[29. Supongo que se acabó]

—Mánager —Me mueve Woozi—. Mánager. No se murió, ¿verdad?

—No seas tonto —MinGyu lo hace a un costado y empieza a sacudirme—. Levántate, ____. Tengo que llevarte.

—Qué irrespetuoso, debes decirle mánager.

El comentario de Woozi me hace reír y con eso arruino todo.

—¿Estabas despierta todo este tiempo?

—Sí, lo siento —Me incorporo y tomo mis cosas.

MinGyu sale como si nada hasta la entrada mientras que yo intento fijarme de que no me vean ninguno de los tres.

Me escondo detrás de una planta, él busca su auto y me hace señas, una vez dentro lo pone en marcha.

—¿Qué vas a hacer? 

—Prepararé mis maletas.

—¿Tienes a dónde ir?

—La verdad es que no. Antes tenía un departamento pero cuando nos regalaron uno, lo puse en venta.

—Tengo un departamento que no uso, puedes quedarte el tiempo que quieras.

Asiento y allí termina nuestra conversación, antes de dejarme me abraza fuertemente.

Mientras subo en el ascensor, ruego que Felix no esté ahí.

«Bueno, es lo único que me cumplen»

Tomo mis maletas, empiezo a meter todo lo que me corresponde y las dejo en la entrada.

Felix llega minutos después, agradezco que no se haya dado cuenta de las dos maletas y el bolso.

—Oh, ya estás aquí —Sonríe y se tira en el sillón a un costado mío.

«¿Cómo puede actuar así?»

—¿Cómo te fue en el trabajo?

—Meh... Estuvo aburrido —Lo miro asombrada, él toma el control del televisor para hacer zapping.

—Ya veo... —Niego con la cabeza, no puedo creer que me esté mintiendo.

—¿Y a ti cómo te fue en la fiesta? ¿Bailaste mucho?

—No, pero escuché su canción, esa que se llama “Sorry, I Love You” —El cuerpo de Felix se tensa y deja de hacer zapping para mirarme—. Pero ¿por qué te lo cuento? Si estabas ahí, seguro la escuchaste ¿No? —Le sonrío.

—¿Me viste?

—Por supuesto, ¿quién confundiría esa cabellera rubia? —Toco mi mentón—. ¿Qué crees que estarán haciendo los de la empresa? Yo creo que están adornando mis fotos con unos bellos cuernos. ¿Tú que opinas?

—No, no es así. Yo... —Lo interrumpo, ya sé que se disculpará—. ¿Lo sientes? ¿Es lo único que siempre vas a decir cuando hagas algo mal?

—No, no. Yo realmente lo siento, es que... —Se queda callado. Espero a que vuelva a hablar, pero no lo hace.

—Creo que hubiera comprendido si me decías que no sentías lo mismo que yo cuando te lo dije en las aguas termales. Solo me dijiste "Perdón" cuando salí a comer en medio de la noche y yo como toda estúpida, te perdoné. ¿Creíste que iba a perdonarte esto también?

Sigue callado.

«¿Por qué no hablas? ¿Acaso no quieres arreglar las cosas ¿Te importo muy poco?»

Empiezo a jugar con mis dedos esperando a que Felix se decida a hablar, la pantalla de mi celular se ilumina sobre la mesita ratona.

Tomo mi celular, es un mensaje de MinGyu.

Sunbaemin

Esta es la ubicación del departamento y el código.

Espero un rato más mientras le agradezco a MinGyu.

—Vamos a separarnos —Me muestro firme, a pesar de que por dentro siento que estoy muriéndome.

—¿Qué? No. Podemos arreglar esto hablando —Toma mi brazo.

—La única que habla soy yo, tú solo optas por el silencio —Me suelto de su agarre y me acerco a tomar las maletas y el bolso.

Le doy una última mirada; no se levanta, no me mira, solo se queda en el sillón. Mi vista comienza a nublarse y antes que Felix me vea así, cierro la puerta.

Ahora sí estoy llorando.

«Todavía tienes tiempo de venir aquí y que arreglaremos las cosas hablando, como siempre lo dices...»

Las puertas del ascensor se abren, meto las maletas y entro.

—¡Espera! —Alguien grita, no logro reconocer de quién es la voz, pero toco repetida veces el botón del ascensor para que las puertas no se cierren.

—Fe... —Quedo callada al ver que esa figura varonil y esa voz no es de él, si no de mi amable vecino. Limpio rápidamente mis lágrimas.

—Gracias—. Hace una reverencia, se coloca a un costado y mira mis maletas—. Espero que se solucione por lo que estés pasando.

—Gracias —Hago una reverencia y aprovecho para pedir un taxi, reviso mis mensajes, pero ninguno es de él. Todos de la empresa hablando de la increíble noche que pasaron.

«Creo que he tomado una buena decisión...»

Si la he tomado ¿por qué me siento así?

¿Por qué siento que mi corazón se desgarra y va desapareciendo de a poco?

¿Así es como se sienten las personas enamoradas cuando son traicionadas?

El ascensor baja rápido, cosa que casi nunca hace.

Ni en mis sueños imaginé que mi vecino fuera tan sensible, sí sabía que era muy amable. Él nos ayudó en varias ocasiones con problemas en el departamento, pero su empatía el día de hoy me hizo sentir un poco mejor.

Se quedó a mi lado palmeando mi espalda, mientras lloraba, esperando que llegara el taxi, también me ayudó con mis maletas y volvió a darme unas palabras de aliento.

El departamento de MinGyu está a tres calles de la empresa, eso es bueno porque podré ir caminando hasta allí y despejarme un poco.

Ingresé el código, al momento de entrar me invadió un aire helado.

«¿Por qué no se siente cálido como nuestro departamento?»

Dejo mis maletas a un costado y recorro el lugar, cada vez que exploro más este departamento me inunda la tristeza y como si se tratase de una muñeca de porcelana; me quiebro, pero esta vez no puedo controlar mi llanto como en el ascensor.