CREO QUE NO LES ESTA GUSTANDO ASI QUE QUE... HASTA AQUI LA VOY A DEJAR, LA VOY A PAUSAR Y LA VOY A SEGUIR SUBIENDO EN WATTPAD, YA QUE NO HE VISTO QUE LA COMENTEN NI LE DEN LIKE, LO SIENTO POR LAS QUE SI LA LEIAN, COMENTABAN Y LE DABAN LIKE. TAMPOCO VEO MUCHA ACTIVIDAD EN EL GRUPO NO PUBLICAN, TAMPOCO COMENTAN. DE VERDAD LO SIENTO DEMACIADO, ESPERO ME ENTIENDAN.
A la mañana siguiente mire a mi alrededor y note que estaba en mi recamara ¿Cómo demonios llegue hasta acá? Me pregunté extrañada, pues no recordaba haber caminado hasta aquí, me di la vuelta y abrí la boca al ver que estaba con Nicolas
—¿Qué haces aquí? —pregunte echándome para atrás.
—¿¡Que!? —dijo brincando del susto.
—¿Qué sí que haces aquí Nicolas? —le volví a preguntar aun sorprendida.
—Espera ahorita te explico déjame dormir 5 minutos más —dijo sellando sus ojos de nuevo.
—¡Nada de 5 minutos más! ¡Explícame ahora mismo! —dije golpeando su pecho con la almohada.
—Está bien, ayer por la noche vine y Austin me abrió la puerta dijo que estabas mirando una película así que fui, pero estabas dormida —pauso.
—Creí que estarías más cómoda en tu cama así que es por eso por lo que te traje hasta acá, pero cuando te deje me tomaste del cuello con fuerza y pues me acosté contigo y me quede dormido.
—Eres un mentiroso —lo empuje un poco del brazo.
—Claro que no, creo que también dijiste algo como 'Oh Nicolas eres tan sexy' —burlo.
—Definitivamente eres un mentiroso —dije riendo.
—Gracias entonces.
—De nada linda, creo que será mejor que me vaya y más al rato nos vemos —dijo acomodando su cabello.
—Claro suena bien —sonreí.
—Adiós hermosa, al rato nos vemos —beso mi frente y salió de ahí.
¿Por qué abre hecho eso? Dios seguro ahora Nicolas debe pensar que soy una loca o algo así, pero bueno al menos tengo una explicación por la cual amaneció conmigo, me levante y me di una ducha y al terminar de arreglarme baje a desayunar, estaba sola comiendo un cereal y leyendo la parte trasera de la caja, todo era silencio y estaba muy concentrada leyendo.
—Nicolas no bajo anoche —di un salto asustada, pues el silencio se había quebrado tan repentinamente.
—Si lo sé, se quedó a dormir conmigo —dije regresando mi vista a la caja.
—¿Ah sí? ¿Y qué hicieron? —pregunto con una expresión de pocos amigos.
—Dormir —dije sin ni siquiera mirarlo.
—¿Qué no es eso lo que se hace en la noche? —
—A veces, o bueno al menos yo a veces no duermo —dijo sonriendo sarcásticamente.
—Pues si dormimos —Me levante dejando el plato en el lavaplatos y pase por un lado de él golpeando su brazo con mi hombro, por una parte, note como si Austin estuviera celoso, pero luego pensé ¡Que tontería! El no estaría celoso, ¿Por qué debería estarlo? Así que me fui a mi habitación, lanzándome sobre la cama dejando caer mi cabeza sobre las cómodas almohadas, cayendo en un profundo sueño.
Sentí que me sacudían, al principio creí que estaba soñando, pero luego la voz que me llamada sonaba más vivida así que abrí mis ojos muy lento.
—Mackenzie despierta, vamos a salir —dijo Austin acariciando mi cabello.
—¿A dónde vamos? — le pregunte tallando mis ojos.
—De fiesta, ¿Lo olvidaste? Es mi turno de decidir qué es lo que haremos —dijo bajito.
—Claro, lo había olvidado ¿Tengo que usar algo elegante? —cuestione recargándome en la cabecera.
—No así estas bien, vamos que se hace tarde —dijo poniéndose de pie.
—¿Qué hora es?
—Las 8:42 de la noche, vamos que se hace tarde —dijo haciendo con la cabeza una señal de que ya nos fuéramos, fui al baño y cepillé mis dientes y después de eso salí disparada tras de Austin, que estaba calentando su auto para ya irnos.
—¿Seguro de que este es el camino? —cuestione un poco preocupada, pues todo era muy oscuro y muy lejos del pueblo.
—Tranquila hermosa, se perfectamente el camino —dijo volteándome a ver guiñándome un ojo.
Y de repente el auto se fue deteniendo, paramos en un lugar donde había muchos chicos bailando y tomando, todos parecían muy ebrios ya y había una enorme fogata ¿Por qué se empeña Austin en tomar tanto? Pensé, así que rápido fue junto con sus amigos dejándome sola así que me fui a escabullir por ahí mirando a chicos yendo y viniendo.
—¿Aburrida? —me pregunto la voz femenina.
—Jane hola —dije dando media vuelta mirándola.
—Hola Mackenzie ¿Qué haces sola? —cuestiono con una sonrisa.
—Austin se fue con sus amigos y me dejo sola —dije bafeando.
—Vamos, eres como la hermana de Austin así que te puedes juntar con nosotros —dijo jalándome de la mano hasta ellos.
Llegamos y ahí estaba Austin con un vaso de cerveza en una mano y un cigarro en la otra, le sonreí tímida al verlo y él me regreso la sonrisa mostrando sus perfectas perlas.
—¡Mackenzie! ¿Cómo estás? —dijo William dándome un abrazo como si fuéramos amigos de toda la vida.
—Hola William, bien y ¿tu? —pregunte regresándole el abrazo.
—Bien gracias, ¿Quieres algo de tomar? —me ofreció el amable.
—Vamos tomate una cerveza, no te va a pasar nada —me animo Jane
—De acuerdo, no suena mal —dije con una risita.