Capítulo 51
Las pautas
Oonagh pidió a todos que salieran ya que debía decirle a Sirsha en secreto cómo usar el Cristal, la historia de éste y todo a lo que se enfrentaría.
Declan y Gael salieron a las inmediaciones del bosque.
Gael: (orgulloso de lo que los años habían hecho de Declan) Estoy muy orgulloso de ti muchacho. Me salvaste y cuidaste de Sirsha todos estos años.
Declan: (mirando perdido el horizonte) Con mi tío de instructor no me fue difícil entrar en la guardia de Cronan y escalar posiciones.
Gael: No sólo fue la instrucción de tu tío. La fuerza de tu corazón y tu bondad hicieron el resto. Si no tuvieras coraje y determinación, de nada hubiera servido el conocimiento que te fue impartido. Aún desde pequeño, sabía lo que serías. Lo llevabas en el corazón y en la mirada.
Declan: Gracias Señor.
Gael: Cuéntame de Sirsha.
Declan: (con la mirada detenida a lo lejos) ¿Qué desea saber?
Gael: Todo lo que puedas decirme. Deseo conocer a mi hija.
Declan: Es determinante y no se detiene frente a un obstáculo. No le importó nunca lo que pensara su tío. Ella defendía al pobre y al abandonado. Aún a costa de severos castigos.
Gael: ¿Acaso Sirsha sufrió violencia?
Declan: Sólo en mente y en espíritu. Pero mientras más quería someterla Cronan, más se resistía ella.
Gael: Estoy orgulloso de mi pequeña. Podría haber sido de otra manera.
Declan: Imposible señor. Tiene su mismo corazón y nobleza.
Gael: ¿Qué más?
Declan: (olvidándose por un momento con quién estaba hablando a medida que avanzaba en su descripción de Sirsha) Lucha por el pobre. Es fiel a sus principios. No se agota por nada. Si está triste se repone rápido. Es testaruda. No se puede hablar con ella. Siempre tiene la razón. Y si no la tiene, te enloquece hasta que creas que sí. Cree que puede controlarlo todo. Me vuelve loco. A veces tengo ganas de... pero... Cuando entra a un lugar es imposible no notarlo. Irradia fuerza y... a pesar de ser tan... Lo siento su alteza. Me excedí en mis definiciones de su hija.
Gael: (sonriendo) No te preocupes. Entiendo. Más de lo que crees.
El rey se acercó al capitán para tomarlo de los hombros:
Gael: Siempre tuve fe en ti y sé que mi hija estará bien contigo.
Declan: Yo la protegeré y destruiremos a Jarlath.
Gael: No me refería a eso solamente.
Declan: (mirando a los ojos a su rey) Señor...
Gael: No digas nada. Eres lo único bueno que tiene mi hija.
Declan: No tengo derecho.
Gael: No. Estás equivocado. Nadie mejor para ella que tú.
Declan: ¿Y qué siento yo?
Gael: (volteando y retirándose) Aquí es donde me retiro con mi venia.
Editado: 16.09.2020