Maravillada.

3.Jamie

Vuelvo a repasar todo el plan mientras se lo explico todo a Liam con pelos y señales.

Hace una semana que a penas empezamos las clases, y llevo despertándo a Liam desde el primer dia para hacer bromas. Y hoy no sería la excepción.

Todavía no saben que nosotros somos los causantes de todas las travesuras que se han estado realizando esta primera semana de clases.

-Entonces tenemos que vestirnos de rana-confirma más que pregunta Liam.

-No Liam, vestiremos a la profesora de historia de rana y sacaremos su cama a uno de los pasillos para que todos la vean-le explico por tercera vez.

Veo que asiente más convencido y ruedo los ojos.

He tardado demasiado tiempo en explicarle el plan y ahora tenemos menos tiempo para preparar la broma. Fascinante.

¿Sarcasmo?¿Dónde?

-Jamie, son las 5 de la mañana, ¿qué rayos haces despertándonte a esta hora otra vez?-me pregunta.

-A ver Liam, una buena broma necesita una buena preparación- puntuo.

-Podríamos habernos despertado a las 6- replica.

-Si te hubiera despertado a las 6 no habría dado tiempo y lo sabes- le digo y pone los ojos en blanco.

-Vale, tienes razón, pongamonos manos a la obra-sonríe travieso hacia mi dirección.

Si no fuera por las circunstancias en las que estamos supongo que habría malpensado esa frase, pero debo centrarme en las bromas y dejar las hormonas a un lado.

_____

Entramos a clase como si nada hubiera pasado, y derrepente escuchamos un grito ensordecedor.

-Parece que la reina malvada se ha despertado-indica Liam con una sonrisa.

La señora Smith, alias la profesora de historia, entra a clase hecha una fiera y con un muy bonito pijama de cuerpo completo con el estilo de una rana.

-¿¡Quién ha sido el irrespetuoso que se ha atrevido a hacerme tal cosa?!-grita la señora Smith.

Sonrío socarronamente y me acerco a ella.

-He sido yo profesora-digo sin preámbulo alguno.

-Estás en grandes problemas,dirígete ahora mismo al despacho de la directora Black-me dice y me mira fatal, como siempre.

Salgo de la clase dando un portazo y escucho a la profesora gruñir de rábia.

Me tiene manía desde el primer día solo por que le corregí en una fecha que dijo mal. Pero bueno, si ella es la profesora debería saberlo y aceptar su error, pero no, me puso un examen sorpresa al día siguiente, que seguro he suspendido pero bueno, que le voy a hacer.

El mejor en historia en la clase es Nick, al cabrón le flipa la historia y no lo entiendo. Le pediré ayuda supongo.

Toco la puerta del despacho de la directora y al pasar me encuentro con Jax y con Kim. Pero ni rastro de la directora.

-Pero que sorpresa más grata he hayado aquí.-les saludo a los dos como es debido y en seguida pregunto-¿Qué hacéis aquí chicos?¿No deberías estar en clase?

-Bueno no eres la mejor para decir eso-Jax dice acusadoramente-.

Sonrío.

-Este estúpido me dejó encerrada en el almacén de las canchas de baloncesto cuando fui a decirte que el entrenador Robbs no quería a nadie en las canchas-dice Kim cruzada de brazos y con la mirada furiosa.

-Te dije que solo quería jugar un rato más-replica Jax cansado.

-Te estabas haciendo un porro y sin mi,eres un cabrón, me dijiste que me avisarías ya que esa maría también es mía-le mira mal ella.

-Bueno vale, lo hice mal, ya está pesada-dice Jax mientras se sienta en uno de los sillones.

-Pesada tu madre inútil-dice Kimberly y sale furiosa del despacho de la directora Black.

Miro a Jax y suspiro negando suavemente con la cabeza.

-Deberías seguirla, yo os cubro aquí-digo alentandole.

Jax asiente y sale corriendo del despacho hacia la misma dirección por la que segundos antes se había ido Kim.

Me siento en la silla que hay frente al escritorio y espero. Cinco minutos después aparece la directora por la puerta.

-Siento haberte echo esperar Jamie, alguien encerró a alguien en el almacén de las canchas de baloncesto y se ve que esa persona rompió la puerta para salir de allí-me sonríe y continua-¿Qué te trae por aquí Jamie?

Le rezo a Lucifer para que me ayude desde las sombras más oscuras del inframundo y hablo alto y claro.

-He sido yo, todas las bromas las hice yo y la señora Smith me ha mandado aquí a hablar contigo dire-le digo y sonrío inocentemente.

La directora bufa y se sienta lentamente en su silla giratoria. Necesito una de esas sillas. Son demasiado molonas.

-...y eso, ¿Jamie me estás escuchando?-me dice la directora seriamente y yo niego con la cabeza.

-Lo siento me distraje pensando en cosas serias-le digo seriamente para que suene creíble.

Asiente y dice.

-Bueno lo que te decía básicamente es que no te preocupes, es normal que la primera semana de clases se hagan bromas pero espero que esas bromas no vayan a más y alguien sufra algún accidente-dice seria.

-Entendido dire-le digo haciendo el gesto militar de los soldados.

-Bueno Jamie, ya puedes volver a clase-dice y asiento.

Salgo del despacho y me choco contra alguien.

-Eh, lo siento-digo y ella hace un gesto con la mano restándole importancia.




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