Capítulo 38

Digo muy avergonzada a Ethan,

—Yo realmente lo siento, no sabía que mis padres, me correrían de la casa de esta forma.

Ethan dice aguantando la risa,

—Por Dios Aurora si ni tus padres te quieren, ¿cómo haré para aguantarte?

Suspiro molesta,

—No bromees, esto es tan vergonzoso.—Digo tapando mi rostro con ambas manos.

Ethan dice riendo,

—Lo siento, no seguiré, pero admítelo tus padres no te quieren.

Digo aún con mi cara tapada por la vergüenza,

—Cállate y maneja, no quiero seguir aquí.

Ethan ríe, enciende el auto y me lleva a mi casa de ensueño, estoy feliz pero al mismo tiempo me parece extraño que Ethan tuviera esta casa a mi nombre, cuando le pregunte el actuó de forma extraña, pero tratare de no pensar mucho en ello.

Llamo a Mónica, para contarle sobre la nueva casa,

—Hola Aurora, ¿qué sucede?

Digo muy emocionada,

—Ethan acepto que vivieras con nosotros.

Ella dice muy feliz,

—¿De verdad? Eso es emocionante, muchas gracias Aurora, agradécele a Ethan de mi parte.

—No te preocupes, podremos pasar buenos momentos juntas.—Digo riendo.

Ella dice un poco apenada,

—Eso sería genial, pero ¿qué hay de Ethan y tú? Están en su tiempo de luna de miel, deberían estar solos y tener privacidad, creo que si estoy ahí, solo los incomodaría.

Me sonrojo al escuchar lo que Mónica dice, mi tiempo de luna de miel con Ethan nunca sucederá, pero digo ocultándole a Mónica mi vergüenza,

—La casa es grande, Ethan y yo tendremos nuestro espacio, no debes preocuparte por eso.

—Muchas gracias Aurora, realmente no se cómo podré pagarte todo esto.

—No te preocupes, somos amigas, puedes mudarte mañana.

Ella dice muy feliz,

—Gracias nuevamente, descansa, mañana llamare a la mudanza para que me ayude con mis cosas.

No debo permitir que extraños vengan a mi nueva casa, así que digo algo nerviosa,

—No, no llames a la mudanza, yo te te ayudaré con la mudanza, pasaré por ti luego del trabajo.

Ella pregunta curiosa,

—¿Por qué no? Me da vergüenza que tú me ayudes con la mudanza, eso sería aprovecharme de tu amabilidad.

Digo algo nerviosa,

—No te preocupes, la cosa es que no quiero que extraños vengan a mi casa.

Ella dice confundida,

—Entiendo, entonces, te esperare en el hotel, buenas noches Aurora, gracias de nuevo.

Termino la llamada con Aurora, Ethan está en la oficina, llego a donde el y digo muy apenada,

—Ethan debemos dormir juntos.

El me ve sorprendido y dice confundido,

—¿Estás segura? ¿No te arrepentirás si lo hacemos?

Mi cara se torna de rojo,

—¿Qué estás pensando? Eres un pervertido, me refiero a dormir en la misma habitación, por Dios Ethan.

El se sonroja,

—Es tu culpa, debiste expresarte bien, no decir durmamos juntos, sin contexto.

Bajo la mirada,

—Como sea, ¿qué dices?

El me observa y dice sin emoción alguna,

—Esta bien, no me molesta, eres tú la que no quería hacerlo desde un principio.

Es cierto, yo no quería dormir en la misma habitación que Ethan, pero ahora Mónica vivirá con nosotros y no tengo opción,

—Prométeme que no harás nada extraño.

El sonríe de lado,

—¿A que te refieres con extraño?

Pongo mis ojos en blanco,

—Ethan compórtate, sabes muy bien a lo que me refiero.—Estiró mi dedo meñique,

—Promételo.

El acerca más su rostro al mío, lo cual me hace sentir nerviosa, puedo sentir su respiración en mi cara, escucho los latidos de mi corazón, el me ve a los ojos, inconscientemente muerdo mi labio inferior, el se acerca más a mi, cierro mis ojos, Ethan toma mano y dice,

—Lo prometo.

Abro los ojos y el ya está en su escritorio, ¿qué sucedió?, mis mejillas están sonrojadas,

—Está bien, lo prometiste, mañana recogeré a Mónica luego de mi trabajo.—Digo nerviosa y salgo corriendo de su oficina.

Ethan

No se que fue lo que me sucedió, pero al ver a Aurora siendo tan dulce, pidiendo con su dedo meñique que cumpla sus promesas, hizo que perdiera el control, me acerqué a ella, podía sentir su respiración en mi rostro, sus ojos azules me veían con sorpresa, cuando mordió su labio inferior, era la señal para besarla, pero realmente solo quería observarla, grabarme su hermoso rostro en mi memoria, ella cerró sus ojos, pude notar que esperaba que la besara, estuve a punto de hacerlo, pero no, no debo hacerlo, ella no me ama y aunque es mi esposa, no la tocaré hasta que ella lo desee realmente, así que tome su meñique y le dije que cumpliría su promesa, para calmarme corrí hasta mi escritorio, ella me observó confundida, corrió lejos de mi oficina, por Dios Aurora es realmente hermosa.

Esta noche me quedaré a dormir en una habitación de la casa, la más lejana a Ethan, no se que fue lo que sucedió en su oficina, pero es muy peligroso estar cerca de el, toco mi pecho, pienso, cálmate, no debes emocionarte, recuerda si Ethan sabe que estás enamorada de él, tú pierdes.

Mientras pienso en cómo mantener mis emociones controladas, Ethan toca la puerta de la habitación,

—Prepararé la cena, ¿quieres algo en específico?