El que se enamora pierde parte 1.

después de besarme y decir esas estúpidas palabras "ahora me gustas mas" mi corazon dio un vuelco de 360 grados, feo y horrible, sentia la inevitable presencia de un enamoramiento, la pasaba suspirando. desde ese dia el empezo a rondar, ya no sólo bastaba con verle en clases si no que se aparecía hasta en la sopa, y yo evitandolo a toda costa y cada vez que lo veía y saludaba era como que un ejército de lombrices se movían incansablemente en mi estomago, las llamadas mariposas no se sentían agradables, al menos no para mi.
Roxana estaba mas que de acuerdo en que tuviera algo con Liam por que así estaria "chido" tener citas grupales, por el contrario de la imaginación desbocada de mi amiga yo trataba de no hablarle, mas bien ignorarle lo
más que podia, aunque el aparecia en todos lados, despues de todo estabamos en la misma clase y en la misma calle y justo al lado de mi casa vivia el susodicho.
- me has estado evitando - el juega con la pelota de fútbol entre sus manos esta vestido para jugar dejando ver sus piernas increíbles.
-¿que? claro que no- tube que dejar de mirar para sentirme decente, mientras miro a todos lados, tratando de evitar mirarlo a sus ojos de caramelo o a sus piernas de deportista.
- solo es una salida de ir a comer no es como que soy el lobo feroz y tu la caperucita roja- deja de sonreír y me mira en forma de lastimera y me hace sentir incomoda, se me vino a la mente el gato con botas de la pelicula animada.
- es sólo que no estoy preparada para salir con ningún chico-
-para eso no se necesita estar preparada, es sólo sentarte a comer mientras yo te observo y conversamos de algo simple- 
-deja que lo piense- le digo tratando de librarme del mal, pero el no se da de baja.
- mañana es trece falta poco para el 14, ya no tienes plazo, es un si o un si, ahora- me dio rabia su intencidad- no nos quitemos la oportunidad de conocernos un poco mas- ruega
-esta bien pero si llegas tarde a buscarme no aceptaré jamas en mi vida una invitación tuya- su ojos brillaron y su sonrisa floreció mas hermosa que nunca.
- te juro que no te arrepentirás-Brayan lo llama desde la calle mientras se ajusta las medias y el se despide dandome un beso en la mejilla que me toma desprevenida.
Me toco en el lugar donde senti su boca tibia y mi corazón parece derretirse dentro de mi como cera caliente.

me siento en la cama mientras le hecho un vistazo a mi celular un texto de Roxana con foto incluida.
*estoy maquillandome a punto de salir con mi príncipe azul.*
una foto de ella modelando frente a su espejo de cuerpo completo.
*preciosa* le escribo y espero a que ella me responda, el texto no llega y en mi mente aparece la idea de que yo también podia vivir lo mismo, salir de la mano con alguien y conocernos, disfrutar de tener cosas en común, pero me sentía insegura de que algo no funcionará bien, yo nunca me sentí como una persona normal, tenia gustos extraños y como decía mi madre era una vieja en el cuerpo de una joven.
Alejo de mi mente de esos pensamientos y me voy a la el escritorio a terminar mi tarea, el teclado de mi computador esta un poco dañado y termino dandole un puñetazoa con rabia pero aún así google no falla, entre tareas decidi ver fotografias de lobos, y empese a checar los colores y los comportamientos de estos animales que se me hacían muy curiosos sobre todo desde que conocí al lobo negro del claro ¿se podía domesticar un animal salvaje? habia artículos donde decía que si y otros que no, a la final me Di por vencida y cerré las páginas fatigada, el lobo negro tenia que ser un animal domesticado de no ser así no hubiese reaccionado tan bien, me siento frente al espejo de mi tocador viendo mi cabello estaba desordenado y empese a peinarlo, mama entro a la habitación con algo en la mano, era su perfume de vieja que olía fatal.
- ¿Karen podrias prestarme tu perfume? el que compramos en la ciudad la última vez- mi madre estaba maquillada y vestida evidencia de una cita
-señora Maria- ella se ríe mientras rebuscar en ni tocador tumbado todo a su paso- me huele a cita-
- exacto, no me esperes despierta- ella se rocia mi perfume- un aroma inocente eso es lo que necesitaba, no esta cosa que huele a cementerio- ambas no reímos y la sigo hasta la puerta de su auto, ella me besa la mejilla mientras yo le deceo suerte con su nueva víctima.
