Capítulo 6: Viajando al continente Nirm

“Padre, aunque nunca he salido de la aldea hasta ahora, tengo entendido que el camino por la selva hasta el mar podría tomarnos varias horas. De hecho, esa es la principal razón por la cual los pescadores locales suelen salir muy temprano por la mañana e incluso se dice que algunos duermen en el pequeño campamento que existe cerca de la costa a veces, para así evitar el viaje de regreso hasta la aldea. Pero ahora ya es algo tarde, y pronto anochecerá…” Káel soltó ese discurso mientras miraba a su padre fijamente, desde su punto de vista debieron haber salido temprano por la mañana si esperaban abordar algún barco hoy.

Owen sonrió, y explicó con orgullo:

“¡Haha! Hijo debes entender algo, los magos no hacen las cosas de la misma forma que las personas normales. Actualmente el estatus de mago en el gran continente Nirm no es inferior al de la nobleza, y yo soy un poderoso mago.”

Luego de dejar estas palabras, Owen Shan siguió caminando en silencio.

« ¡Menudo padre! Me soltó un discurso sobre su grandeza personal y no dijo nada sobre el asunto de fondo ¿Sabes que la selva por la noche es extremadamente peligrosa? Los riesgos de perderse o toparse con una criatura poderosa son muy altos. » los pensamientos de Káel eran los mismos que tendrían cualquiera de los pobladores de su aldea si no conocieran en detalle la figura de Owen Shan.

Después de caminar durante algún tiempo, llegaron hasta una parte elevada de la selva, donde había un pequeño y extraño monte que sobresalía del resto del terreno. Este monte lucía totalmente artificial y si no fuera porque no existía la maquinaria pesada necesaria para fabricar algo así en este mundo, Káel hubiera pensado que se trataba de obra de los seres humanos. Además, los arboles alrededor de este monte habían sido desgarrados, como si una poderosa fuerza obligara a la tierra a emerger hacia arriba. Káel encontró todo este asunto demasiado extraño.

Owen comenzó a subir por este pequeño monte con confianza, hasta llegar a su cima. Desde este lugar se podía observar en su totalidad las copas de todos los arboles a su alrededor. Hay que destacar que estos árboles no eran bajos, y todos superaban fácilmente los 20 metros de altura. Pero este extraño monte era todavía más alto que estos.

« Debes ser un padre muy considerado para obligarle a subir este monte caminando a tu pequeño hijo… » pensó Kaél con recelo y sarcasmo.

«¡Al menos podrías cargarme! »

Owen frotó uno de los tantos anillos de su mano izquierda y al instante apareció una especie de flauta de la nada.

« … » Káel quedó desconcertado mientras daba sus últimos pasos hacia la cima del monte.

« ¿De dónde salió esa cosa? »

Owen sujeto la flauta y la hizo sonar con fuerza.

~ Flii, Fliii, Fla ~

« ¡Excelente! Tocar la flauta, arriba de un monte, en el medio de la selva es justo lo que necesitamos para llegar hasta el campamento de los pescadores antes de que anochezca… » pensó Káel con frustración. Solo tenía 6 años, por lo cual sus piernas eran muy cortas, y seguirle el paso a su padre no le había sido sencillo hasta ahora.

Pero lo que siguió luego lo dejó mudo. Una enorme criatura voladora se acercó hacia ellos con rapidez.

« ¡Qué demonios! ¡Esta cosa me comerá! ¡Nooo! Pero si me mantengo agachado quizás solo me ignore, después de todo mi nuevo padre es mucho más grande que yo ¡Si! Eso haré. Lo siento por mi madre, pero deberé darle la terrible noticia cuando regrese solo a la aldea…» Káel analizaba la situación a su manera, mientras pegaba su cuerpo al suelo lo más posible.

« ¿Apenas tengo 6 años y ya estoy por morir de nuevo? ¡Menuda suerte! » pensó, al notar que la enorme ave descendía sobre ellos con posibles intenciones hostiles.

Pero por supuesto que nada de esto pasó. La enorme criatura aterrizó sobre el extraño monte y bajó su cabeza lentamente.

“Buen trabajo ¡toma!” dijo Owen, arrojando un gran pedazo de carne, que salió desde algún lado que Káel no pudo identificar. La criatura lo devoró en un instante.

“Hijo, te presentó a Plaffy. Este pequeño es mi montura voladora para viajes largos.”

« Este PEQUEÑO… » repitió en su mente al ver la enorme criatura.

Káel ya estaba acostumbrado a observar algunas criaturas voladoras gigantes en su aldea, debido a que los domadores de bestias las usaban para desplazarse hacia el gran continente y comerciar, pero esta cosa estaba en otro nivel. Por empezar no era necesariamente un pájaro de aspecto prehistórico como los que usaban los domadores, ya que tenía cuatro patas, una larga cola y además mostraba un pelaje negro similar al de un caballo, con una larga crin incluida. Su gran pico podría devorar a un niño por completo de un bocado. Y otra cosa curiosa es que tenía un par de cuernos en su cabeza. Si Káel tuviera que compararlo con alguna criatura mágica conocida de su anterior mundo, diría que se parecía un poco a los hipogrifos de las películas de fantasía, pero al mismo tiempo tenía algunas ligeras diferencias con estos.

Owen sacó una silla de montar gigante desde algún lado y comenzó a ajustarla sobre el torso de Plaffy.

« He visto este truco una y otra vez pero ¿De dónde mierda saca tantas cosas? » Káel comenzaba a mosquearse al no entender como lograba hacer esto su padre.

Owen notó los ojos recelosos de su pequeño hijo, y comentó:

“Seguramente te estas preguntando porque te hice caminar hasta aquí primero, en lugar de partir directamente sobre Plaffy desde la aldea. La razón de esto es muy sencilla. Este pequeño todavía no está totalmente entrenado y podría llegar a comerse una o dos personas si se asusta al ver tanta gente junta.”

« ¡Oh, ok! En realidad solo quería saber de dónde sacas tantas cosas ocultas todo el tiempo, pero supongo que entrarme de que esta cosa podría comerme en cualquier momento también cuenta como información importante. » Káel comenzaba a arrepentirse de seguir a este padre suyo en esta loca aventura.