Tercera melancolía nocturna: Azul composición
Vemos en Bemol y quemamos
La sinceridad,
Permeándola al molde del ideal.
Si tus acordes no están acorde
Habrá un cordón entre tú y la muchedumbre
Sedienta de quietud, ahogada de virtud.
El agua también huye de las durezas
De las piedras e igual las corroe y merma.
El agua de la noche la música del yacimiento devorará,
En azul sintonía te devolverá
Las tardes reverdecidas,
Reverencia a las amapolas vencidas.
Vemos en Bemol,
Oímos en clave de sol
Y con claveles para la luna.
Claveles para que veles por las mieles de la luna...
Involuntarios marchamos al redoble repetido,
Imaginarios rotos con la imagen del crujido.
Al margen del rugido, silencioso ruido.
Sólo logro escuchar el eco en las ondas,
Las odas de la superficie acuática,
Las opiniones estúpidas de los ligeros,
Las arias líquidas de esta ópera desatinada.
Soledad es esta sinfonía desafinada
Cuando...
Sólo vemos la azul composición
De un mundo en descomposición.
Te dará la noche
Mieles amargas para tolerar las pesadas cargas,
Claves para que veles tus claveles,
Claveles para que les des a la luna.