-Señoria, señorita- repetian mientras que tocaban mi hombro.
Exaltada y recordando donde me encontraba desperte mirando a mi alrededor topandome con una señora pulcramente vestida y con una sonrisa amable junto a una nena quien sostenía una muñeca y me miraba con una risueña sonrisa.
-si disculpe, me quede dormida-dije mientras me paraba y trataba de saludarla, pero recorde mi aspecto y mis manos; Así que rapidamente las escondí y avergonzada le dí una mirada de disculpa.
-no te preocupes mi niña, gracias a tí mi hijo esta vivo y no le ha sucesido nada. Te agradesco de corazon por todo lo que haz hecho y el noble gesto que tuviste de quedarte aca esperando. Mi nombre es Carla Keller y estoy muy agradecida- dijo aquella señora tan risueñamostraba gratitud con su mirada dandome un abrazo.
-Señora Carla no tiene nada que agradecer, es lo que todos hubieran hecho en mi situacion-dije mientras que poco a poco me sentía avergonzada por tan lindas palabras de la señora.
-Te presento a mi linda y hermosa nieta Alessia- me dijo mientras que cargaba a una linda bebé quien me sonreía risueña.
-Hoba yo me gamo Adeshia y telo 2 año di abuelita (Hola yo me llamo Alessia y tengo 3 años)- me decía la nena con una linda sonrisa y esforzandose en hablar lo mejor posible.
-Si mi niña linda- decía la Señora Carla mientras que le daba un besito en sus mofletes regordetes de tan linda nena.
-Hola Alessia, mi nombre Annelisse y puedes llamarme Ann- decía mientras que le hacian una cara graciosa y logrando que ría muy risueña. -Bueno señora Carla, creo que es hora de retirarme y perdone si la incomode por quedarme dormida- le decia mientras que agarraba mi cartera trantando de disculparme
-Nada de eso hija, muchas gracias a ti. Mi familia esta en deuda contigo, ahora anda a los servicios higienicos, lavate tus manos y cambiate de ropa. Creo que esta ropa pueda quedarte, el guardespaldas de mi hijo ha podido conseguirte esto. Espero y te guste, quiero que te quedes, para que mi hijo pueda ver a su salvadora- me decia la señora dandome una bolsa y empujandome levemente a un pasillo donde supongo se encuentra el baño.
Con la cara roja de pena y sin entender asentí con la cabeza y camine hasta llegar a la puerta del baño. Abrí y mirandome al espejo suspire pensando en todo lo que habia pasado y en aquel desconocido que en ese momento importaba mucho para mi. Lave mis manos, cara y mi boca gracias a que siemore cargo un cepillo en mi cartera, realize una coleta con mi cabello. Me retire la ropa sucia y agarre lo que estaba dentro de la bolsa, dandome cuenta de que habia un vestido corto muy bonito de color amarillo, me lo coloque y mirandome al espejo nuevamente pude ver que me quedaba hasta un poco más arriba de las rodillas. Trate de sonreir al espejo naturalmentr tratando de tranquilizarme, ordene mi ropa sucis y la coloque en la bolsa. Cogi mi celular rapidamente fijandome en la hora, siendo ya casí la hora de abrir la cafeteria; mande un mensaje a Mimi explicandole la situacion rapidamente y que debian cerrar la cafetefía por hoy hasta el primer turnl. Cuando ya habia enviado el mensaje y estaba por guardar el celular, este se apago avisandome que mi bateria ya habia muerto.
Cansada nuevamente me dirigi hasta la sala de espera y pude ver como la niña dormía en los brazos de su abuela, y a lado de ella se encontraba un señor conversando muy entretenido con la señora Carla.
Apenada por interrumpir su conversacion me acerque -señora muchas gracias por esto, cuando pueda le regreso la prenda que me ha dado- le decía tratando de sonreír.
- no te preocupes por ello niña, tomalo es para tí, mira te presento a Rafael- me decía mientras que señalaba al señor que estaba sentado junto a ella.
