Capítulo 20

—Me aburo —murmuró Phoebe alargando la “o” dramáticamente. Me lleve la cuchara llena de helado en la boca—. Es divertido estar sentada en una heladería con una amiga, pero me gustaría hacer algo antes de que empiece el invierno —dijo con una boca llena de helado de limón.

—¿Qué quieres hacer?

—Vayamos a la piscina —dijo de repente.

—No —dije sin poder contenerme.

—¿Por qué no? Además, esta es la oportunidad de acercarle a Will, ¿no crees? —La miré, aturdida.

—¿Qué quieres decir con acercarle? —Pregunté. Phoebe parecía estar confundida por mi reacción.

—¿No lo entendiste? Se trata de Mae. Ella esta colada de Will de hace ya bastante tiempo. Al menos ella es inteligente que las demás, ha guardado el secreto —dijo mientras comía el último trozo de su helado.

¿A Mae le gusta Will? No sé qué sentí en ese momento, pero no me gustó nada.

—¿No te lo dijo? —Me preguntó Phoebe. Mis ojos miraron hacia el vacío mientras sacudía la cabeza.

—No —murmuré.

—¡Bueno, ahora lo sabes! ¿Y, qué me dices? ¿No es una gran idea que? —No.

—Deberíamos ayudar a Mae, por supuesto —dije con un intento fallido de sonreír.

—¿Entonces nos vemos en la piscina? —preguntó Phoebe mientras sacaba su dinero y lo ponía en la mesa decorada de la heladería.

—Sí —contesté.

Nuestros caminos se separaron aquí. Mientras que yo tenía que caminar unos diez minutos hasta llegar a mi casa, Phoebe se vio obligada a tomar el autobús.

Yo estaba tan débil. En este momento, sólo estoy enojada conmigo misma. Con un lío en la cabeza. En realidad, no debería haber ningún lío. Este capítulo había terminado y se suponía que tiene que seguir así. Tal vez la mejor manera de olvidar a Will es alejarse de este grupo.

—Papá, he vuelto —dije cuando entré en la sala de estar.

—¿Dónde estabas? —Me preguntó inmediatamente sin siquiera darme la bienvenida.

—En una heladería, ahora iré a la piscina —dije con calma. Una pregunta menos.

—Ve con cuidado, ¿sí? —Dijo mi padre, sin apartar la mirada de la televisión.

Entré en mi habitación, cogí el bikini y lo guardé en mi bolso, y luego salí de la casa de nuevo. De hecho, tengo que mantenerme alejada de este grupo. No quiero tener nada que ver con ellos... Sin embargo, había construido una especie de amistad con ellos. Solo esta vez. Estaré allí hoy, y si Mae hace algo Will, sea lo que sea, esa sería mi señal para encontrar nuevos amigos, de lo contrario estaría atrapada en un drama cómico.

—¡Sid! —Llamó William cuando él vino corriendo desde su casa seguido de Nat—. Vayamos juntos.

Juntos nos dirigimos a la piscina. En la entrada nos encontramos con Mae, Ryan y Phoebe, el demonio a quién se le ocurrió esta terrible idea.

—¡Rayan, tú pagas! —Gritó Nat, señalándolo.

—Como no… —Ryan se pasó la mano por el pelo antes de darse la vuelta y todos caminamos detrás de él.

En el vestuario rápidamente me puse mi bikini negro y luego corrí a la piscina. Era tan estupendo para estar en una piscina y sin hacer nada.

—Sid, ¿qué estás haciendo aquí? —pregunta Phoebe mientras se acerca a mí.

—¿Esperándote? —pregunté, insegura. La rubia pasó su brazo derecho alrededor de mis hombros. Me volvió hacia la otra dirección.

—Vamos a la piscina de fuera —dijo con una gran sonrisa en la cara y me llevó hacia fuera. Para ser honesto, fuera estaba fresco, pero no podía volver ahora.

Lo primero que me sorprendió fue Will, que estaba justo al lado de Mae. No era la primera vez que le veía la parte superior del cuerpo, pero esto era una sensación completamente diferente. Una sensación que hizo que mi corazón latiera más rápido y me hiciera olvidar respirar. De lo contrario no había mucha gente por ahí. Casi podría decir que éramos los únicos.

Con los brazos cruzados, me paré junto a los demás y los miré mientras saltaban al agua. Caminé hasta el borde y hundí mi pie ligeramente en el agua.

—Está fría —dije apartándome. Pero de repente todos salieron a la superficie y me miraron sonriendo. Se acercaron a mí.

—N… —pero ya era un poco tarde. Terminé en el agua helada, rodeada de Mae, Ryan, Phoebe, Natalie y William. Literalmente se rieron de mí.

—Tengo una pelota. ¿Jugamos en equipos? —Mae gritó en el agua saltando arriba y abajo. Phoebe agarró la pelota y lo tiró en el aire.

—¡Will, Mae y Ryan contra Nat, Sid y yo, vamos! —En su última palabra, la pelota rebotó en el agua y Will fue el primero en coger la pelota. El juego pasó rápido… muy rápido.