Rosé
13 de noviembre, 2021.
—¿Cómo se siente estar atravesando tu quinto mes de embarazo? —La madre de Wonho me sonrió mientras preparábamos la cena. Hoy era el cumpleaños de una de las hermanas de Wonho por lo que quisimos darle un pequeño regalo de nuestra parte.
—Honestamente me he estado sintiendo muy bien —sonreí asintiendo con la cabeza al mismo tiempo que terminaba de poner al pavo en el horno —No he tenido ningún problema, así que bueno, he estado muy bien. Mis días han sido muy buenos desde que supe que estaba embarazada.
—¿Han pensando en algún nombre para la niña? —Sí, nosotros íbamos a tener una bonita niña dentro de tan solo un par de meses. Nada me hacía más feliz que saber que mi pequeña se encontraba bien gracias al enorme esfuerzo que he realizado los últimos meses para que todo estuviera bien.
—Lo he pensando mucho y Wonho también, pero, al final hemos decidido que la niña debe llamarse Aleska —asentí.
—¿Aleska? ¿Acaso no es ese el nombre de esa amiga tuya a la que quieres tanto? —Frunció el ceño, mostrándose sorprendida ante mis palabras—¿O solo me estoy equivocando?
—Sí, es el nombre de mi amiga —le di la razón—Opté por elegir el nombre de mi mejor amiga porque ella me ha ayudado en todo. A ella le debo la vida, básicamente. Ese sería el primer nombre de la niña.
—Comprendo tu punto —me sonrió de lado—Sé que esa chica significa mucho para ti por la gran ayuda que te ha brindado en todo. Digamos que ella fue como un ángel cuando no sabías cómo continuar en este mundo.
—Sí, es cierto, Aleska es una buena persona y será un honor que mi niña lleve su nombre.
—¿Y también llevará un nombre más o tan solo llevará uno? —Interrogó terminando de preparar la ensalada y tomando asiento en una de las sillas de la barra de la cocina.
—Su segundo nombre va a ser Giselle —sonreí como una tonta, nada podía hacerme más feliz que hablar de la niña que iba a traer al mundo en tan solo un par de meses—Creo que es un nombre muy especial con un bonito significado.
—¿Cuál es el significado? —Cuestionó acariciando mis manos. Por fortuna, ella y yo siempre hemos llevado una bonita relación desde el día en que mi esposo nos presentó.
—Flecha poderosa, poderosa como una flecha, certera como una flecha o fuerte como una flecha.
—Entonces, va a llevar el nombre de una verdadera guerrera como tú —aclaró logrando sonrojarme. A pesar que el amor de mi vida se la pasaba el día entero dándome cumplidos sobre mi físico o acerca de la excelente persona que era.
—Espero que sí —sonreí. Esperamos un par de horas a que el pavo estuviera para sacarlo del horno y mientras esperábamos, nos pintamos las uñas—Muy bien, creo que ya es hora de servir la cena porque todo el mundo estará aquí dentro de un par de minutos.
—Tienes razón —me sonrió, comenzando a hacer lo indicado. Terminamos de poner la mesa en un par de minutos y le dije a la madre de Wonho que iría a mi habitación a cambiarme. Elegí un vestido azul de pliegues que me llegaba a las rodillas y me maquillé de manera sutil. Desde que he vivido en Seúl, he cambiado mucho lo que era en un principio, desde pequeños hábitos e incluso un par de gustos. Mi maquillaje era un poco menos pesado y mi cabello era negro, algo que casi nunca he tenido.
—Buenas noches dulzura ¿Cómo has estado? —Mi esposo abrió la puerta del dormitorio y no fui capaz de evitar que una sonrisa apareciera en mi rostro.
—Buenas noches Wonho —le sonreí a través del espejo. Me puse de pie para abrazarlo, se podía decir que él era mi lugar feliz, mi lugar seguro, mi refugio, él era mi todo—Te he extrañado mucho.
—Igual que yo a ti, siempre te extraño mucho cuando no te tengo a mi lado —me dijo besando mis brazos con la mayor delicadeza posible. Él siempre ha sido sumamente atento y cariñoso conmigo.
—Eres todo un romántico —rodé los ojos bromeando. Adoraba abrazarlo, en realidad esa era una de mis actividades favoritas en todo el mundo—¿Estás listo para la cena?
—Supongo que lo estoy —le restó un poco de importancia, se agachó hasta la altura de mi estómago y dejó un pequeño beso allí—¿Cómo estás, Giselle?
—Giselle ha estado muy bien, por la noche recibí un par de pataditas de su parte —respondí por ella, tragando saliva al tan solo imaginar que estaba a punto de comentarle acerca de la decisión que acabo de tomar un par de días atrás—Wonho cariño, hay algo que necesito decirte...Bueno he estado pensando en lo mismo hace unos cuantos días y al fin sé que realmente eso es lo que quiero hacer antes que Giselle nazca, y espero que esta decisión no te moleste en lo absoluto.
—Nada que tú quieras hacer tiene por qué molestarte a mí, así que no necesitas preocuparte porque puedes decirme lo que quieras —ambos tomamos asiento en la cama y entrelazamos nuestras manos.
—Quiero volver a Polonia, solamente para tener la oportunidad de hablar con mis padres...Quiero que antes del nacimiento de Giselle, todos los inconvenientes en mi vida queden completamente resueltos para que no vuelvan a aparecer en un futuro ¿Estás de acuerdo?
—¿Estás segura del todo sobre que esto no va a afectarte en lo absoluto? —Su expresión lucía muy preocupada, claro que comprendía su punto al cien por ciento y sabía muy bien que lo único que hacía era ver que me encontrara bien y lo apreciaba mucho.
—Estoy segura, por supuesto, de lo contrario no estaría proponiendo algo como esto. Necesito aprender a perdonar a las personas que me hicieron daño en un pasado —confesé jugando con mis dedos y arreglando los pliegues de mi vestido—Por favor Wonho, eso es lo que necesito para ser feliz completamente debido a que tú y yo podemos ser felices todavía.
—Sí, mi amor, podemos ser felices todavía. No tengo problema en viajar hasta Polonia y solucionar todo eso que se ha quedado ahí. Solo, por favor, te ruego que sepas controlar la situación, sobre todo porque no debe afectar tu salud en lo absoluto —besó mis manos con la mayor delicadeza.