El síndrome del agua en el desierto

"No te vayas..."

"¿Por qué?"

"Tengo miedo"

"¿A qué le tienes miedo? ¿A la crisis de soledad que el posmodernismo y la sociedad líquida han traído al mundo?"

"No, tengo miedo de que venga otro ladrón."

Sayori miró a los ojos a Luis, él podía ver en su rostro una mirada que mostraba debilidad.

"Quédate aquí"

", , ,"

Luis en el fondo quería irse, pero no podía dejarla simplemente allí, aun sabiendo que todo esto era una tontería, decidió quedarse.

"Okay, me quedo"

"¡Yupi!"

Sayori abrazó el brazo de Luis como si de una niña abrazando a su padre se tratara.

". . ."

Luis no hizo reacción alguna, al parecer, el estar enferma hacía que Sayori se comportara de forma infantil y tonta.

"No crees que a tu novio le molestaría esto"

"Ah.... sí, tienes razón,,,"

Sayori algo triste liberó su brazo y Luis trajo una silla para sentarse a su lado.

"Hablando de él, ¿va a venir?"

"No... no va a venir..."

"¿Por qué? ¿No vendrá a ver cómo estás?"

"No... se fue a jugar fútbol con sus amigos"

"Ja"

Luis dejó salir una carcajada recordando los memes de fútbol y sus diferentes formas de escribir mal esa palabra.

"El fúrbol entonces"

"Siempre es así, aunque entienda que él también tiene su vida, no puedo simplemente no sentirme mal porque prefiera eso a estar conmigo"

"Sí, es feo que le dé prioridad a esas cosas"

"¿Verdad?"

Sayori con ojos sorprendidos vio a Luis.

"Y lo peor es que si yo no tengo tiempo para él, él se enoja conmigo"

"Vaya hipócrita"

". . ."

"¿no pensaste en terminar con él?"

"¿Eh? ¿Terminar?"

"Sí, por lo que vi de él, es un tipo tóxico, ni buscando encuentras algo así en Semipalatinsk"

". . ."

Sayori se quedó un rato en silencio.

"No, pero él es un buen tipo, solo es un poco celoso porque me ama"

". . ."

Luis sabía exactamente lo que pasaba, para él era probable que esta chica pasara algo que él llamaba "Síndrome del agua en el desierto"

"Sí, tú lo dices"

Luis sabía que no podía hacer nada más, podría hablarle más sobre por qué estaba mal su relación y que debía dejarlo allí, pero no era la primera vez que Luis trataba con chicas así.

"Bueno, ¿ya me puedo ir?"

"No, quédate un poco más"

Luego de decir eso, Sayori bostezó.

"¿Tienes sueño?"

"Creo que sí,"

Sayori parecía estar somnolienta luego del bostezo.

"Deberías dormir"

"Pero tengo miedo"

". . ."

Luis ya se estaba cansando un poco de esto, a pesar de que fue decisión suya quedarse y que era muy gracioso verla así.

"No me iré, tómame de la mano"

Él extendió su mano a la cama de Sayori y ella la tomó con su mano.

"¿Me prometes que no te irás?"

Dijo luego de voltear su cuerpo al lado de Luis para tomar su mano con sus dos manos.

"Sí, sí, no me iré, lo prometo"

Al escuchar eso, Sayori cerró los ojos y empezó a dormir. Luis podía ver la expresión tranquila que se había formado en su rostro. Se sentía algo mal por ella y su relación con Isaías. El "Síndrome del agua en el desierto" es la forma en la que él llamaba a las expresiones de amor que hay en las relaciones tóxicas, así como cuando uno se encuentra en un desierto y tiene solo un vaso de agua, ¿dónde aprecias más el agua? ¿En la ciudad? o ¿en el desierto? Para Luis, algo similar pasaba con las relaciones tóxicas, estar en una relación donde la mayor parte del tiempo son peleas y discusiones sin sentido sería en este caso el desierto y el agua serían esos pocos momentos de amor, las personas ven esto y se ciegan por ese bonito momento efímero.

"Pobre chica"

Parecía que Sayori se había quedado dormida y ahora tocaba sacar la mano de sus dos manos sin que se despertara.

"Vamos a ver qué sale primero, mi mano o la nueva edición de Nostrafort"

Luego de 15 minutos sacando de a poco su mano, Luis pudo por fin sacarla de las manos de Sayori.

"Al fin"