-T/N- susurró Jungkook, recibiendo tan solo un pequeño sonido soñoliento por parte de T/N.
-T/N ya es mañana- dijo suavemente.
-Quiero seguir durmiendo- después de decir aquello me di cuenta de que Jungkook había entrado a mi habitación, además cuando duermo amanezco totalmente desarreglada, me levanté rápidamente y le pedí a Jungkook que se retirara ya que comenzaría a arreglarme.
Al verme en el espejo, en serio una vergüenza total me invadió, "¿por qué a mí?" más bien "¿por qué un chico tenía que verme en este estado?", aunque Jungkook es una criatura, ¡pero igual es un chico!
¡Qué vergüenza!
-T/N, ¿estás bien?- dijo tocando mi puerta -¡Sí! ¡No te preocupes!- respondí.
Mentía, ahora no podré verlo como antes por la incomodidad. -mejor no pienso algo más, me alistare porque se hará tarde-
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-¡Jungkook!- exclame al ver como tomaba casi todas las bebidas de banana, este solo me miro y sonrió inocentemente.
-Aun alcanza el tiempo así que prepararé tus dichosas algas que también me interesan probarlas- comente para comenzar a cocinar.
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-¡Listo!- anuncie tras acabar de cocinar -huele bien, no era necesario preparar las algas ya que las consumo frescas pero se ve delicioso- comento Jungkook.
-Y recién lo dices, bueno comamos que se hará tarde- ordené.
-Jungkook ese trabajo es sencillo, solo tienes que llevar encargos de cartas, creo que también ayudaras al equipo en el que estoy-
-Puedo aprender rápidamente- dijo para terminar de comer sus algas nutritivas.
-Vamos ya es hora- anuncie y salimos de mi casa.
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Decidí que para que no haya malos entendidos entrar yo primero y luego Jungkook. Pero no vi a amiga Suyeon quien siempre llegaba más temprano que yo.
La hora de trabajo inició y Jungkook fue guiado hasta la oficina de Jieyoung. Por fin pude ver a Suyeon, no se veía bien, traía unas ojeras que espantaban.
-Suyeon ¿por qué traes esas ojeras?- susurré -¿en serio se ven? mis esfuerzos de maquillarme fueron en vano- respondió. -entonces si ahora estas maquillada, no quiero verte sin maquillaje podrías espantarme- bromeé. - JAJAJA que graciosa- comento molesta.
-solo bromeó pero ¿qué ocurrió para que tengas así tu rostro?- pregunté, Suyeon solo sonrió al parecer recordando -Toda la noche no paramos de hablar, esa fue una hermosa experiencia, hice una video llamada con Mark y no dormimos- dijo para seguir sonriendo,
Estaba a punto de responder sin embargo la presencia de Jieyoung nos interrumpió.
-Buenos días, hace unos días requeríamos de personal nuevo así les presentaremos a dos nuevos empleados, apoyaran a este equipo- anuncio.
-Mi nombre es Jeon Jungkook- dijo para dar una reverencia.
-Mi nombre es Choi Jong Ho- este también dio una reverencia.
-Mark ¿podrías encargarte de darles unas indicaciones?- preguntó y Mark solo asintió, es el líder de nuestro equipo.
-Dicho esto me retiro que tengan un buen día- dijo y se fue Jieyoung.
Mark se acercó a conversar con los "nuevos" en el equipo. -Hey T/N- susurró -dime- respondí -esos chicos están muy guapos- comentó.
-Me sorprendes Suyeon ¿cómo es posible que veas a otros chicos teniendo novio? además uno de ellos se ve mucho menor que tu- dije para comenzar a trabajar.
-T/N no puedo evitar que mis ojos vean bellezas- bromeó, sin duda Suyeon no tiene remedio.
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-Compañeros les pido un minuto de su atención- anunció Mark -bueno tenemos a dos nuevos reclutas así que hagamos nuestra tradición de bienvenida- comentó.
-¡Hoy en el Karaoke junto al mar!- exclamo contento.
No puedo permitir que Jungkook vaya a esa bienvenida, no lo recomendaría.
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La hora de la salida había llegado, hace un momento le dije a Jungkook que me esperará en la playa. Y al llegar lo vi sentado observando el paisaje.
-Jungkook no puedo permitirte de que vayas a esa bienvenida- anuncie -¿por qué?- preguntó desconcertado -como puedo explicarlo, es que...- dije pero note que se distrajo y al ver de qué se trataba.
Él estaba viendo a un pequeño niño votando su basura, recordé que su deber como principe del reino de las sirenas era descubrir el aumento de la contaminación y decidí acercarme a ese pequeño niño.
-Hola, creo que deberías llevar esa pequeña basura a su lugar- comente pero este pequeño niño no me obedeció sin embargo Jungkook se acercó.
-¿quieres escuchar una historia?- pregunto al niño y este asintió.
-Erase una vez, en una hermosa playa, en donde las gaviotas volaban todas felices y los cangrejos caminaban alegres, estos vivían en armonía al igual que los peces.
Un hermoso día, un pequeño niño visitó la playa, jugó un largo rato, sin embargo este niño dejo su basura. Esta pequeña basura fue soplada por el viento siendo arrastrada por el mar.
Pasaron los meses y aquella limpia playa fue llenada de basura, el mar enfermó y con ello los peces, las gaviotas y los cangrejos también.
Las gaviotas ya no volaban alto, los peces comenzaron a morir y los cangrejos ya no vivían felices.
Esto preocupó a los habitantes bajo el mar, incluyendo a las sirenas. Decidieron que con su poder mágico, encantarían la playa para que nadie más ingresará a contaminarla- culminó.
-Pero las sirenas no existen- dijo inocentemente, Jungkook solo sonrió.
-Si pero ¿te gustaría que esta playa esté contaminada?- preguntó mientras se agachaba a la altura del pequeño.
-No...- dijo bajando el rostro, este pequeño reflexionó por un momento y levantó la mirada. -tiene razón joven, no permitiré que esta pequeña basura cause un gran daño a esta bonita playa- dijo mostrando una linda sonrisa para irse.
Eso si fue impresionante.
-¿Qué fue eso?- pregunte y Jungkook soló elevó los hombros. -¡Wow! eso fue sorprendente, podría contratarte para que cuentes historias a mi sobrino- dije aplaudiendo -¿tienes más cuentos?- pregunte y Jungkook posó su mano detrás de su nuca -creo que si- respondió.