Caminar por los pasillos de una escuela puede que sea la tarea más fácil para las personas que encajan con la palabra extrovertido, sin embargo, caminar por esos mismos pasillos de esa misma escuela para los otros tipos de personas resulta ser la tarea más difícil, y es entonces donde te das cuenta que ese otro tipo de personas son las que encajan a la perfección la palabra introvertido y aunque la vida escolar de esos dos tipos de personas parece ser quienes más importan, me atrevo a decir que existe grupo invisible-visible y son aquellos individuos que encajan a la perfección y sin ningún toque de mantequilla dentro de las dos palabras. Son una mezcla rara de introvertidos y extrovertidos.
Por lo tanto, hablamos de los normales, con características normales que muy rara vez (y por rara vez me refiero a siempre) presentan signos de talento o aptitudes sobresalientes, pero eso no quiere decir que su vida no sea importante.
Entonces me encuentro justo en la entrada de dicha escuela cuyo nombre me parece de lo más simple pensando en cuan divididos estamos, ¿la razón?, no lo sé, supongo que el reflexionar sobre la jerarquía escolar me parece impresionante y un tema perfecto para discutir con el grupo de inadaptados al que llamo amigos.
─Sabes que estás estorbando, ¿verdad? ─escucho la voz tan cerca de mí que me sobresalto y me volteo para ver al dueño de dichas palabras.
─Lo sé, pero encontré más interesante reflexionar sobre la jerarquía escolar que pasar para ir a mi primera clase ¿sabes?
─Supongo que está en ti ser rara.
─Supones bien.
Lo miro realmente bien y es entonces descubro que es una de las personas bajo la clasificación Extrovertido, así que solo le sonrío y comienzo mi camino directo al basurero que llamo casillero.
─ ¡Ten un buen día! ─lo escucho gritar y me giro caminando de espaldas para regalarle una sonrisa más.
─ ¿Se supone que debo decirte “Igual para ti”? ─le pregunto sonriendo mientras me encojo de hombros.
─ ¡Algún día serás amable conmigo!
Es lo último que le escucho gritar mientras sigo mi camino hacia mi casillero.
Creo que después de mi monólogo interno sobre la jerarquía escolar y mi breve charla con lo que parecía el rey de los Extr. aún permanece la duda de que clasificación soy. Bueno dejémoslo en que me clasifico en ese pequeño grupo que encaja sin un toque de mantequilla entre los extrovertidos e introvertidos, es decir, soy una Mezcla Rara.