No somos diferentes, aunque yo vista de negro y tú de rosa. Aunque mis cabellos estén rapados y los tuyos sean alargados. Aunque yo use botas negras y tu uses refinados tacones de punta. Aunque yo use pircing en mi nariz mientras levantas la tuya toda engreída. Aunque yo haya nacido en un lugar paupérrimo y tú haya en el más opulento barrio del mundo. No somos diferentes, puesto que la muerte no hará excepción entre ambas. En la autopsia, hallarán los mismos órganos y talvez nos meterán en la misma fosa. Ves, somos más parecidas de lo que imaginas.