Los chicos de al lado tambien estan entrando a su auto mientras Ken los despide, los autos desaparecen de nuestras vista.
- hey- Ken me saluda y yo no me Di cuenta en que momento el llego a mi lado
-hola- retrocediendo atras en mis pensamientos pense en Roxana, se supone que saldrían.- Roxi me dijo que saldrían.-
-tube que cancelar hoy no me dejaron salir- veo en su cuello un par de rasguños- tengo que cocinar hoy y pues ella se enojó y no quiso venir a casa- se me habia olvidado los berrinches que armaba mi amiga cuando algo no salía como ella quería ya entendía por que no me había respondido.
-debe de ser frustrante que te dejen vestida y alborotada-le acuse
- no es culpa mia, y tampoco nada le costaba venir a casa y pasarla bien conmigo- pienso que no es ningun inocente
- Mi mama salio a una cita, me va a tocar prepararme algo- le digo arrugando la cara el sonrie y me doy cuenta que en verdad sus dientes son tan blancos y perfectos como dice Roxana 
- voy a preparar macarrones con queso, ¿quieres? puedes venir y comer, ellos vendrán muy tarde y pues no me gusta comer solo-le heche un vistazo al novio de mi amiga, en casa no comíamos lácteos ya que mi madre no los toleraba asi que los macarrones con queso para mi eran un platillo lejos de mi hogar que por cierto me encantaban, pensé en el dicho de mi difunta abuela "el pez muere por la boca" pero no le vi nada de malo hacernos compañia, además Roxi jamas pensaría nada malo de mi.
es mas, tomaria una foto para mostrarle los macarrones que se habia perdido por malcriada.
- ¿qué dices?- la bonita voz de Ken me saca de mis pensamientos y le sonrió
- no puedo negarme a unos macarrones con queso- 
cierro la puerta de la casa y lo sigo hasta la suya al entrar el ambiente se siente agradable y tiene cierto aire lujoso nada que se parezca a mi hogar, caminamos juntos hasta la lustrosa cocina con la esperanza de ayudarlo pero el me detiene.
- yo cocino tu observa- ambos no reímos y pues yo feliz, no es que me encantará cocinar, el empieza a rayar queso amarillo como para un batallon y me pregunta
-¿hace mucho que son amigas tu y Roxana?-
-desde pequeñas-supongo que Roxana no habla mucho de mi con su amor
- eso esta bien se ve que se quieren mucho- 
- tu y tus primos se ven muy unidos- su sonrisa vacila un poco
- si, algo, aveces peleamos pero es la tetosterona- 
- los chicos son muy problematicos-
-¿por eso evitas a Liam?-
- no es eso, es sólo que no estoy segura de muchas cosas, nunca me he considerado una chica normal-
-jum pero el te gusta-
-un poco, si, es lindo cuando se lo propone pero es un poco intenso- el termina de rayar el queso y veo que empieza a sacar utensilios decido ignorar el ruido cuando se mete en la nevera me ofrece un durazno el cual aceptó por que es mi fruta favorita.
-es mi fruta favorita- dice y pienso que tenemos algo en común pero no se lo digo en cambio empiezo aspirar el olor de la fruta - a Roxi no le gustan, les traje algunas y me Di cuenta que se pusieron malas en su refri- yo me río
-a ella le gustan las manzanas y las peras, sobre todo la manzana verde- el celular de el vibra y lo mira pero no contesta.
- no me gustan las manzanas- me dijo 
luego se prolongó un silencio que no me pareció incómodo y creo que al tampoco por que tenía una ligera sonrisa en el rostro mientras se movía de aquí alla y yo lo observo, tenia una remera azul oscuro y pantalón negro sus pies descalzos sobre el frío suelo, su cabello negro recogido descuidadamente, su piel tenia una tonalidad blanca pero cremosa y sus ojos azules hacian juego con todo incluso sus bonitos labios y sonrisa.
si me ponía a comparar a Liam con el, Ken saldría ganando en cuanto a belleza, Liam era el tipo de belleza morena ojos acaramelados y sonrisa infantil acompañados de un cuerpo atlético pero Ken era elegante sin querer serlo, ya veo por que Roxana estaba tan enamorada, en el pueblo jamas tendríamos aún chico como El, sacado de una revista, la mayoría de los chicos eran sencillos delgados y repetitivos a mi parecer, con colores de cabellos parecidos y cortes iguales, era difícil ver alguno con el cabello largo por no decir nunca.
