Luz ©

5.

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Observo con pánico como Wendell se detiene en el lugar donde hace unos instantes estábamos nosotros, inspeccionando todo. Mi cuerpo se siente pesado nuevamente, la sensación de pánico se apodera de mí y odio esto.

Odio que el hecho de estar frente a él me cause esta sensación de desasosiego y deje mi cuerpo inmóvil, como si todo lo que quisiera hacer es rendirme ante él y dejar que esta pesadilla acabe, que tenga lo que sea que quiere obtener y los demás puedan seguir felices con sus vidas. Tal vez, si hago eso, él deje a los demás en paz, tal vez, si me entrego y le doy lo que quiere, él dejará de perseguir a todos e incluso podrá ser un padre amoroso con mi hermano.

No hagas esto

Doy un respingo y Xander me mantiene en mi lugar, observándome.

No vas a sacar nada entregándote a él, no dejes que te consuma como lo está haciendo. Él no tiene poder sobre ti, no puede tocarte.

Las palabras de Xander son dichas en mi mente, lo observo pensando que tiene razón, que no puedo dejar que me consuma, pero… desvío mi vista hacia el lugar donde Wendell se encuentra agachado, él se pone de pie cuando un soldado se acerca desde la cascada por la cual, supongo, caí.

-Señor, no están con ellos –El cuerpo de Xander se tensa. Ellos, ¿Ellos significa mi hermano, mis amigos y los de Xander?- Usted me dirá si procedemos a atacar, esperamos o nos retiramos –Wendell se da la vuelta hasta estar frente al soldado y luego mira hacia lo alto de la cascada.

-Ataquen –El cuerpo de Xander se tensa en el acto y borrosamente el paisaje frente a mi, cambia. Estamos en la cueva, los chicos y las chicas reunidos en círculo, conversando.

-Tenemos que irnos -Es lo único que sale de la boca de Xander y suena como una orden- Todos voltean a vernos justo en el momento en el que los soldados nos rodean en la cueva- Maldición

-Xander, no -Le ordena Jeremy sacudiendo su mano derecha. Una espada azul aparece en ella- Saldremos de esta sin que lo uses -Asegura. Los amigos de Xander hacen lo mismo que Jeremy, William, Magno y Ethan hacen esferas de luz y pronto las chicas, Marcus, Jake y yo, quedamos encerrados en un círculo, rodeados por ello, pero, ningún soldado hace algún movimiento, ellos están de pie, rodeándonos, con sus armas en sus manos.

-Ahora -La voz de Wendell llega desde algún lugar y los soldados se abalanzan sobre nosotros. El primero en atacar es Jeremy que mueve su espada y la armadura delantera del soldado cae, dejando al soldado desprotegido. Jeremy resopla y un proyectil delgado y pequeño es formado por su mano y lanzado hacia el soldado, tan rápido que apenas lo registro. El soldado cae al suelo rocoso y deforme, paralizado.

Lo siguiente que registro es a Christopher hacer una herida que luce profunda en la pierna de unos de los soldados, William golpea a alguien, Magno lanza una esfera de luz y Ethan, junto a Fabiano pelean en conjunto, repeliendo a tres soldados que intentan acercarse. Todo es un caos y son incapaz de hacer algo. Mi mano se cierra en un puño, con irá, impotencia y decepción hacia mi misma por no poder hacer algo, por dejar todo en manos de ellos que no solo tienen que pelear para protegerse, también tienen que protegernos.

Me siento una inútil, quiero ayudar. Mis puños se aprietan con fuerza, enterrándome las uñas en las palmas de mi mano. Busco a Xander con la mirada, él está peleando con dos soldados, se ve débil, cansado. Recuerdo sus heridas y la impotencia me lleva a otro nivel de irá que sube cuando uno de los soldado hace un nuevo corte en el muslo de Xander, su pierna afloja por un instante y eso es todo lo que los soldados necesitan para levantar sus armas y atacarlo.

Cierro los ojos con fuerza, solo por un segundo, y cuando los abro mi mano se mueve rápidamente, no sé si por mi cabeza pasa un domo, una pared o lo que sea, pero, registro que entre Xander y el soldado hay lo que luce como un círculo brillante, parpadeante. El instinto me hace empujar la mano hacia adelante, siento la resistencia que pone el soldado al no dejarse ir hacia atrás, empujó con más fuerza y con la otra mano hago el proyectil, pensando en veinte minutos, veinte minutos en los que este soldado estará fuera de combate, no sé si será el tiempo suficiente, pero, es en lo que pienso cuando lanzo el proyectil y este se incrusta en el cuello del soldado que cae al suelo con un fuerte estruendo.

Lo observó, incrédula de lo que hice. ¿Y si le hice daño? ¡Dios! Él no se mueve, sus ojos permanecen abiertos y parpadea, pero, ¿Sentirá dolor?

-¡Anahia! -Alguien me llama, pero, no soy capaz de despegar mi vista del soldado que yace en el suelo por mi culpa- ¡Anahia! ¡Reacciona! -Alguien me sarandea y volteo encontrándome con Jackeline.

-Vamos, despega los ojos de él. Jeremy te llama -Miro en la dirección en la que está Jeremy y él está mirándome, preocupado.

-Un domo -Dice- Necesito que hagas un domo y nos cubras, a todos -Un domo. Yo. Sacudo la cabeza en negación, no puedo hacer algo tan grande, es demasiado. Una punzada atraviesa mi cabeza haciéndome cerrar los ojos.- ¡Vamos, Anahia! ¡El domo! -Jackeline me toma por los hombros y me hace mirarla, es un poco más alta que yo y ahora luce intimidante.

-Vamos, Anahia, tú puedes hacerlo.

-No, no creo



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En el texto hay: magia, primer amor

Editado: 31.01.2024

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