Mamá, te prometo que después de tantos años voy a vengar tu muerte y cuando termine me iré muy lejos a empezar de cero, sin pasado, sin recuerdos como siempre lo quisimos.
Gruño escuchando mi teléfono sonar, me friego los ojos y miro por la ventana y todavía no amaneció, el número es privado, me levanto sin hacer ruido para que Fabiola no se despierte.
- hola, si diga - hablo y escucho una respiración profunda- hola¿quién habla?
- ¿hija? - esa voz, esa maldita voz otra vez - hija soy yo - mis manos empezaron a temblar - te necesito, hija mía.
Cuelgo la llamada temblando, cada parte de mi cuerpo tiembla su voz, su tono demandante, mi corazón parece que quiere salir de mi pecho. Amaneció hace rato, después de esa llamada no volví a dormir, salí del departamento lista para volver al servicio.
Estoy enfrente del edificio que me ayudó a ser quien soy, bajo de auto y los hombres que están llegando no dejan de mirarme no me molesta, es obvio que no llegan muchas mujeres por aquí. Camino por el lugar escuchando palabras lindas, palabrotas una que otra obscenidad, los pasillos se hacen largo, asta que llegó a la puerta correcta," capitán Adrián Muños" sonrió leyendo su nombre.
Golpeó y abro apenas la puerta - ¿puedo pasar? - levanta la mirada y sus ojos se iluminan.
- claro, pasa - se levanta y corro a sus brazos cálidos que siempre me reciben - te hemos extrañado tanto - su olor inunda mis fosas nasales.
- yo también - digo aferrándome a sus brazos - no sabes cuánto necesitaba este abrazo.
- siempre están para ti - sonrió alejándome - estás hermosa mi bella.
- para nosotros no ahí abrazo - giro encontrando con mi familia León, Derek, Alejandro, William y Martín - ven aquí pequeña - me tiró encima de él y ríe.
- los he extrañado mucho - digo abrazando a cada uno me detengo en Derek - a ti más que a nadie.
Le sonríe y le saca la lengua a León y no puedo evitar sonreí y sentirme en casa otra vez, pasan las horas la locura de la bienvenida duro un rato largo, pero ya estamos trabajando, llamo a uno de mis contactos en la organización.
- gracias te debo una - digo colgando la llamada- Jose Maldonado esta noche tiene una reunión con el camaleón según mi contacto está buscando la protección de los Maldonado.
-Leon ve con la rata - asiente - llévate a Davies, mientras tanto nosotros vamos a buscar algún rastro- No lo tiene que decir dos veces que ya estaba en la puerta hacia el vestidor con León atrás mío. Agarró lo arma y la ubico en mi funda.
- ¿Lista? - asentí - vamos entonces - el camino al auto es en silencio - la rata es un poco especial, pero no hace daño - asentí- solo ponte el pasamontañas, no sabemos quién puede estar vigilando.
El camino y el diálogo con la rata fue muy rápido, solo dijo "nadie sabe dónde es la reunión "eso fue suficiente para tener en claro que los dos peces más gordos están a la mano y a la vez tan lejos. Las calles de esta ciudad son tan bonita, el clima cálido es lo más hermoso si me gustaría vivir aquí cuando me retire muy pronto.
- El jefe quiere vernos en la casa de seguridad - asiento sin prestar mucha atención.
- Sabes que tenemos un auto siguiéndonos - digo mirando por el retrovisor - mira el Cámaro azul.
- Llamaré al capi - asentí - capi tenemos un código amarillo, no tiene placa - escucho que dice algo - es un cámaro modelo ZL1 - me hace señas por el pasamontañas y me lo pongo - entiendo.
- ahora ahí 3 autos - digo abrochando mi cinturón de seguridad - ¿qué dijo?
- Están en camino - dice acelerando - ahí que salir de la carretera, ahí muchas personas - asentí, estoy segura de que Maldonado tiene que ver en esto.
Salió hacia un camino de tierra sin bajar la velocidad y los tres autos también se desvían, esto ya no es casualidad, vienen por nosotros, preparo mi arma y él la suya.
- Están a 5 minutos- busco mi celular, pero no lo encuentro - Davies - levanto la vista y tenemos un auto a nuestro lado.
- Ve para el lado de la playa-se vuelve a desviar derrapando- necesitamos refuerzos- grito en la radio.
- Estamos en camino- dicen Derek en la radio - tenemos su ubicación.
- León - digo mientras el auto impacta en la parte de atrás- acelera - me hace caso, pero si nosotros aceleramos los que nos siguen también - cuidado - señalo el fin del camino.
El auto frena y los tres autos atrás a unos 10 metros también lo hacen, nos miramos entre nosotros cargando las armas. Miro por la ventana, veo como sacan un proyectil.
- Sal - grito empujándolo - van a volar el auto - él abre la puerta y salimos corriendo en un segundo volamos por consecuencia de la explosión.
Miro a mi alrededor mis oídos duelen, no veo a León por ningún lado, intento pararme, pero me duele todo veo como los autos se alejan caigo en el piso y todo se vuelve negro.Mis párpados pesan, pero quiero abrir los ojos una luz muy blanca hace que los vuelva a cerrar largando un gruñido, me cubro la cara con mis manos, siento algo que me duele en la mano y me encuentro con suero.