La Visión De Gaara

Cuando atacó a Naruto bajo la guardia por un segundo. Al ver la determinación de quién había sido su amigo de atacar a la aldea se desesperó ya que era su obligación protegerlos. Fue cuando se centró en detener a Naruto olvidándose del arma fatal del Uchiha. Grave equivocación.

— Caíste en la trampa Gaara — al escuchar a Naruto decir eso supo que estaba totalmente perdido — ¡Ahora Sasuke!
— ¡¿Qué?! — gritó en un inútil intento de eludir al Sharingan pero era tarde. Demasiado tarde.

Ahora estaba en otro lugar. La aldea había desaparecido. Todo era oscuro. No había formas ni voces. Solo silencio y oscuridad.

Unicamente podía verse a sí mismo, por más que volteara en busca de alguien o algo que le indique dónde estaba no tenía éxito.

Estaba atrapado en una ilusión. Unió sus dedos índices intentando liberarse mediante el flujo de su chakra. Pero resultó inútil.

— Liberar — dijo mientras se concentraba en la técnica de liberación pero con cada segundo que pasaba sabía lo poderosa que era esa ilusión a la que el Uchiha lo sometió. Agitado y agotado dejó de intentarlo — Es inútil...estoy....atrapado....

Repentinamente la risa del Uchiha empezó a resonar por doquier, era envolvente. ¿Dónde estaba? Corrió hacia donde sentía que provenía pero al cabo de unos minutos la risa desapareció al tiempo que a la distancia veía a...Naruto.

Estaba en el suelo abrazándose las piernas mientras....temblaba. ¿Qué era eso? ¿ A qué clase de ilusión estaba siendo sometido?  Al ir acercándose pudo notar que Naruto también lloraba en silencio. ¿Una ilusión?

De pronto un muro invisible emergió de la nada impidiéndole que se acerque más. Naruto estaba desolado.

Sus temblores le indicaban que tenía mucho miedo. Gaara golpeaba ese muro intentando romperlo pero era muy resistente. Su poder estaba neutralizado por lo que tenía que emplear sus puños que empezaban a sangrar.
— ¡Naruto! — gritó de la impotencia — Maldición.

Vió cómo la oscuridad empezaba a envolver a su amigo ocasionandole más dolor y sufrimiento. Golpeó nuevamente ese muro sin importarle que sus manos quedasen inutilizadas por el esfuerzo.

Tenía que llegar a él y salvarlo de la soledad y la oscuridad así como Naruto lo hubo salvado tiempo atrás. De pronto escuchó detrás suyo la voz de Sasuke

— ¿Por qué te empeñas tanto en llegar a él? — Gaara volteó y lo vió. Ahí estaba el Uchiha mirándolo fijamente. — Si sabes que esto es tan solo una ilusión ¿Por qué te desesperas así?

— Ilusión o no, sé que Naruto está mal. Es mi amigo y tú mismo me dijiste que su aldea lo traicionó ¿Cómo crees que deba dejarlo así sin más? — golpeó el muro con su puño derecho con fuerza mirando al Uchiha — Le debo mucho también y al igual que tú no lo abandonaré. Ahora es él quien necesita nuestra ayuda ¿Cómo piensas que no se la iba a dar?

—Ya veo — contestó con una sonrisa Sasuke — Ésto no es una ilusión, por eso no te pudiste liberar ¿Ves? Esa es el alma de Naruto. Como verás su luz aún no se ha extinguido. La furia lleva escondida a la tristeza. Le dieron la espalda la gente que él no solo ayudó en la gran guerra sino que además consideraba su familia y amigos. Recurrió a Sakura y a mí en busca de ayuda y nosotros no dudamos en dársela.

Gaara miraba a su amigo con profundo pesar ¿Cómo no entenderlo? Él sabía mejor que nadie lo que Naruto sentía ya que lo había vivido durante la mayor parte del tiempo que tuvo de vida.

El dolor de quién lo había ayudado tanto en el pasado le desgarraba el alma.

Exausto cayó al suelo de rodillas sin dejar de intentar romper ese muro que lo separaba de Naruto.

— Quita este muro por favor
— No puedo hacerlo — contestó Sasuke — Ese muro lo construyó el mismo Naruto y solo Sakura y yo pudimos derribarlo...hasta ahora. Si realmente eres su amigo también podrás hacerlo tú.

Gaara contempló a Naruto detenidamente. No tenía intención de dañarlo ni a él ni a los aldeanos ni a ningún ninja de la arena. Sin saber por qué repentinamente tuvo esa certeza. Su dolor no llegaba al punto de enceguecerlo....aún.

— Estamos en tu aldea porque buscamos el pergamino de transferencia de vida. Nosotros solo somos la distracción — decía el Uchiha — Sakura es quién debe hacerse con él — Gaara no podía creerlo — Naruto quiere revivir a Neji.

— El portador del Baykan 
— Así es. Naruto siente mucho aprecio por él y considera que no debió morir. Pero él no morirá si utiliza esa técnica por tener dos chakras.

— El  del kyubi es uno ¿Verdad? 
— Efectivamente. 
Gaara miró al Uchiha tras colocarse de pie, luego dijo

—Eso se debe a que el Kyubi es el byjuu más poderoso. Pero su luz se extingue Sasuke.
— Lo sé.
—Sería peligroso y doloroso para él que eso suceda.

—¿Estás dispuesto a ayudarlo de verdad?
— Si — contestó el Kasekage con determinación y el Uchiha lo sujeto con fuerza del brazo derecho. Gaara sintió que le quemaba.

Cuando lo soltó vió que en el lugar donde lo había agarrado tenía un sello de extrañas formas. 
- Esto te será útil si Naruto llegará a necesitar tu ayuda y ni Sakura ni yo pudiesemos estar con él. Pero antes deberás ser capaz de derribar éste muro o de lo contrario jamás podrás llegar a él.

Gaara volvió a mirar a Nartuo pero en esta ocasión también pudo ver al Kyubi a su lado envolviendolo con sus patas mientras extendia sus nueve colas.

Kurama también estaba tírste por su amigo y furioso a su vez con los humanos de Konoha. Pero tampoco abandonaría a Naruto.

Gaara se lastimó su dedo gordo de su mano derecha y tocó el suelo.

Inmediatamente se formó un sello que trajo al una cola corporizandose frente de ambos. Gaara se subió en su cabeza. Sasuke miró asombrado aquello.
— Hicimos un pacto él y yo. De ese modo está conmigo pero no en mi cuerpo. — explicó Gaara.

— ¿Qué les pasa a esos dos Gaara? —  le preguntó él Bijuu.
— Tenemos que llegar a ellos viejo amigo y recordarles que nosotros nunca los abandonaremos.