Capítulo 57
Sirsha y Aoife
Cuando Aoife vio a Sirsha se le heló la sangre. Ambas estaban a poca distancia, pero en celdas separadas.
La princesa permaneció en silencio un largo rato. Pensaba en que si Declan la amaba, sabría qué hacer. Era riesgoso que ella tuviera el cristal y lo dejó en manos de quien amaba.
Su prima quebró el silencio:
Aoife: ¿Estás contenta? Tus enemigos yacemos aquí.
Sirsha: Nada de lo que venga de ustedes me pone contenta. (sacando el colgante que le entregó Cian antes de su partida y arrojándolo a las manos de su prima) ¡Toma!
Cuando Cronan vio lo que su hija tenía en sus manos palideció. Una mezcla de odio y amargura lo invadió. El rey supo que su sobrina sabía más de lo que había salido a buscar.
Cronan: (levantándose de entre las rocas) ¿De dónde lo obtuviste Sirsha?
Sirsha: ¿Te preocupa querido tío?
Aoife: ¿Qué es esta porquería sin valor?
Sirsha: De tu padre prima.
Aoife: (a Cronan) ¿Qué es esto padre?
Sirsha: De tu padre verdadero.
Cronan: (asustado) No la escuches hija.
Aoife volvió a repetir su pregunta. Se enajeno de la situación al escuchar ¿padre verdadero?.
Sirsha: Toda mi vida te burlaste que era una bastarda. Todo llega prima.
Aoife: (gritando) ¡¿Qué es Sirsha?!
Sirsha: ¿Por qué no se lo preguntas a mi tío?
Cronan: ¡No la oigas Aoife!
Aoife: ¿Qué es lo que quieres insinuar?
Sirsha: Que Cronan no es tu padre. Tu padre es quien me dio ese colgante.
Aoife se paró y miró a Cronan.
Sirsha: Tu padre quedó atrapado en un mundo subterráneo para salvar a tu madre y a ti. Eres otra víctima. Tu madre amaba a un guerrero llamado Cian que...
Cronan: (fuera de sí) ¡Basta!
Sirsha: (gritando a los cuatro vientos) Es hora de que sepa que ella también es una víctima de tus mentiras. (A Aoife apresuradamente) Tu madre fue una princesa que fue obligada a casarse con el que crees tu padre, pero la realidad es que
estaba enamorada de un guerrero que trató de dar su vida por sacarlas de aquí. Se murió atrapado en un mundo del que no se animó a salir y no supo hasta momentos antes de morir que era progenitor de una niña. Y te lo repito, se
llamaba Cian. Era el tercero al mando del reino de mi padre.
Aoife se quedó callada mirando a Cronan.
Sirsha: Creías que sabías toda la verdad de mi vida y quisiste sacar ventaja. ¿Quién es la bastarda ahora?
Aoife: (tratando de poner sus pensamientos en orden) ¿Es verdad padre?
Cronan se quedó en silencio. Aoife comprendió todo.
Aoife: ¿Y qué vas a hacer conmigo?
Sirsha: Si crees que voy a escapar milagrosamente de aquí y voy a matarte, como
trataron de hacer Jarlath y tú conmigo, te equivocas.
Aoife tuvo un ataque de nervios y se abalanzó sobre Cronan. Pero no era por no ser su hija, sino por darse cuenta que era el fruto de una relación en la que su sangre no era real. Al menos, a medias.
Sirsha descubrió que su prima estaba desquiciada por el poder.
Mientras observaba a sus enemigos, los guerreros de Jarlath entraron a su celda para llevarla a las terrazas del castillo al lado de su hermana Mebh.
Editado: 16.09.2020