Capítulo 48

Veo a Ethan y digo con mis ojos cristalizados,

—Gracias, ahora siento que todo se termino, mis padres ahora están bien y están en casa.

Ethan sonríe,

—No debes agradecer, prometí hacerlo, creo que debería dejarlos solos.

Mamá dice nerviosa,

—Ethan, no tienes que irte.

El dice llevando una mano a su nuca,

—Lo se, pero no se preocupen por mi, tengo cosas que hacer, me alegra que todo saliera bien.

Papá dice,

—Está bien, gracias Ethan por todo lo que hiciste por nosotros, eres un buen chico, estamos felices de haberte elegido para que te casaras con Aurora.

Frunzo el ceño, Ethan tensa su quijada y mamá niega, digo algo nerviosa,

—Papá Ethan debe irse.

Mamá suspira,

—Aurora tiene razón cariño, ya lo molestamos mucho, el debe estar ocupado.

Papá dice,

—Esta bien lo entiendo, puedes irte, pero no olvides que debes volver por Aurora, ella no puede quedarse con nosotros.

Ethan asiente,

—Claro. —Me ve y dice,

—Pasaré por ti a las 7:00pm

—Está bien, gracias nuevamente.

Aún no puedo creer que mis padres estén en casa, Ethan es un gran chico, pero significa que se termino, nuestro contrato matrimonial termino, no puedo seguir con el, ese era el trato.

He estado hablando con mis padres, todo lo sucedido es realmente estresante, antes de subir a mi habitación papá me pide que hable a solas con en su oficina, lo cual me parece algo extraño, pero decido obedecer, al estar solos papá dice de forma seria,

—Quiero decirte algo.

Pregunto preocupada,

—¿Qué sucede?

Papá se sienta en su escritorio y dice viéndome a los ojos,

—La recete que te entregue cuando abriste tu empresa es muy importante para mi, jamás la use en mi restaurante.

Lo veo confundida,

—¿Qué tratas de decirme? ¿Esa receta es la que el padre de Mónica decía?

Papá suspira,

—No, el padre de Mónica jamás creó un platillo nuevo, fue Aiden Lorens quien lo creo, se lo mostró al padre de Mónica pero el lo rechazó, un día llego a mi restaurante pidiéndome una oportunidad para trabajar, me mostró lo bueno que era en la cocina.—Me mira a los ojos y pregunta,

—¿Sabes por qué contrate al padre de Andy en mi restaurante aún sabiendo que era el chef de otro lugar?

Niego confundida,

—No, eso es lo que no logro entender.

Papá se levanta de su escritorio, se dirige a la ventana de su oficina, sonríe, como si recordara algo realmente bueno y dice,

—Cuando habló conmigo, me contó que el cocinaba para mantener a su esposa y su hijo, al verlo hablar tan sincero del amor que le tenía a su familia, que decidí contratarlo, un día me mostró la receta que te di a ti, le dije que era un platillo increíble, pero que no la usaría debido a que yo tenía fe en el y sabía que algún día abriría su propio restaurante, pero las cosas no salieron como debían, el murio y lo hizo muy joven.—papá se queda un momento en silencio, al calmarse continúa,

—Esa receta es muy importante para mi, no es la receta que nos llevo al éxito como muchas personas creen, esa receta me demuestra cada día, que perdí a un excelente cocinero, cada vez que pienso en ella, me pregunto, ¿estaré haciendo lo correcto? ¿Aiden me perdonara algún día?

Siento un nudo en mi garganta al escuchar la historia del padre de Ethan, digo abrazando a mi padre por su espalda,

—Papá se que el señor Aiden sabe que no fue tu culpa y se que el está orgulloso de lo que hiciste con su hijo y su esposa, jamás los dejaste solos, siempre los apoyaste, aún sabiendo que ellos te odiaban porque creían que tu eras el culpable de la muerte de Aiden, pero se que ahora ellos están avergonzados y an decidido perdonarte, no te lastimes así, me duele verte sufrir de esa manera padre.

El se da vuelta me abraza y dice de forma vulnerable,

—¿De verdad crees que hice lo correcto?

Le sonrió sinceramente,

—No lo creo, estoy segura que hiciste lo correcto.

Papá se aleja de mi y se dirige a la caja fuerte, saca la receta y me la entrega,

—Está receta le pertenece a la familia Lorens, cuando abriste tu negocio te la di, porque por un momento creí que tú y Andy se casarían, así que cuando fuera el momento oportuno, tú le darías la receta a él.

Lo veo sorprendida,

—¿Tu sabias que Andy era el hijo de Aidan Lorens?

El me sonríe,

—Cariño, lo supe desde el primer día que no lo presentaste, el es idéntico a su padre cuando vivía, sabes estaba feliz de verlo siendo un exitoso empresario, pero sabía que el me odiaba, sabía lo que su corazón sentía cada vez que me veía, por eso todo el tiempo lo evitaba, tú creías que yo odiaba a Andy, pero cariño, jamás lo odie, ¿cómo podría hacerlo? El es como otro hijo para mi.—Me observa y dice con tristeza en sus ojos,

—Necesito pedirte un favor.

Asiento,

—Pídeme lo que quieras papá.

Papá dice viendo la receta en mis manos, también me entrega una carta,

—Dale esto a la señora Lorens.

—Pero, ¿crees que ella quiera verme?—Pregunto nerviosa.

El sonríe,

—Aurora, la señora Lorens es una buena mujer, ella te aceptará yo lo sé, quiero que hables con ella, le cuentes lo que te dije y le pidas perdón en mi nombre y en nombre de tu madre, se que estuvimos 20 años ocultándole la verdad, pero teníamos miedo.

—Lo haré, iré donde la señora Lorens y le contaré toda la verdad, ella lo necesita, necesita sanar esa herida que ha tenido por más de 20 años.