Capítulo 8

En algún lugar...

--Mi señora, cuál es mi misión-- sé arrodilló frente a ella.

Ella se levanta de su asiento y se dirige hacía el joven, --Quiero que encuentres a la chica y me la entregues.

--¿Que es lo que quiere de ella?-- preguntó confundido.

--Lo mismo que a ti, necesitamos más integrantes con poderes de destrucción-- dijo victoriosa.

--¿Cuál es su nombre?-- necesitaba pistas.

--Se llama Natalia, aquí tienes una foto de ella, te harás pasar por un humano, no debes revelar tú verdadera identidad, ganarás su confianza y me la entregas-- una vez dicha las instrucciones el joven se marcha para cumplir su misión.

--Una cosa más querido, jamás te quites los guantes, no olvides el poder que tienes, si te descubren yo misma te  buscaré y destruiré-- le advirtió al joven.

--Si mi señora, tendré cuidado.

El joven comienza a viajar a la ciudad en busca de la tal Natalia, pero no puede usar sus alas para buscar más rápido, tiene que caminar como un humano y eso lo atrasa. Usa el poder de comunicarse con la mente, si la joven puede escuchar a los fantasmas puede escuchar demonios o la clase de demonio que es el joven.

Usando ese poder no duró mucho en encontrarla, tan sólo fueron unas horas de búsqueda. Al encontrar su casa, pasó caminando para observar si se encontraba la joven, pero pronto se enteró que la joven ya lo observaba desde su habitación así que el joven demonio volteó donde ella se encontraba, vió que la joven se dejó caer y el demonio sonrió de lado y siguió su camino.

Una vez que ya sabe de la chica, sigue el siguiente paso, estar en la misma escuela que ella para acercarse y ganar su confianza. Ahora tendría una nueva identidad, un nombre nuevo en lo que se cumple la misión. Sólo por las noches podrá usar sus alas para vigilar a la joven y de día hacerse pasar por humano.

Es más tiempo lo que llevará el joven demonio en ganar la confianza de la chica que lo que hará su señora con ella. El gran avance que lleva es que por fin podrá hablar con ella ya que ha conseguido su número y están en el mismo salón.