Llegué al hotel cuando aun quedaba un astibo de luz del sol. Veo al hombre con quien hablé hace unos meses esperarme a las puertas del edificio. Intento que mi expresión no delate mucho más el desastre que estoy hecha aun cuando mi apariencia no es claramente la mejor.
A pesar de la expresión tranquila que el hombre frente a mi me muestra no puedo evitar sentirme nerviosa, porque no acostumbro a hacer esto.
Intentando disimular mis nervios cierro mis manos en la correa mirando esos verdes ojos ̶ Bienvenida Señorita Sofía.
̶ Siento lo apresurado que fue este viaje Señor Zaid.
Me da una resplandeciente sonrisa que intenta calmarme, pero solo logra aumentar más mis nervios ̶ No se preocupe, estamos agradecidos de que haya aceptado nuestra oferta, acompáñeme por favor.
Hace cinco meses recibí una generosa e inigualable oferta de trabajo. Zaid y yo nos conocimos en una feria de turismo internacional que se realizó en España. Como abogada de una compañía de entretenimiento fui a firmar unos cuantos contratos, fue ahí en donde me vio trabajando.
Un mes después contacta conmigo diciéndome que la cadena de hoteles para la que trabajaba estarían encantados de trabajar con una abogada internacional que tuviera dominio de varios idiomas.
Debo admitir que fue difícil de negarse, pero antes de que pudiera responder, Zaid me mencionó que tenía un tiempo de gracia de siete meses. Tiempo en el que se terminaría la remodelación de su ultima oficina, de la que yo formaría parte si aceptaba.
Bueno… no me esperé que iba aceptar de esa forma.
Rememoro las últimas 24 horas mientras miro el paisaje fuera del ascensor por las paredes de cristal. Anoto mentalmente que tengo que escribirle a mi madre y a mi amiga, la buena suerte es que no se lo comenté a Hugo.
Sabía que sin querer explicaciones no iba a estar de acuerdo, por lo que él va a desconocer por completo en donde me encuentro..
Vuelvo a la realidad cuando el sonido me avisa que habíamos llegado a nuestro piso, pero no puedo avanzar al quedarme congelada en mi lugar.
̶ Disculpa la sencillez, debido a lo repentina de su llamada no pudimos preparar algo mejor.
¿Algo mejor?
Abro mi boca sin saber que decir y solo miro a mis alrededores sin saber como reaccionar a un lujo como este, creo que demasiado excesivo. El ascensor no da a un piso, se dirige directamente a un dúplex en la punta del edificio, demasiado… demasiado grande para mi sola.
Las paredes desde el techo hasta el piso eran de cristal por completo, y según lo que escuché de Zaid, podía controlar con un control remoto la cantidad de luz que entraba por ahí.
Mi vista la captó la madera clara del segundo piso que llegaba a la mitad del apartamento, siendo delimitada con barandas negras. No tenía palabras para describir la sala, podría decirse que era del tamaño de mi departamento en Madrid.
Un enorme televisor en la pared, creo que es una pantalla de cine. Sillones de color crema hasta de cuatro espacios, colocados de forma que crean una U, Tres de tres espacio y el cuarto dobla en forma de L. Alrededor de una mesita de café de cristal con finos adornos que agregaban más lujo a este pequeño espacio.
A la izquierda un comedor con una mesa de seis espacios, el detalle de la lámpara colgante de tres cilindros da más esplendor.
Me quedo de piedra cuando Zaid toca un interruptor en la pared y esta se abre dejando ver una cocina blanca y negra. La meseta daba la vuelta a la habitación y había una isla en el medio. El chico me informa que el refri y las despensas están llenas con todo lo que hiciera falta.
Y si eso no fuera suficiente, él me dijo había por ver todavía. Resulta que el ascensor estaba en el medio del apartamento, y que cuando nos dirigimos a la derecha, había nada más y nada menos que una piscina climatizada.
No tuve tiempo para replicar nada cuando noté la escalera que bordeaba la piscina y daba al segundo. Ahí me explicó que iba al cuarto, el cual tenía el mismo sistema que la cocina, en donde también se encontraba el baño incluido.
También habría un pequeño gimnasio de mi uso y una terraza.
̶ Le pedimos disculpas por no poder hecho más.
Abrí la boca para decir que al contrario, que esto era demasiado. Pero tenía la sensación de que si lo decía iba a ocurrir lo contrario, así que opté por la opción más fácil.
̶ Eso es suficiente, me encanta este lugar muchas gracias.
̶ Mañana es domingo por lo que tiene todo el tiempo que desee para descansar, el lunes le explicaré su trabajo.
Cuando él mencionó eso fue cuando recordé un detalle que con el viaje había olvidado por completo ̶ Cierto ̶ murmuro para mí pero él había escuchado mis palabras ̶ La oficina no ha terminado su remodelación según lo que me dijo.
Su sonrisa se hace enorme y es cuando me detengo a detallar cada una de sus facciones. Piel morena haciendo que sus ojos esmeraldas resaltaran como algo hipnotizante, la incipiente barba negra marcando sus facciones solo gritaba lo que era demasiado obvio. Zaid es un hombre bastante atractivo.
Intento que mi sonrisa sea lo más natural posible para no revelar mi cansancio mental y físico ̶ Muchas gracias Zaid.
̶ Antes de tu llegada, algunas trabajadoras te dejaron todo lo esencial para pasar la noche.
Lo despido agradecida y suspiro cuando veo todo este enorme espacio para mi haciéndome consciente ahora de la realidad de lo que había hecho.
Abandoné a mi novio que me engañaba con su mejor amiga, subí a un avión de ultima hora avisando al momento que iba a aceptar un trabajo que estaba retrasando por meses.
Todo de maravilla.
Hola, como os prometí estoy actualizando seguido.
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mary2b03.writer.
Los quiero mucho
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Editado: 14.05.2024