CA´PITULO 7

Me encantaba la forma en como estaba siendo tratada por Harb de verdad me estaba enamorando, los días seguían pasando y Harb me sorprendía con cosas diferentes diario.

Tal vez y estaba viviendo dentro de una historia en donde todo podía salir mal en algún momento y creo que me estaba olvidando de ello y el peligro en el que lo podía meter, si lo sé... debería de contarle todo pero es que no estaba segura si era lo que el necesitaba saber o si él lo entendería.

Aún era medio día y estaba atendiendo una mesa cuando Harb salió de su despacho y llamo para que fuera hacia él.

-¿ qué pasa? , ¿necesitas algo? -

- si, necesito que dejes todo y salgamos de aquí, Hide se hará cargo de todo-

-está bien..., ¿a dónde me llevaras?- 

-Es un secreto- 

Procedí a quitarme el mantel y salí siguiéndolo. Subimos al automóvil y se dirigió a un centro comercial.

-Debemos hacer algo con esta imagen- dijo señalándome 

-¡hey! ¿que tiene de malo mi ropa?, es la del trabajo-

-lo sé, pero hoy serás mi pequeña cenicienta- 

Me tomo de la mano y me llevo a una tienda de ropa. Ahí empezó a elegir muchos vestidos para que me los probara, acepte, pero vi la etiqueta, ¿Enserio un vestido podía costar tanto?, si tal vez en casa tenía ropa cara, pero en verdad no sabía cuanto costaba porque llegaban a mi sin nada de precios, vivía en una burbuja, ahora me doy cuenta que tal vez un conjunto de ropa comprado por mi papa podría ser mi sueldo de un mes.

-espera... esto es muy caro y no creo poder pagarlo, mejor vamos a casa ahí tengo ropa- me sostuvo de ambos brazos

- tu solo disfruta esto, yo lo pagare no te preocupes- 

De verdad estaba siendo muy lindo, para no hacerlo sentir mal acepté, pero elegí el más barato que encontré, por suerte me quedaba bien, era un vestido color rojo ajustado con hombros caídos y espalda descubierta. 

-¿Este está bien? - pregunte, su cara me dijo todo, casi babeaba 

-de verdad estas muy linda, ven siéntate- me dio su mano para sentarme y luego él se para yéndose a otro lugar. 

Después de unos minutos llego a mí con unos hermosos zapatos color plateado con tacón de aguja. Se arrodillo ante mí y me lo coloco.

-Aquí están sus zapatos bella cenicienta, en ese momento eres una princesa para mi-  

Mi sonrisa no se pudo ocultar y salió simplemente.

Me levante, el pago el vestido y los zapatos, me tomo de la mano y me llevo a caminar. 

-Pensé que te habías escapado y me dejarías la cuenta- empecé a reír 

-ese hubiera sido un buen plan, pero desgraciadamente te necesito para algo- me dio una sonrisa y seguimos caminando.  

Nos detuvimos en un salón de belleza.

-Buenas tardes...- nos saludó una chica, la cual no pudo ocultar su asombró al ver a Harb -hola señor ¿en qué lo podemos ayudar? - se acomodó el cabello detrás de la oreja, ¿acaso me había vuelto invisible?

Al parecer se dio cuenta y volteo a veme, yo solo me limite a rodar los ojos y el soltó una sonrisita de lado, volee a ver a la chica y esta no le quitaba la mirada de encima, pero eso no me preocupaba, pues ya sabía que Harb no le haría caso.

-quiero que la pongas más bonita de lo que esta- me tomo de la cintura y me puso frente a el.

-esta bien señor- se notó la decepción en la cara de la chica pues al parecer había entendido la referencia - pase por aquí señorita- Harb me dio un beso en la parte trasera de mi cabeza y me empojo para que siguiera a la chica.

Yo solo veía como pasaban muchas posas por mi cabello para peinarlo y me empezaban a maquillar. Después de mostrarme el resultado de verdad se veía bien, cabello lo habían ondulado un poco y me había hecho una trenza de lado un poco suelta y para el maquillaje me habían puesto algo natural con pestañas postizas lo cual resaltaba todo el maquillaje. Voltee a ver a Harb y dijo que si con la cabeza.

Saliendo de ahí me llevo a un restaurante muy bonito y elegante, ahora entendía porque me había vestido así. Al entrar un señor nos llevó a nuestra mesa y nos trajeron la carta, estando ahí pedimos la comida y tuvimos una platica muy agradable en donde empezamos a hablar  de nuestros gusto para conocernos mejor.

-¿y tus padres de donde son? - menciono Harb 

-mi padre es italiano y mi madre era mexicana- 

-¿era? -

-sí, ella falleció hace unos años, pero aun la recuerdo -empecé a sentirme mal -mejor cuéntame sobre tus padres -cambié de tema 

- pues mi madre igual falleció hace algunos años, y con mi papa aun nos vemos, aunque no es muy seguido, es un hombre completamente dedicado a los negocios- 

-cambiemos de tema, ¿Qué es lo que más te gusta hacer? - dije sin rodeos antes de me preguntara algo más de mi familia que no pudiera contestar, me incliné hacia el tomando un bocado de comida 

-pues me gusta practicar algunos deportes como el box o el básquetbol , ¿y  ti?-

-a mi me gusta leer algunos libros de romance y también me gusta bailar -

-entonces bailemos- 

Me tomo de la mano y me dirigió directo a la pista de baile en donde empezaba a sonar una canción lenta, podía reconocerla se llamaba "devil doesn't bargain" era una canción que me encantaba. Harb se empezaba a mover de lado a lado mientras yo solo escuchaba la canción.

"The devil doesn't bargain, he'll only break your heart again

It isn't worth it, darling, he's never gonna change

He'll never be Prince Charming, he'll only do you harm again

I don't mean to meddle, but the devil doesn't settle

No, the devil doesn't bargain

Mm, mm, mm, mm

The devil doesn't bargain

Mm, mm, mm, mm"

-quería decirte esto desde antes, quería encontrar el momento adecuado, y creo que ese momento adecuado ya llego- volteo a verme sin apartarme de su lado - ¿quieres ser mi novia? -