Llevamos saliendo dos semanas ya, y cada vez me enamoras más, con tu incertidumbre y esa manera tan misteriosa que tienes de ser; tus locuras y la forma de mantener una constante guerra con el mundo; me hacen notar que hay algo más en ti, algo que te acompaña, que te invade, pero no sé exactamente que es. Pensé, tal vez más que amor sea curiosidad, pero hay que dejar que tiempo lo diga.
Hemos bailado bajo la lluvia y en tan poco tiempo he logrado ver tu peor lado, ese que no muestras a nadie; ese que de cierta forma me atemoriza pero que innegablemente me atrae, sé que eso no suena bien, pero lo distinto es lo que marca el camino que llevamos en la vida; de a poco sin darte cuenta me estas salvando, ya no pienso como antes constantemente en matarme; sino en mirar tus ojos y oír tu dulce voz cada día de mi vida. De forma inconsciente ya imaginé toda una vida a tu lado, la vejez y todo lo que conlleva el convivir junto a alguien, me asustó ya que jamás me vi con alguien así, pero el tiempo no se detiene y ya era tarde para asustarme, el amor ya había invadido mi alma y no había marcha atrás.
Podría decir que eres la persona más interesante que he conocido, a tu lado no hago las típicas cosas cotidianas que hacen los demás, contigo todo es original y podría decirse que vintage, me hablas de arte, de poesía y leemos juntos en tu habitación varios libros, filosofamos de ellos e inquietantemente me preguntas, que harán las personas normales a esta hora?
Editado: 10.07.2018