-toma- el me pone el plato en frente y se sienta a mi lado se ve delicioso y el olor es agradable 
-buen provecho- le digo y el me indica lo mismo con la pasta metida en la boca, yo pruebo y esta delicioso una maravilla 
- rico, cocinas mejor que yo y mi mama juntas- el me sonríe y sige comiendo.
terminamos de comer y lo ayude a labar los platos mientras yo le hablaba del 14 de febrero y de todas las cosas que se hacian en la escuela esa tarde, como por ejemplo la venta de dulces, chocolates y manzanas acarameladas las casetas de besos, y las obras de teatro estúpidas que los populares protagonizaban.
- es un poco tonto- me dice después de escuchar atentamente la información .
-algo, pero al final siempre te diviertes un poco- nos secanos las manos y caminamos hasta la puerta y salimos al frente, a sentarnos a esperar que mi madre o sus primos llegaran, pero la que llegó fue otra con la cara roja y los ojos desorbitados, Roxana, se le notaba a kilómetros de distancia que estaba enojada y por sus ojos deduje ensegida que lloro a mares .
-¿paso algo en casa?- me levanto ensegida del suelo al verla en ese estado preocupada de que algo hubiese pasado pero ella no dejaba de mirar a Ken con evidente rabia
-¿quién carajo crees que Soy?- mire a ambos asustada por no saber lo que pasaba
- solo te dije que no podíamos ir a cenar Roxi, no Entiendo por que te pones asi- Ken se levanta del suelo y también la mira pero la diferencia es que en el no hay ningún rastro de enojo.
-osea, prefieres quedarte solo en casa que salir conmigo- La actitud de Roxi me tenia anonadada, yo sabía que era malcriada e impulsiva pero jamás en mi vida vi un berrinche de lágrimas en ella me parecía algo nuevo e incluso estúpido.
- te explique la situacion- esto la enfureció a un mas, y vi como se acercaba lentamente hasta el con los ojos vidriosos, no se, pero me daba miedo verla asi.
-¿sabes que? terminamos- le dijo con una sonrisa desquiciada en los labios
- esta bien como quieras- esa fue la gota que derramó el vaso, Roxana se lanzó encima de Ken como una fiera cosa que no veía venir pero el no iso mas que taparse el rostro de las garras de mi amiga mientras yo trataba de despertar del sueño que acababa de vivir , yo me estaba riendo, aquello me parecía absolutamente ridículo e inesperado y lo único que podía salir de mi eran risas.
sin embargo Roxi no dejaba de golpear a Ken como si este fuera el culpable de alguna desgracia y no me quedo de otra que quitarla de encima, por que ya los brazos de que Ken estaban vueltos sangre, no le quedaba otra parte donde no hubiesen heridas de las muy acrilicas uñas de Roxana.
-sueltame karen- ella me empuja y trata de arreglarse el cabello.
-Roxi vamos a casa- le digo en un intento de llevarla lejos de Ken que tiene cara de querer quebrar su cuello como si fuera un palito de galleta.
La tomo de la mano y me la llevo casi a rastras y justo cuando llegamos a la cocina echa a llorar como si sus lágrimas fueran infinitas, la Dejo alli sin pensar en toda esa situación ridícula para no reirme y la agredida fuera yo
-toma un poco de agua- le ofrezco un baso que traje de la cocina ella levanta la cara y se limpia los mocos con su blusa
- he dado todo por esta relación y el no se esfuerza en nada-
- solo llevan un tiempo junto no es que ya tengan años- ella se restriego la nariz 
- es que yo había planeado algo más esta noche y pues...- no quería ir a lo profundo 
- ya vendrán cosas y tiempos mejores- le digo y ella aprieta los ojos haciendo que las lágrimas infinitas aparescan nuevamente
- yo lo amo- ella era asi, se enamoraba demaciado rapido para después estar con el sufrimiento- pense que me amaba-
-cuando estes mas calmada habla con el- es un malentendido, me dije a mi misma, esa tarde se quedó conmigo en casa yo consolandola por algo que me parecia ridiculo, pero para eso eran las amigas, ella durmió entre sollozos y se levantó en la mañana temprano mas relajada.