahora hablaba con mi hermana.

- Cuidado con lo que haces Damon.- Le dije.- Acuérdate que aun soy bruja.

Este se tenso y se fue.

- ¿De que estas hablando?.- Me pregunto Bekah.

- Algo esta tramando, y tu.- La señale.- Eres blanco fácil.

- Se cuidarme sola, gracias.

- Lo se, pero también acuérdate que Serch es tramposa y sigilosa como una rata.

- Lo tendré en cuenta gracias.- Sonrió forzadamente.- Cambiando de tema, ¿Y Connor?, quisiera saludar a mi cuñado.

- No lo se, salió temprano esta mañana y no me contesta.

- El se sabe defender solo Elizabeth, ya sabes como es.

Suspire.

- Tienes razón, cuando lo vea le diré que tu quieres verlo.

- Perfecto.- Sonrió.-  Ya se considera parte de la familia.

- Y el lo agradece mucho.

Había caído la noche y estaba en casa. Comencé a llamar a Bekah.

- Hermanita.- Dije.

- El idiota de Damon descubrió que quiero el árbol y Serch entro en mi mente, pero se dio cuenta que Damon la iba a traicionar.

- ¿Entonces?.

- Problema resuelto.

- ¿Quemaste lo que quedaba del árbol?.

- Si, Serch me ayudo.

- Vaya.

La puerta se abrió.

- Luego te llamo.- Colgué.

- Hey.- Me levante para abrazar y besar a Connor.- ¿Dónde has estado?.

- ¿Tanto te hice falta?.

- Me tenias preocupada.

- Lo se, debí llamarte pero estaba arreglando unos asuntos.

Lo mire con curiosidad.

- Nada malo, te lo prometo.

- Esta bien.- Dije no muy convencida.

- Lo entenderás mas adelante.- Me dijo para luego besarme.

Le dije que Connor que Rebekah lo queria ver, así que nos dirigimos a la mansión y cuando entramos vimos a Finn en el suelo, Serch bajando las escaleras y Bekah y Klaus rodeándolo.

- Creo que llegamos en un mal momento.- Me dijo Connor.

- Tal vez.

Finn se levanto del suelo y fue hacia Serch para terminar abrazándola.

Rebekah se volteo y sonrió.

- Pero si es mi cuñado favorito.- Le sonrió a Connor.

- Rebekah.- El sonrió.- Klaus.- Luego lo miro.

- Justo a la persona que podríamos necesitar.- Dijo Klaus.

- Klaus.- Lo regañe.

- Esta bien, no por ahora.- Se acerco a Connor y lo abrazo.- Es bueno tenerte de vuelta amigo.

- Lo mismo digo.

Klaus se llevo a Connor para hablar mientras yo solo miraba como el se divertía, hace mucho no los veo juntos. Había pasado como veinte minutos y Rebekah había llegado con el cuerpo inconsciente de Damon.

- No me interrumpan.- Nos dijo para luego irse.