Capítulo 65 Pedazo de cerebro

Joseph llevó a Mike al laboratorio. Donde dormía su hermano en la cámara de presión. Tan pronto como Mike entró en la habitación de su hermano. El niño volvió en sí. Abrió los ojos y comenzó a reaccionar al espacio.

Una descarga eléctrica recorrió el cuerpo de Mike de un reencuentro completo con su hermano. Ahora podía sentirse completo y ya no preocuparse por nada. A él le gustó el hecho de que estaba al lado de su hermano otra vez. Mientras Mike examinaba a su hermano en la cámara de presión. Joseph aprovechó el momento. Llevó a Mike al cuello con una solución de pastillas para dormir.

- ¿Qué está pasando? - Dijo Mike perdiendo el conocimiento. Comprendió que confiaba en Joseph en vano.

- Lo siento Mike. No podría decirte la verdad. Sabes que una parte de tu cerebro me ayudará a resolver tu misterio. No sentirás nada. Te prometo que todo estará bien. - Joseph tomó a Mike en sus brazos y lo colocó sobre la mesa de operaciones.

Joseph no tenía equipo operativo normal ni instalaciones especializadas. Su quirófano era una pequeña habitación revestida de plástico. Joseph se aseguró de que todos los instrumentos necesarios para la operación estuvieran presentes. No dudó, ya que las pastillas para dormir no podían funcionar por mucho tiempo.

Joseph conectó a Mike con todos los sensores necesarios y procedió a la operación. Joseph necesitaba una parte especial del cerebro responsable de las funciones del habla.

Cogió un bisturí y cortó con cuidado la piel del cráneo de Mike.

Lina y Chris caminaron por el terraplén, no hubo conversación entre ellos. Dado que Chris no tenía habilidades de comunicación social. A pesar de esto, tenían mucho en común. Ambos fueron los primeros prototipos creados en este mundo.

- Cuál es tu nombre. Ya lo sé. Mi nombre es Lina. También soy un prototipo humano modificado genéticamente, como tú. Veo que estás tratando de encajar en la sociedad humana, pero eres demasiado reservado. Puedo ayudarte a desarrollar tus emociones y habilidades de comunicación. - Lina rompió el silencio porque era aburrido caminar por el terraplén.

- No entiendo mucho de este mundo. Mi creador Joseph me enseñó sobre las emociones, pero no me gustan. Creo que son muy tontos. Además, entiendo que el propósito de mi creación fue solo en tu búsqueda. Joseph no me necesita lo más probable es que me destruya tan pronto como ya no me necesite. Por lo tanto, supongo que desarrollar estas cualidades en ti mismo es una pérdida de tiempo. Pero ya sabes, me gusta caminar por el terraplén aquí. Soy consciente de la belleza de este mundo. Lo siento, este mundo está esperando su destrucción. - Aunque había indicios de sentimientos en las palabras de Chris, su rostro estaba frío. Lina estaba molesta.

- Eres demasiado pesimista. No considero que Joseph le haga esto al mundo. No se parece en nada a Joseph de mi mundo. Por alguna razón, me parece que tus otros son intencionales. - Lina consideraba en lo que decía.

- No te hagas ilusiones con nuestro Joseph. Probablemente, ya haya metido las manos en el cerebro de tu amigo…

- ¿De qué estás hablando? - Lina interrumpió a Chris estoy horrorizado

- Mientras te distraigo aquí. Joseph saca parte del cerebro de tu amigo. Yo tenía tal tarea. Tuve que distraerte para que todo saliera bien y no interfirieras. - Lina se detuvo en un lugar. Ella estaba en estado de shock. La niña caminó hacia el laboratorio. Chris tomó su mano.

- ¡Déjame ir! No quiero matarte. - Lina trató de liberar su mano, pero Chris la sujetó con mucha fuerza.

- No quiero molestarte, pero no me derrotarás. Así que vas a caminar conmigo. No quiero matarte ni pelear contigo. - Chris apretó con más fuerza la mano de Lina.

- No me vencerás. Déjame ir Cris. ¡Ayúdame! Te doy mi palabra de que vivirás. - Lina distrajo a Chris con conversaciones para elegir una estrategia de batalla.

- No prometas. Lo que no puedes hacer. - Chris empujó a Lina hacia su frente. La niña no estaba preparada para esto y se derrumbó en la arena. Lina se puso de rodillas su mano ya estaba libre. Chris la soltó cuando Lina se estaba cayendo.

La niña no dijo nada y tomó una gran sacudida de arena en su mano.

- No te resistas. Ven conmigo.- Chris no le quitaba los ojos de encima a la chica.

Lina arrojó arena a los ojos de Chris.

- ¿Qué estás haciendo Lina? - Gritó Chris tratando de limpiarse los ojos de la arena. Mientras Chris intentaba frotarse los ojos y ver algo. Lina se puso de pie. Con ayuda de una fuerte patada a la pierna de Chris. Lina lo derribó. La niña inmediatamente agarró a Chris por la cabeza y le rompió el cuello al emú.

- Te dije que no pelearas conmigo. - Lina se sacudió la arena y corrió al laboratorio.

Joseph cortó el trozo de cerebro de Mike que necesitaba y lo colocó en la solución. Ya había cosido la cabeza de Mike y llevó la muestra a los instrumentos para su estudio.

Lina corrió al laboratorio, vio a Joseph con un tubo de ensayo en el que había una parte del cerebro.

- ¿Qué has hecho? - Lina estaba horrorizada. Se paró descalza en el laboratorio y se preparó para atacar a Joseph.

- Antes de hacer lo que tienes en mente. Te diré lo que hice. - Joseph colocó tranquilamente la muestra de cerebro sobre la mesa. Y se movió un poco hacia un lado para que si Lina ataca, la muestra no se lastime.