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Luego de un largo y cansado día de trabajo, papa paso por nosotras en su Cadillac negro, el cual claramente odiaba por parecer un ataúd con ruedas.

Papa no era muy conversador, siempre que entrabamos en el auto luego de trabajar solía hacernos la misma pregunta.

- ¿cómo fue el día?.-

A lo que ambas respondíamos en coro.

-Estuvo bien.-

Luego papa subía el volumen de su radio lo suficiente como para no tener que escuchar nada más y el ambiente se tornaba con un tranquilo y algunas veces relajante sonido de música clásica durante el resto del camino a casa.

Cuando Mara y yo nos recostamos del largo asiento de cuero quejándonos un poco por el dolor de nuestros pies, me di cuenta de que estaba un poco enojada conmigo pues siempre cuando entrabamos al auto no había pasado ni un segundo de irnos cuando me pedía que le diera un masaje en la espalda. pero para ese momento ella misma estaba intentando masajearse los hombros.

-Estas enojada porque no te ayude al principio con algunas bandejas?.- Pregunte para evitar más tensión entre ambas.

-No es por eso Mariela.- Respondió sin mirarme.

-¿Acaso es porque baile sin ti?- Sonreí un poco y comencé a moverme al ritmo lento de la música clásica mientras me acercaba a ella para bromear un poco.

- No.yo no bailo con ese tipo de personas.-

- ¿A qué te refieres?-

-Tú sabes perfectamente a lo que me refiero- Se cruzó de brazos y rápidamente se arrimó un poco para estar lejos de mí.

En el resto del camino a casa ni siquiera me dirigió la palabra, yo tampoco me moleste mucho en llamar su atención para que lo hiciera pues me parecía totalmente ridículo el motivo de su molestia, yo podía hacer lo que quisiera siempre y cuando no me trajera problemas o me hiciera mal y bailar con alguien solo por diversión no causaba ninguna de las 2 cosas.

Cuando llegamos a casa bajamos del auto sin dirigirnos ni una palabra, saludamos a mama y luego yo me quede en la cocina cenando un sándwich mientras Mara se fue a la habitación a recostarse por un " Dolor de cabeza" que tenía.

Al terminar de cenar me sentí un poco mal por no hablar con mi hermana y decidí hacer las paces llevándole a escondidas de mama la cena a nuestra habitación, me encargue de hacer un sándwich y servirle un vaso de leche.

-Mara te traje algo de cenar.- Dije mientras entraba a la habitación con el plato y el vaso en manos.

-No tengo hambre.- respondió. Estaba sentada en su cama escribiendo algo en un papel, supongo que era para enviarlo hacia alguna parte del mundo en donde se encontrara Edward.

-Hermana..- Camine hasta su cama y me senté a su lado para luego dejar el plato y el vaso a un lado. -Fue solo un baile, no quiero que estés enojada conmigo solo por una tontería.-

-Es que ese idiota estuvo molestándote con sus amigos Mariela, no me parece bien que luego de todo lo que te molesto y luego de que casi te hace perder el trabajo, Tu bailes y sonrías con el como si nada.-

-No te preocupes ¿sí?- sonreí un poco. -Solo fue un baile tonto y nada especial.-

-Eso espero Mariela.- Me observo seria. -Ese chico se ve problemático y no quiero que te lleve por malos pasos.-

-Lo se.-

La observe atentamente y luego de unos segundos ambas sonreímos y nos abrazamos.

-¿Escribes a Edward?-

-Un poco. - Sonrió mientras observaba la hoja de papel. -Algunas veces me gustaría tenerlo cerca para contarle todas las cosas que me suceden, las cosas que me enojan y los sueños extraños que tengo algunas veces. No me malinterpretes hermana pues sabes que eres mi mejor amiga y te quiero. Pero el me hace mucha falta y quisiera que regresara pronto.-

-Quisiera poder decirte que te entiendo. Pero ya sabes..-

-Algún día pasara hermana. Encontraras a alguna persona para ti y entonces quisas vivas lo que yo estoy viviendo en este momento, aunque no me gustaría que pasaras por estos miedos que yo tengo de que no regrese.-

-No digas eso Mara. Edward volverá pronto y lo sabes.- Sonreí observándola.

-El mes que viene dijo,- También sonrió.

Nos quedamos en silencio unos segundos en nombre de Edward y su ausencia.

-Ahora come algo.- Tome el plato nuevamente y se lo acerque.

Mara tomo el plato y me apunto con el Sándwich.

-Hablo enserio sobre lo del chico ¿eh?-

Comencé a reír sin parar y levante los brazos en señal de me rindo.

-No sucederá nada mujer. ya cálmate..-