Mi Tipo

Cap. II La gran disputa

Sabana Grande de Boya, es un municipio muy prospero, situado al Norte de la provincia de Monte Plata, Tiene una extensión territorial de 528.55 Km². Y una población según su último censo de 24, 357 habitantes, su pulmón principal en cuanto a vegetación se refiere son los Haitises, este municipio está poblado mayormente por personas de clase Media y clase baja, sus principal fuente de economía depende de la agricultura, del sector comercial, el transporte, entre otros, su mayor problema es que una gran parte de la población se ve obligada a emigrar, por falta de una mayor fuente de empleo, a la ciudad de Santo Domingo, en buscas de mejores ingresos y mas posibilidades de estudio. Las personas allí, se caracterizan por ser alegres, honestas, simpáticas y muy trabajadoras, sus calles, casi en su gran totalidad han sido recientemente pavimentada, podría decirse que en este pueblo podemos encontrar de todos lo que hay en la ciudad, aunque en pequeñas cantidades.

 

Mateo se quedó inscribiendo el caballo en el concurso, mientras Fénix y Júnior le esperaban en el parque –Ese caballo tuyo es endemoniao ¿cree que fue buena idea dejarlo con Mateo? –hay no, mentira, mi Tipo no e así ¿eh? -¡que no! Ese caballo no se deja manillá de cualquiera –ah bueno, eso si, pero él ya conoce a Mateo, el se va a portá bien, ¿pa que hicieron ese poso ahí Júnior? –jaja, no es un poso, es una fuente que le cumple los deseo a todita las gentes –jaja siempre rimando… ¿Qué no te cansa de hacer el ridículo? –le dijo ella sonriendo -¿el ridículo dices y te hice sonreír, mi objetivo fue logrado sin más que decir jajaja, sabes, aquí hay una moneda, toma, pide un deseo, para ver si se cumple y por fin deja de estar tan amargá –pásame, voy a pedí que se te acaben la ritma, a ve si así deja la cotorra.

 

Ella tomó la moneda y la tiró al agua, cerró sus ojos y pidió un deseo –al ella abrir sus ojos él continuó –con sus ojos cerrados es tan hermosa, pero con ellos abiertos parece una diosa ahh, jajaja, no se te cumplió, es que las ritma está aquí dentro, si se me acaba se me acaba la sangre, loca ajajaja –ambos rieron –yo no pedí eso -¡ah noo! ¿y que pediste? –es un secreto… ¿crees que pueda ve a mi Tipo desde arriba? -¿Cuándo te muera? Noo –no tonto, de ahí arriba –ah de la glorieta, ven vamos a ver

 

-Se dirigían hacia la glorieta que quedaba en el centro del parque, de camino él se detuvo a comprar dos helados –toma, para que después no diga que soy un tacaño –Gracia –Al llegar subieron, una ves allí ella se apoyaba de los barandales para mirar hacia el lugar donde estaba el caballo, mientras comía su helado se le pegó un poco en la nariz, él sacó una servilleta de su bolsillo para limpiarla, pero al acercarse y ver sus labios, se detuvo -toma, hazlo tu, no puedo arriesgarme a estar tan cerca de la novia del jefe -¡que! ¿Qué te pasa? Yo no soy la novia de nadie –El Bronco dices que si –El Bronco es como mi padre y tu ademá de mi sombra, ere mi amigo –pues por algo se empieza, si ya me considera tu amigo con el tiempo podré convertirme en… -¡mi Tipo! –buenos si, en eso –dijo Júnior insinuando que ella continuaba su oración -¡nooo, mira! Se le ecapa a Mateo.

 

Enseguida puso el helado en las manos de Júnior y corrió hacia la escalera, la cual bajaba “a millón” al momento de impactar su cuerpo con el de un adolescente de igual edad que ella, que vestía Jean, camiseta y tenis de marca y que muy calmadamente venía subiendo. Ambos rodaron hasta después del primer escalón, cuyos cuerpos cayeron en emparejados, estrechados entre sí bajo una misma mirada, bajo un insólito hipnotismo que los mantuvo inmóvil durante varios segundos, sin arriesgarse a perder ni un solo detalle en aquellos ojos verdes que tan fijo la observaban, ella solo citó, sin coordinación algunas palabras -…ah diculpa… mi Tipo…-¡yo! ¿Tu tipo? –dijo aquel chico fascinado con aquel hermoso rostro que asaltaba su total atención -se quedaron sin decir nada más mientras seguían atrapados en aquella magia intensa que casi los empujas al beso, un beso que fue brutalmente impedido por la alarmante voces de Júnior, quien corrió rápidamente al verla caer

 

-¡Fénix, Fénix! –le fue preciso llamarla varias veces y aún así no fue hasta lograr acercarse que pudo de una manera cósmica terminar con aquel hechizo -¡Fénix! –al verlos allí inmóvil pasó los helados a un pequeño niño que se aventuraba por ahí y luego dijo con vos desconcertante y aguda

 

-¡Hello! ¡Holaa! ¿tán cómodo ahí abajo? ¿oh hay que llamar al 911? -¡ah! Diculpe –reaccionó ella y mientras Júnior tomaba por un brazo a Fénix para ayudarla a levantar, aquel joven de ropa fina al verlo dijo mostrando una repentina indignación- ah, oigan, quítenme esta cosa de encima. -Al Fénix levantarse rápidamente contestó aquel insulto - ¿Cómo que cosa, bruto?



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En el texto hay: fantacia, pasion, amor

Editado: 09.08.2018

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