-Hola chica bonita, veo que te quedo bien el vestido. Solo bromeo, gracias por todo lo que hiciste por mi mejor amigo- dijo ríendo- Me presento soy Rafael Lorenz mejor amigo, guardespaldas y mano derecha del bello durmiente a quien ayudaste- me decía mientras que sonreíay me saluda con un apreton de manos.
-No deben de agradecer, lo que hize fue de corazon y mi nombre es Annelise- dije cordialmente mientras que devolvia el saludo y tomaba asiento en uno de los sillones.
Sentados y hablando en voz baja sobre como fue todo lo que yo pase en la noche anterior, tratando de tranquilizar a la señora Keller sobre la salud de su hijo. Una enferma salío y caminado directamente hasta nosotros -Familiares del señor Thomsen Keller- dijo mientras nos miraba.
-Es mi mejor amigo y ella su madre-dijo Rafael parandose junto a la señora Keller quien sostenía a la nena dormida en sus brazos.
-La salud del paciente es estable- dijo mientras que todos suspirabamos aliviados.
-Todo sus signos vitales estan bien, solo tiene pequeñas contusiones debido a los diferentes golpes que tuvo en el accidente, su cabeza esta en perfecto estado, su pierna solo tendra que estar vendada por unas tres semanas y tomar los diferentes calmantes y medicamentos que el doctor indicara al momento de su salida de nuestro centro. Por el momento el paciente estara internado hasta ver como evoluciona sus heridas y como respondera su cuerpo a los medicamentos haciendo un debido moritero por su condicion de paciente diabetico- dijo mirando su cartilla y viendonos a todo. -pueden pasar a verlo ya esta despierto pero solo pueden entrar maximo dos personas y no se permiten niños dentro de las habitaciones- nos dijo mientras que se retiraba.
La señora Keller feliz empezo a llorar de la emocion y señor Rafael la abrazo con la misma emocion por la salud de su amigo. Yo verdaderamente me sentía feliz por Adrian y ver que todo se encontraba bien en él. Fue un susto tremendo pero todo salio bien...
-Annelise podriamos ingresar primero Rafael y yo, puedes cargar a mi pequeña mientras que pasamos a ver a su padre porfavor- me decía la señora Carla llorosa y apenada.
-No se preocupe señora, yo solo estoy aca para ver como ha reaccionado su hijo, pero felizmente esta bien y eso me tiene más tranquila. Y yo me hago cargo de la nena mientras que ustedes entran y pueden ver a su hijo y amigo. Por cierto pueden decirme Ann- dije mientras que cargaba a la nena y los miraba a los dos con una sonrisa cordial.
-Muchas gracias hija, eres un angel- dijo la señora con una sonrisa y abrazandome con cuidado por la nena. Rafael me sonrío agradecido y junto a la señora Carla fueron por la puerta a ver a Adrian.
Yo por mi parte me sente y pude observar a la pequeña mientras dormía profundamente, sus dos coletas y cabello castaño claro y pequeño puchero hacian de ella una imagen muy admirable de fotografiar. Observandola y pensando en su madre y esposa del Señor Adrian porque no se encontraba presente.
Un poco distraida y pensante pasaron los minutos, rato despues, pude ver como la señora Carta junto a Rafael regresaban con una cara de tranquilidad y un poco de incomodidad.
-Ann puedes pasar a verlo si deseas, creo sería mejor que puedas saludarlo antes de que quieras marcharte, pero debes tener un poco de paciencia esta con mal humor por su estado- me decía la señora con una pequeña sonrisa y mirada suplicante.
Asinitiendo y con una pequeña sonrisa le pase la niña a Rafael, quien con una mirada de tranquilidad me dijo -esta en la habitacion 404 y suerte hablando con el gruñon durmiente- señalando con su mirada a la puerta por donde ellos anteriormente habian pasado.
Caminando y sientiendo mi corazon palpitar sin sentido, logre llegar a la puerta 404 y con una sonrisa nerviosa y ladeante saluda. -Hola, Soy Ann-
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Editado: 03.07.2020