La semana pasó volando. Cuando quise acordar ya era viernes pasado medio día. Luego de almorzar con mi novio, Como tenía una fuerte migraña, decidí tomarme el resto del día e ir a casa a recostarme un rato. Al abrir los ojos, me encuentro sola en la cama, por lo visto mi novio seguía trabajando.
Cuando termino de vestirme con un short, una remera y me hago un rodete algo desprolijo, salgo del cuarto.
Al llegar a la sala, veo que está en el balcón hablando por teléfono.
Como si sintiera mi presencia, James se gira y entra con el teléfono en la mano.
-Oh, hola hermosa. -Me saluda con un beso rápido- ¿Descansate bien?
-Si, gracias amor, ¿Con quién hablabas? -le pregunto.
-Con Mara, cosas de la oficina. -Responde.
-Ha, bueno. -Digo mientras lo sigo a la cocina.
-Me acaba de avisar que el Sábado que viene es la fiesta de aniversario de la empresa y debemos asistir.
-Bueno, puedo aprovechar y le aviso a Clara para que me acompañe al centro comercial a ver que encuentro para la fiesta.
Me acerco y él me toma en sus brazos para luego agacharse un poco y darme un beso.
-Cualquier cosa que te pongas te quedará hermoso mi amor. -Dice y me vuelve a besar.
Mientras Miriam preparaba la cena y mi novio revisaba unos papeles de la empresa, yo aproveche para ir al cuarto a hablar con Clara.
-¿Alo, Clara? -pregunto a modo de saludo.
-Hola Laura, ¿Cómo estás? -me saluda. -Justo te iba a llamar.
-Bien, ¿Me podrías acompañar mañana al centro comercial? Porque el sábado que viene hay un evento de la empresa donde trabajamos, me acaba de avisar James.
-Si, Dylan me avisó del evento. Vamos juntas, yo también quiero ver que encuentro.
-A las dos, ¿te parece? -pregunto mientras juego con el borde de mi remera.
-Estupendo. ¿Paso por ti?
-Claro, si no es molestia.
-No, para nada.
Luego de cortar vuelvo a la sala, al llegar junto a mi novio, me siento en su falda y le doy un beso en la mejilla.
-¿Ya hablaste con Clara? -pregunta mientas aparta la vista de los documentos.
-Si cariño, mañana a las dos me pasa a buscar por acá.
-Bueno, ¿Mañana te gustaría ir a cenar a lo de mis padres?
-Me encantaría. -Respondo mientras me vuelvo a poner de pie para tomar los documentos, pero él me toma por la muñeca y me jala hacia él y me da un dulce beso.
Cuando la cena estuvo lista, Miriam se retiró dejándonos solos.
-Mmmm, Miriam se pasó. -Digo mientas saboreo el bistec con papas.
-La verdad que si. -Contesta mi novio mientras bebé un poco de zumo de naranja.
Cuando ambos terminamos de cenar, llevamos los platos al lavado y me encargué de ellos.
A la hora de acostarnos, me pegué una ducha rápida. Luego de ponerme una camiseta que me llegaba hasta la mitad del muslo y de cepillarme el pelo, me acosté al lado de James. Él me pasó un brazo rodeándome por la cintura y me acercó hacia él. Mi cuerpo ya se acostumbró a dormir de esa forma. Me hace sentir segura.