Capítulo 10

Narrador omnisciente

La pareja de novios y futuros esposos se había levantado para empezar a arreglarse, Lisa estaba muy feliz puesto que su plan iba conforme a lo que había planeado y nuestro querido Marcus estaba cansado mentalmente de toda esta mierda.

Pasaron un par de horas y casi todos estaban listos, Lisa ya traía su precioso vestido de novia, Marcus ya estaba con su traje pero no paraba de fumar, Zaida y Brisa ya estaban en camino y se veían deslumbrantes, los padres de los novios ya estaban preparados y solo esperaban a que iniciara la boda.

Después de eso todo pasó muy rápido, Zaida le mostró el video a Marcus, el primero estaba confundido pero vio que era su única salida, no lo pensó mucho y le dijo a su exnovia que se fueran juntos a cualquier parte, ella aceptó puesto que ella confiaba en el.

Luego de que ellos se escaparan las cosas en las hermosas playas de Santorini, se complicaron, Lisa iba con una ensanchada sonrisa pero cuando sus ojos vieron que nadie la esperaba en el altar se empezó a preocupar, porque si el no llegaba las cosas para ella se empezarían a dificultar, empezó a sudar frío y pensó que solo eran un retraso y que en unos minutos llegaría esos minutos de convirtieron en una hora y ahí cayó en cuenta que el no iría.

Todos lo medios que habían ido, reporteros, camarógrafos y espectadores estaban en shock los fans de esta parejita en menos de diez minutos ya habían hecho trend un hashtag en Twitter, instagram, y en YouTube no tardaron los creadores de contenido en publicar la noticia, todas las revistas juveniles ya tenían como encabezado “la pareja más trend del Internet, ya no llego al altar”, “Lisa Hamilton, la modelo y actriz británica, se quedó en el altar en espera de su prometido” o “Marcus Harper se arrepintió y decidió escapar para volver a su vida de mujeriego”; todos los reporteros intentaban que Lisa diera un entrevista, todos grababan todo absolutamente todo lo que ella estaba haciendo, grabaron cuando ella se había metido a su habitación para poder responder la llamada de su amante.

El estaba furioso y no dejaba de gritarle, ella no podía dejar de llorar, este chico lo único que quería era que Lisa se casara con Marcus, se divorciara, para poder sacarle unas de las mansiones que nuestro querido Marcus tenía a su nombre, la siguiente parte de su plan era que Lisa y el  se casaran y la convenciera de que le pusiera esas casas a su nombre con la excusa que el era el padre de su futuro bebé.

Mientras tanto Zai y Marcus estaban escapando a Estambul junto a su pequeña hija que no entendía lo que estaba sucediendo, al bajar Marcus entra a su Instagram y se da cuenta de todo el alboroto que estaba causando esa escapada, segundos después Zaida también se dio cuenta de todo lo sucedido, ambos se dieron una mirada y sonrieron, aunque ella tenía una mirada de culpabilidad, y el solo le dijo que no era su culpa y que Lisa marco su propio destino, estos dos chicos decidieron irse a algún hotel pero como ya sabemos a Marcus lo que le sobraba era el dinero, pasaron a la plaza comercial, a Marcus se le había pasado la mano porque le compro veinte playeras, doce pantalones, nueve faldas, diecisiete pares de zapatos y veintiún vestidos para su querida Eidel y todo esto sucedió en menos de veinte minutos, por supuesto la mamá de la pequeña se había distraído porque Marcus le dijo que buscara algunas prendas porque se quedarían  en Estambul cuatro días y cuando regreso ya tenían más que suficiente.

Compraron ropa para Zaida y todo iba perfecto, Marcus se escapó un par de minutos y cuando regreso el estaba nervioso, ansioso y preocupado, y esas solo era una señal de que el estaba escondiendo algo.

Narrador: Zaida

Yo?, yo no podía creer que Marcus se había gastado cuatro mil doscientos dólares en ropa para nuestra hija luego fuimos a comprar ropa para el y para mi y yo procuré agarro lo estrictamente necesario  y el de repente se escapó y regreso muy raro pero traté de darle poca importancia.

Varias horas después fuimos a un hotel y como era de esperarse era  muy caro, yo me sentía mal porque a pesar de que Lisa fuera toda una bruja, cuando empecé a ver mis redes sociales todos estaban atentos a todo lo que pasaba.

Al paso de unas horas decidimos ir a cenar al restaurante que tenía el hotel aunque Marcus tenía ganas de seguir derrochando dinero, el restaurante era muy bonito, podías pedir a la carta o buffet, nosotros decidimos el buffet por somos unos glotones, tenia de todo desde comida típica de Turquía  hasta mexicana, yo decidí tomar un Kebab y está como una combinación de burrito con un taco, pero estaba bueno, Marcus tomó y pedazo de mi comida y le gusto y fue a pedir uno. Mi querida hija optó por comer fruta, si como lo lees ella decidió comer FRUTA, era obvio que iba a ser rara como su padre.

Cuando salimos de cenar sentí la comida hasta el cuello, mi exnovio y yo nos habías pasado un poco, nos pasamos solo un poquitín con los postres, fuimos a la habitación donde se quedaba Eidel junto con una niñera que había contratado Marcus (casualmente solo la contrato para que pasara la noche con ella, sospechoso) y Eidel  ya estaba dormida, fue muy gracioso porque se durmió sentada en la silla y con la boca abierta, la acostamos en una cama, le dio algunas instrucciones a la niñera y después nos metimos a nuestro cuarto, yo me metí a la ducha.

Me estaba enjuagando cuando Marcus entra a la regadera y yo me volteo porque me dio pena

-Zai no me jodas te he visto mil veces y tú a mi

En realidad lo que me daba pena no era verlo a él yo tenía pena de que viera la fea cicatriz que tenía en el abdomen porque cuando di a luz, aunque había tratado de ahorrar todo el dinero que había ganado para poder pagar un hospital privado pero no logré tener lo suficiente y aunque mis padres me querían ayudar no estaban en su mejor etapa económicamente.

Me volte y intente taparlo con mi brazo, Marcus tomó mis brazos y recorrió mi cuerpo con sus ojos hasta que sus ojos se quedaron fijos en la cicatriz y solo torno una pequeña sonrisa