15 (Halloween M.Pov) 1ra parte.

Madison Pov.

Estaba en dudando si ir o no ir a la fiesta de Halloween, el disfraz que había traído mi madre estaba bien, pero para una fiesta infantil.

Dylan se iba a reír de mi si me viera con este disfraz y tal vez me deje de hablar cuando se dé cuenta que con la que ha estado hablando soy yo, Madison Pettis.

Miré la hora y ya estaba haciéndose tarde, así que me decidí, si iba a ir, al final de cuentas, es una simple fiesta, ¿Qué podría pasar?

—¿Aun no te haz arreglado? Mira la hora, son casi las 6:00 p.m —mi madre entró a mi habitación con un boté de pintura roja y me hice una pequeña idea sobre para que lo va a usar.

—¿Dorothy? En vez de dar miedo, voy a dar risa —me crucé de brazos y resignada me senté en la cama, pero me levanté rápidamente al sentir el traje debajo de mi.

—Colócate el vestido, yo te daré unos retoques para que seas una Dorothy de terror.

Hice caso a lo que dijo, me coloque el vestido y me sentía como niña pequeña en su fiesta de 5 años, no me gustaba para nada, tomé un peine y separé mi cabello en dos para después hacerme las coletas de Dorothy, mi mamá tardo casi todo el día en alaciar mi cabello ya que es muy rudo.

—Te vez linda.

—Me miro muy aniñada.

—Guarda silencio y ven acá, te daré los últimos retoques.

Con una brocha empezó a pintar el vestido, simulando parecer sangre, no aguanté las ganas de reír, me veía graciosa, de vez en cuando mi madre me daba pequeñas palmadas para que dejase de reír pero era inevitable, al final quede bien, daba un poco de terror, todavía me miraba muy niña.

—Listo, te espero en el auto para irte a dejar.

Se limpio las manos y salió de mi habitación, dejándome sola haciendo que mis pensamientos vuelvan y que de nuevo los nervios se hagan presentes, espero que a la hora no me hagan una mala jugada y terminé diciendo estupideces, eso asustaría a Dylan.

Guarde en mi bolsa todo lo necesario, mi teléfono, mi cartera y números de emergencia, para después bajar a la sala, al llegar me impresione al ver a Ethan sentado en el sofá bebiendo una botella de agua mientras miraba el televisión, estaba vestido de un hombre lobo.

—Oh, olvidé decirte que Ethan había llegado —dijo mi madre antes de entrar a la cocina.

Ethan solamente me sonrió y agitó su mano en forma de saludo para después levantarse y tomar mi bolsa.

—Se supone que es una fiesta de Halloween, no una infantil.

—¿Sabes una cosa? No iré —comencé a retroceder pero en un movimiento rápido Ethan me había tomado del brazo.

—Es una broma Madi, vamos, la fiesta comenzará en unas horas.

Mi madre estaba muy emocionada, no dejaba de tomarme fotos con Ethan e incluso ella se tomó algunas con nosotros, preparó todas las golosinas para los niños, Ethan tomó algunas a escondidas, es un amante de las golosinas.

—¡Diviértanse!

Durante todo el camino Ethan no dejaba de cantar canciones de Coldplay mientras que yo miraba por la ventana pensativa, ¿Qué estoy haciendo? En cuestión de horas me encontraría con Dylan, no quiero imaginarme su reacción, tal vez me llame acosadora y me deje en ridículo frente a toda la preparatoria, si algo pasa, caeré en una enorme depresión.

31 de diciembre del 2016.

Dylan:
Ya estoy en la fiesta, es la mejor.
7:48 p.m

Michelle:
Estoy a unas cuadras, tengo nervios.
7:49 p.m

Dylan:
No tienes por que tenerlo, no te haré daño.
7:50 p.m

Michelle:
Lo se, bueno, ¿En donde nos vemos?
7:50 p.m

Dylan:
En la fuente de sangre, esta a espaldas de la mansión, la reconocerás porque esta adornada con calaveras y un gran chorro de sangre artificial.
7:52 p.m

Michelle:
Vaya, eso es tenebroso, nos vemos ahí, no te vayas a reír, pero te recitaré un poema de William Shakespeare, estoy inspirada.
7:53 p.m

Dylan:
Sería lo más tierno en una chica, te espero.

7:55 p.m

El sonido de la música se escuchaba muy fuerte, varias personas estaban afuera de la mansión conversando, tomándose fotos e incluso bailando, me imagino como estaría por dentro.

Ethan bajó del auto para abrir la puerta de mi lado, es todo un caballeroso. Me tomó del brazo y empezamos a caminar por la gran alfombra que conducía hacia la entrada, los nervios empezaron a acumularse cuando estuvimos dentro. Me quedé con la boca abierta.

—¡Sonrían! —una chica vestida de hada se colocó frente a nosotros con su cámara, Ethan y yo sonreímos—. Espero que disfruten la fiesta, en unos momentos comenzará el Show Terrorífico, también se rifara un IPhone al final, ¡Diviértanse!.

La chica se fue a otro lado meneando sus alas, tomándole fotos a las demás personas y chillando de emoción. Al menos ella es feliz.