Capítulo 79

A escondidas Leonarda entra en el departamento de Refina, cerrando la puerta al entrar comienza a abrir todos los cajones en búsqueda de lugar perfecto.

Es la segunda vez que entra en el cuarto de Refina, la primera vez era tan dolida que no la observo como es debido por lo que lo hace ahora.

Cama tiene las sabanas con estampas florales, lo que no se esperó. - Extraño. - Con sorpresa pronuncia.

Segunda cosa a la que presta atención es la mesa con maquillaje, interesada en que marcas usa.

-Muchas aromas. - Comenta rociando el perfume.

Abre el armario con la curiosidad de saber qué tipos de ropa tiene. Repasa con la mano por las telas y saca algunas con deseo de ver la marca.

Su mirada entonces cae en la mesita de noche donde hay una foto enmarcada de ellos dos.

-Infelices. - Con rencor espeta mientras los mira sosteniéndola. Es casi imposible de identificar donde están o qué momento del día es porque sus rostros son en el primer plan. Refina sonríe a la cámara mientras los labios de Leonel están besando a la mejilla de ella con una sonrisa.

Después de repasar todo el departamento, Leonarda vuelve en medio de la sala y cocina. De su bolso saca los guantes de plástico que se pone antes de sacar la cuerda, navaja profesional de un escalador y los guantes de cuero, con eso en la mano vuele a pensar que sitio será el perfecto para esconderlos, apretando los labios.

Contemplando una vez más el departamento. Las paredes son blancas y los muebles pocos porque Refina no tiene muchas cosas. La sala es decorada en el estilo minimalista, la televisión, sofás y la mesa del centro, debajo de la televisión es la única cómoda que por lo que había visto contiene algunos manteles y el álbum de las fotografías con Leonel.

Baños también contienen lo estrictamente necesario, un mueble del lavadero y lavadora. La cocina es la más pequeña, mitad de la habitación, por lo que tiene más mueble por las tres partes haciendo un "U", mirando al pasillo por el lado de la isla. Mientras ambos cuartos tiene unos grandes armarios, camas y las mesas de noche. La diferencia entre el cuarto de Refina y el que usa Leonel es que ella tiene y la pequeña mesa de tocador mientras el espejo de él está en la puerta del armario.

En final decidió guardar las cosas en una caja que vio en el armario y que contiene recuerdos con Leonel.

Colocando en esa manera la cuerda, navaja y los guantes debajo de todas esas cosas que son una vieja taza de café para llevar, cajas que deberían contener las joyas, fotos, cartas de felicitaciones y un sobre que parece como contener unos rompecabezas por el sonido de que está en partes, la que le es imposible abrir.

-Deberían ser papeles. - Por lo delgado que se siente mientras la palpaba.

Renunciando la curiosidad, Leonarda regresa todo en su lugar para abandonar el departamento.

Utilizando el teléfono público, Leonarda llama a la policía. - Buenos días. - Cambiando su tono de voz por uno más alto y difícil de prevenir el género. - ¿Me puede conectar con el inspector Marceles? Quiero denunciar al culpable de la muerte de Ángela Galicia. - La voz de la otra parte le pide que espere la razón por el cual ansiosa está mirando a su alrededor.

-Si, ¿hablo con el inspector Livio Marceles? - Usando la voz cambiada, pregunta cuando oye la voz contestarle. - Sí, he visto la culpable con eso que llama evidencia. Por supuesto la reconocí, es esa muchacha que va a veces por los periódicos, mmm - Para dar el efecto de que intenta recordar el nombre, suelta. -, la amiga Refina Calarel ¿A si se llama que no? Dicen que es la amiga del novio. - Después de unas palabras por parte de Marceles dice. - Buscan en su apartamento, ahí tiene las cosas y más. No, no quiero dejar mi nombre, que tal y a mí me viene a matar. - Soltando eso cuelga, esbozando la sonrisa de satisfacción.

-Hemos recibido una llamada anónima sobre la muerte de Ángela Galicia. - Dice Livio a Tulia y Trey mientras pone la pistola en su cinturón. - Tenemos el permiso para revisar el departamento de la acusada Refina Calarel.

Con sus palabras deja sorprendido a Trey y en la confusión a Tulia.

-Bueno, tiene sentido convencer a la amiga hacer el trabajo sucio para él. - En fin, dice Tulia mientras se levanta como lo hizo Trey para acompañar a su jefe.

-Casillas - Se detiene Marceles para advertirla. -, contrólate cuando llegamos. - Sin esperar la respuesta vuelve caminar a la salida seguida de ellos.

Frente el departamento de Refina se encuentra Livio Marceles junto a Tulia Casilas, Trey Mauri y otros policías tocando la puerta.

-Señorita Calarel, abra tenemos una orden para revisar la casa. - Tocando la está llamando Marceles.

-Parece que no hay nadie. - Comenta Trey.

Haciendo que lo miren tanto Tulia como Livio que no se da por vencido y toca de nuevo el timbre.

-Nada, abran. - Dice, alejándose de la puerta para que los otros pueden acatar su orden.

Cuando lo logran y entran en el apartamento, Marceles vuelve dar la orden. - Busquen, no quiero ni un rincón que queda sin ser excepcionado.

Acatando la orden, todos los presentes comienzan a esculcar separándose por el departamento. 

-Inspector. - Después de un tiempo, Marciales es llamado en el cuarto que sabe es de Refina. - Encontramos esto. - Indica levantándose del piso mientras con el dedo apunta a la caja.

Livio observa la caja y lo que la rodea. Fotos, cajas vacías de joyas, sobre amarillo, cartas, mientras en la caja todavía están una cuerda cortada, guantes y navaja.

Bajando a cuchillas Marceles con los guantes en la mano, observa el corte de la cuerda, pasando el dedo por los hilos arrancados.

Soplando, Marceles ordena. - Avisen a la estación para que levanten la orden de arresto.

Señoras y señores, hemos llegado al final. Les quedo por leer solo un capítulo más.