Capitulo 4

Narra Julieta

- no puede pasa...- pero el hombre alto y con mirada fría ya está dentro mirándome con una ceja levantada - perdón.

- no te preocupes Sofí - digo caminando hacia mi escritorio - puedes retirarte - ella asiente - Fabiola, déjanos solos.

- ¿segura?- asiento y ella se va dejándome con el hombre que no movió ni un solo músculo.

- ¿qué se le ofrece señor?- me siento y le señalo la silla enfrente de mi escritorio - ¿entonces?

- ¿no quería recibirme? - pregunta sentándose y es muy grande para la pequeña silla - puedo saber el motivo

- como puede ver - digo señalando lo obvio - acabo de llegar no se crea tan importante señor- me recargo en el escritorio - que es lo que necesita.

- veo que recibió las flores - señala en basurero - veo que no le gustaron.

- usted se toma atribuciones que no le corresponde - contraatacó - pero la próxima que se le ocurra mandar algo fuera de lugar asegúrese de que la persona no sea alérgica- expreso con tranquilidad.

-no estaba enterado -ruedo los ojos - bueno, vamos al grano - entiende un pequeño papel - levanto la ceja - es la cifra para que se acueste conmigo- abro el pequeño papel y veo varios ceros

Lo miro y ante su mirada rompo el papel en varios pedazos y los tiro al basurero que tengo junto a mí- desgraciado - digo para mí misma.

- señor Maldonado, no puede llegarme al precio ni aunque quisiera

- ponga una cifra - apoyo mis codos en mi escritorio y quedó callada un momento y me pongo de pie.

parezco atractiva - asiente mirando mis pechos - entonces que es lo que le hace creer que una mujer como yo estaría con un hombre como usted - se pone de pie enfrentándome - es guapo, pero no más haya - su expresión es de rabia ya la conozco- soy joven, guapa, no necesito dinero y me acuesto con quién me gusta no con quien pone un cheque en mis manos - camino hacia la puerta y se la abro- señor si mi cuerpo y mi tiempo tendrían un precio serían billones.

- no sabe lo que acaba de hacer - ruedo los ojos - puedo destruiste en cuestión de segundos

- no me amenacé - lo enfrentó - recuerde que, perro que ladra no muerde- él corta la distancia entre nosotros - así como usted es importante, yo puedo ser su perdición.

Se va sin más, solo me dio un gruñido de despedida, lo que me lleva a recordar las noches en las que estuvimos juntos y enamorados - la única enamorada eras tú - sonrió tristemente, él fue mi perdición, pero yo será destrucción…

Pasaron las semanas y los días atraparon a Luis, el tercero más importante del medio, socio amigo de Maldonado, incautaron mucha droga y mujeres siendo prostituidas, desde la vez que lo enfrente no lo volví a ver por aquí ni a él ni a sus muchachos.

- amiga - giro encontrando a una Fabiola agitada - llegó el turco y quiere verte - miro hacia abajo y ahí está - ¿qué le digo?

- nada - paso por su lado en camino a mi nuevo blanco, el cual es el segundo más importante en el cartel del México y Turquía- buenas noches.

Él se levanta a saludarme con dos besos, uno en cada lado de mi mejilla y llamo a las chicas para que traigan las bebidas.

- cariño, se te ofrece algo más- mis manos están en sus hombros haciéndole unos masajes mientras él está relajado.

- que tal recordar viejos tiempos - rio por lo bajo y me sienta en sus piernas - que dices muñeca recordamos lo bien que nos la pasábamos.

- lo siento cariño - fijo un puchero - si quieres puedes tener a alguna de mi chiquita.

- algún día volveré a tenerte para mí - me encojo de hombros -esas noches las pasamos tan rico - asentí coqueta - no debí dejarte salir del país.

- ahí cariño - me paro y recibo una nalgada, le daría un puñetazo, pero le sonrió con malicia - Lorena - la llamo y ella viene - atiende al señor muy bien - ella asiente con una sonrisa - pasa una linda noche.

Me retiro de su privado para volver a mi oficina, tengo papeles que revisar y firmar el anterior dueño dejo este lugar peor de lo que imaginaba.

-Juli - dice Sofía desde la puerta- el turco buenote quiere hablar contigo - asentí.

- permiso - dice entrando con una sonrisa risa coqueta hacia Sofía - mamacita - guiña el ojo - ¿tienes tiempo?

- para ti siempre¿algo de tomar?- niega y se sienta en sofá -¿para qué soy buena?

- para todo - largo una risita - pero en este preciso momento necesito un pequeño favor - asentí cruzando mis piernas- qué difícil lo haces- su mirada recorre todo mi cuerpo - necesito 5 de tus mejores chicas para un fin de semana - me toma por sorpresa - vamos a tener una reunión importante y quiero que se la pasen bien.

- mira guapo este es un lugar fijo - digo parándome - no presto a mis chicas, si haces tu reunión aquí tendrían un piso para ustedes solos - él se lo piensa.

- un piso entero con todas las comodidades - asentí - ¿cuánto sería?

- 2 millones por chica - digo sin pelos en la lengua - o puedes deberme un favor

- qué tipo de favor mamacita - me encojo de hombros - el favor será - sonreí tomando su mano - prepárame todo para el sábado, no quiero sorpresas

- cuando te he fallado - digo coqueta - además sabes que soy de toda confianza.

- la última cosa muñeca - posa sus manos en mi cadera y yo las llevo a su cuello - ¿cuándo me darás el sí? - sonrió Máximo desde que lo conozco me quiere dar la vida que según él merezco - llevo detrás de ti mucho tiempo.