— ¿Qué ha sucedido? ¿Qué significa todo lo que mis ojos han visto? ¿Qué le sucederá a mi hija?
Entre llanto y debilidad emocional les preguntaba lo mismo una y otra vez, presentía que perdería a mi hija. Que no volvería a verla correr entre los jardines de casa, a jugar con sus hermanos como con sus padres. Que la llevarían al mundo mágico de las hadas y no tendría una vida al lado de su familia. Esos pensamientos desgarraban mi ser como el viento hacía erizar mi piel. Corrí junto a Jun para abrazarla y besarla al igual que repetirlo tantas veces como pudiera que la amo con todas mis fuerzas espirituales, físicas y emocionales.
—No mami, no te lamentes por lo que no ocurrirá, todos seguiremos unidos en un mismo mundo de amor y felicidad, ahora podremos volver a casa con mi padre que nos ha buscado desesperadamente con mis hermanos por las montañas.
—Ese hombre dijo que tú serías quien gobernara el universo de las hadas. Estoy impresionada con tu forma de expresarte por tu corta edad.
—Sí, madre. Yo soy quién se encargará de proteger a las hadas y su maravilloso universo, pero será con la ayuda de mi familia, debo aprender mucho más de nuestro mundo a tu lado y nunca olvidar el amor y la inocencia que caracteriza a las hadas. Es por toda la sabiduría que me ha otorgado Andra. No olvides que ustedes me llamaron Jun, que significa "gobernante" nada es casualidad mamá.
—Angélica, todo debía suceder como fue, no podíamos hablarte del futuro de Jun pero ahora te explicaremos un poco más acerca de nosotras: Las hadas no debemos llorar porque morimos al sentir el agua salada de nuestras lágrimas, se apaga nuestra luz de amor y esperanza por la humanidad al sentir tristeza. Nuestra misión en tu mundo es ayudar y proteger a quien posee "puro su corazón" como lo hicimos contigo, con Ji y Gabriel. El amor entre Ji y tú está destinado al triunfo, a la perfección, a la dicha inmensa como el cielo azul con tormentas de bendiciones como lo son tus hijos, nosotros los separamos y volvimos a unir cuando el tiempo fue perfecto para su crecimiento y reconocimiento del amor que nació entre ustedes mucho antes de nacer como humanos y ustedes pidieron al universo mágico reencontrarse y amarse cuando apenas eran una pequeña luz empezando a iluminar sus almas. Hace mucho tiempo nuestra madre Andra visitó la tierra y trató de ayudar a quienes se cruzaban en su camino, sufría al ver tanta injusticia, envidia, celos y maldad. Ella deseaba alimentar la fe, el amor dentro de cada ser humano hasta que le fue imposible sobrevivir en un mundo cruel, deplorable, decadente, fue cuando encontró a Leviatán, el rey no solo del mar sino el responsable de hacer nacer el mal en cada ser humano que era atraído por las ansias del poder y la riqueza, deseosos solo de fama falsa y repentina felicidad aparente. Fue cuando ella se encontraba debilitada por todo lo que veía y sentía, fue capturada como esclava durante muchos años. Un hada solo puede vivir muy poco tiempo fuera de su universo, pero nuestro amor por ayudar a las personas nos puede hacer renunciar a la vida mágica y quedarnos en tu mundo para tratar de corregir los sentimientos equivocados que son disfrazados por la soledad. Cuando Andra fue esclava de Leviatán conoció a Hobb quien quedó muy sorprendido con la belleza espiritual de Andra, él la protegió entregando su vida y el trono de las aguas a Leviatán para liberarla no sin antes dividirlas convirtiéndolas en saladas y dulces, de esta manera exultación estaría lejos del poder de Leviatán. Ella tristemente al conocer la verdad de la muerte de Hobb antes de apagar su último destello de luz por la inmensa tristeza que sintió decretó un potente hechizo de amor y encerró su cabellera con toda la sabiduría de las hadas otorgadas durante siglos dentro de la piedra de jade anaranjada para ser poseída sólo por la sucesora que ella eligió, a "Jun" una niña nacida del amor puro entre un hombre y una mujer como pareja álmica. Ella colocó el tridente en las manos de Hobb siendo la entrada al amor puro del universo exultación de las hadas como el que hubo entre ellos. Así se crearon dos polos opuestos como el amor y la maldad, donde habitaría la pureza y el amor de las hadas, como en la otra Leviatán y su maldad acompañada con su inseparable amiga la envidia. El manantial es el portal a nuestro universo exultación de amor puro, de un estado sublime y belleza espiritual. Ahora sabes que detrás de las rocas donde cae el agua vigorosa está nuestro maravilloso y divertido universo. Deben saber que al permanecer por mucho tiempo en el mundo de los humanos donde los sentimientos son tan diversos y cambiantes de amor y maldad. Las hadas no resisten la falta de amor, el exceso de envidia y egoísmo, nosotras vivimos en perfecto estado de amor y el universo creado por ese mismo sentimiento en alegría abundante por mil años o más. Así es como existió el agua salada que mata y es imposible de beber al agua dulce que quita la sed.
—Es un cuento mágico, una novela de fantasía irreal.
—No es irreal Angélica, las hadas existimos y pocos seres humanos nos pueden ver. Pero si nos llamas desde lo profundo de tu ser espiritual nosotras acudimos a ti. Solo tienes que creer y encender en la máxima potencia tu amor.