Capítulo 6

Llevaba ya dos semanas de viaje por la India, dos semanas en las que había recaído y vuelto a mejorar, pero he de decir que estos últimos días, había podido por fin salir de las cuatro paredes de mi habitación, había podido por fin salir a cenar a un restaurante del centro, con la que se había ya convertido en una amiga.

Añoraba mucho a mi familia es cierto, pero la gente que había conocido en el hotel me había hecho sentirme un poco como en casa, no quería regresar. Una noche salí a tomar unas copas con Marta, la mujer viuda que conocí. Esa noche mientras volvíamos, bueno mas bien volvía, ya que marta había decidido quedarse un poco mas con un Hindú que había conocido, ya me entendéis, me encontré en la puerta de mi habitación a Iván, no supe como reaccionar, por lo que el decidió romper el hielo.

-Buenas noches, Natty, se que no querías verme, pero he pensado mucho y prefiero ser yo el que decida si quiero quedarme a tu lado pese a saber lo que se o si prefiero marcharme.-En ese momento quise decirle muchas cosas, pero no encontraba las palabras.

-Iván, no quiero hacerte partícipe de todo esto, acabo de conocerte.-No era precisamente lo que quería decir pero no podía pedirle que se quedase.

-Natty escúchame, soy yo el que tiene que decidir, y aunque acabe de conocerte, se que quiero estar a tu lado, créeme nunca he conocido a nadie como tu, eres una persona maravillosa.-Rompí a llorar por dentro, y me esforzaba para no romper por fuera.

-Mejor vete.-Una vez mas volví a echarle. Entre dentro de la habitación, cerré la puerta y me metí en la cama sin desvestirme si quiera, y una vez estaba entre las sabanas, rompí, ahora si, a llorar. 

Eran las 3 de la madrugada, me había quedado dormida, cuando escuche que alguien tocaba a la puerta. Cuando la abrí lo vi allí parado delante de mi. Quise cerrar la puerta pero me lo impidió, y en ese momento me besó. Yo no supe hacer nada mas que corresponderle. 

No me salen las palabras para expresar lo que sentí aquella noche, nos besamos, nos dijimos todo lo que queríamos sin necesidad de palabras. Se que nos conocemos poco, pero también se que cuando estamos juntos, ambos sentimos algo inexplicable.