- te dije que lo ibas a disfrutar - garro su arma - no te preocupes, no vas a sufrir mucho- mire por todas las habitaciones y encontré un teléfono satelital - Mía recuerda - lo miro un momento...
- hola
- Logan - digo suspirando.
- mi señora - sonrió sintiendo un poco de tranquilidad- ¿está bien?
- escúchame Logan no tengo mucho tiempo- lo vuelvo a apuntar cuando se retuerce - necesito que saques a mi hijo de ahí sin que se den cuenta
- ¿señora como are eso?
- escucha - digo levantando la vos - mi padre tiene hombres metidos en la organización - me siento- necesito que te lo lleves y nadie sepa dónde está, luego ven a buscarme
- ya mismo, señora
- Logan...- me callo un momento - confío en ti.
- lo sé y jamás le fallaría.
- gracias estoy en la fábrica abandonada en la ciudad.
Cuelgo y me quito las cadenas de mis pies- ¿dónde está mi padre?- el hombre no habla, no dice nada, solo veo dolor y sufrimiento en sus ojos - podía ayudarte si me dices dónde está
- púdrase- sonreí negando.
- bueno - aprieto el gatillo queda seco y el piso lleno de sangre - pudo terminar diferente - busco entre sus bolsillos algo que me sea útil- genial - miro mis manos llenas de sangre.
Camino fuera buscando algo de ropa que ponerme, pero no ahí mucho, en realidad solo algo de comida y agua, aprovecho el agua para limpiar la sangre, encuentro mi arma - ahora sí, papá voy por ti - camino entre los pasillos buscando la salida de este lugar.
Salí de la propiedad enorme, estoy sentada al lado de un mendigo hace 10 minutos, no deja de verme y babear, veo una camioneta parar enfrentar saco mi arma y mi mundo da un vuelvo cuando veo bajar al hombre de 40 años - Logan - lo abrazo y entierro mi cabeza en su pecho aspirando su aroma varonil - gracias por venir.
- mi señora - dice mirándome de pies a cabeza - ¿está bien?- asentí sintiendo frío - esperé le conseguiré algo de ropa- abre la cajuela y busca entre las cosas - tomé- entiende ropa de militar- apúrese ahí que salir de aquí.
Cuando estoy lista me subo y él arranca a toda velocidad, toma el camino hacia el oeste miro el amanecer ya cansada - ¿tienes a mi hijo?- asiente me dejó caer en él asiente más tranquila
- está con una persona que lo cuidara muy bien y nadie lo encontrará - asentí cerrando mis ojos - debe darse un baño descansar y debemos afrontar la guerra que se nos viene.
- lo sé Logan ya no puedo seguir huyendo, tenemos que enfrentar lo que se nos viene para poder vivir una vida diferente - él no dice nada - intenté darle la mejor vida lejos de esta mierda y ahora está en el medio, todos lo buscan para acabar a Nicolás o para acabarme a mí
- es el precio que usted eligió pagar al traerlo al mundo- dice serio - los hijos pagan los errores de los padres mi señora
- y me lo dices a mí - tiró el arma en la parte de atrás y tomo otra.
El camino se me hizo largo el camino de tierra empezó no entendí dónde íbamos asta que llegamos a una finca alejada de todo y de todos.
- ¿qué es este lugar?- pregunto bajando de la camioneta.
- es mi casa - levanto la ceja - el señor me la regaló cuando cumplí 35 - sonreí pensando en esa situación - sé que no se acordará de este lugar, le mostraré algo.
Caminamos por la casa mirando es gigante y muy bonita un estilo urbano- está muy bonita - asiente me guía por unas escaleras que van para el sótano supongo.
- póngase esto - me pasa un pasamontañas, lo ago sin rechinar y él se pone uno - no hable a menos que sea necesario.
Entramos en un cuarto oscuro, las luces se prenden y me encuentro ante 4 hombres de rodillas encadenados y amordazados miro a Logan, pero él no dice nada solo observa -¿ como se siente Ortega? - mi mirada va hacia el de la punta - veo que sigue igual de irritante- doy un paso asta máximo Ortega o lo que queda de él - nuestro enemigo número uno y el que desapareció mágicamente hace 1 mes - dice orgullo de su trabajo- William - señala al de la izquierda- debe recordarlo quiso matarla en su última misión - lo distingo por sus tatuajes en el pecho, Teodoro el que secuestro y maltrato al futuro heredero y nuestro último invitado - miro a la otra punta - el infiltrado de su padre en la organización.