¡Sorpresa!

Los tres ancianos del consejo decidieron enfrentar a esos enemigos.

Se trataba de los miembros que en otro tiempo fueron ninjas poderosos de Konoha, quedando atrás la anciana y uno de los ancianos del consejo.

Los más inútiles según pensó Naruto. Estos rivales mostraron su naturaleza destructiva en cuestión de minutos por más ancianos que sean.

Uno de ellos tenía el poder de atravesar dimensiones creando la ilusión de aparecer y desaparecer como si de un fantasma se tratara.

Éste era el rival indicado para Hinata con su Jodan quien se ocupó de enfrentarlo sin problemas. Con cada desaparición ella apuntaba hacia el lugar donde aparecería para darle el golpe logrando descolocarlo.

—¿Quién es este enemigo? — murmuró el anciano en cuestión — ¿Cómo puede saber dónde apareceré? — pero la batalla siguió y tras comprobar que su mejor técnica había sido inutilizada dejó de usarla. — Bien, te atacaré con todo mi poder maldito.

Pero Hinata fue esquivando uno a uno sus ataques y contra-atacandolo a su vez.

Así lo fue arrinconando pero éste utilizó una técnica suya e invocó a tres perros gigantes para atacar a Hinata con el objetivo de matarla.

Tanto Naruto como Sasuke quisieron ayudarla pero sus propios oponentes se lo evitaron. Debian confiar en ella y en su fuerza.

La jóven Hyuuga se enfrentó a dos de esos perros con entereza logrando así aniquilarlos pero quedó muy agotada.

Fue cuando Sakura optó por intervenir ayudándola, de un solo golpe fuerte y duro logró exterminar al perro que quedaba.

Pero el anciano invocó cuatro perros más que medían tres metros de altura cada uno de ellos.

"Con que piensa debilitarnos así ¿Eh? Se llevará una gran sorpresa' pensó Sakura.

"Ningún perro me asustará, esto no es nada" meditó Hinata.

Así, espalda contra espalda, las chicas les hicieron frente a esas bestias volteando la situación a su favor ya que sabían perfectamente que las invocaciones gastaban chakra.

En ese caso serían ellas quienes lo agotarían a esa basura. Ellas no necesitaban ningún Byjuu para demostrar que eran fuertes y muy poderosas.

Cuando acabaron con las cuatro bestias miraron al anciano quién era evidente estaba agotado y no podía seguir invocando más.

— Ahora es tu turno — exclamó Sakura golpeando sus manos en forma de puños.

Sin esperar respuestas se lanzaron a él al mismo tiempo. El anciano detuvo sus golpes con sus manos mientras murmuraba.

— Esto se pone interesante, hacia tiempo que no tenía una pelea así. Por lo visto son dos chicas, mucho mejor así podré vencerlas fácilmente.

— ¡¿Qué te has creído?! — rugió Sakura dándole un golpe en la cara y haciéndolo volar varios metros hacia atrás despedazando todo a su paso hasta detenerse frente a una casa dura.

Aquello lo tomó desprevenido y logró herirlo bastante pero no lo suficiente como para abandonar la batalla.

Naruto y Sasuke las miraron sorprendidos pero divertidos a su vez.

Ellas se lanzaron hacia el anciano en cuestión empleando sus ataques físicos formándose así una ardua lucha que combinaba destreza y habilidad.

El anciano iba perdiendo visiblemente pero les hacía frente sin problemas.

Por otro lado Sasuke invocó al Gobi en su persona logrando que el manto rojo de seis colas lo envuelva al completo.

El anciano que debía enfrentarlo se sorprendió al ver aquello.
— ¿Quién eres y por qué llevas un Bijuu en tu interior?

Pero Sasuke se limitó a atacarlo sin decirle nada echo que enfureció al anciano sobremanera, le sacaría la información a la fuerza si era necesario.

Este anciano tenía el poder del fuego destructor y sin piedad atacaba a Sasuke quien empleando las colas del Byjuu esquivaba cada ataque que llegaba a su persona.

Empleando el poder del Gobi podía enfrentarse a menuda basura que solo desprecio sentia por los Uchiha y los ninjas poderosos, solo deseaba poder controlar al Kyuubi.

Aquel anciano frunció el ceño al ver que enfrentarse a un Bijuu era algo en extremo peligroso aún él aunque se tratara del cinco colas.

Por unos momentos se dedicó a esquivar los ataques alejándose un poco del lugar.

Pero Sasuke no tuvo piedad ya que todo ese desprecio que una vez sintió hacia esos ancianos regresó a él.

Ahora al fin tenía la oportunidad de aniquilarlos definitivamente y eso mismo haría.

El Gobi y él se volvieron uno solo resultando así ser un equipo invencible.

Aquel anciano si bien era excelente en el arte ninja nada pudo hacer contra un equipo así.

Las feroces batallas de las chicas y Sasuke contra los dos ancianos del consejo se volvieron intensas trayendo consecuencias destructivas alrededor de ellos.

La noche se volvió oscura ocultando a los enemigos del consejo. Destellos de luces aparecían en la ciega noche como indicios de la destructiva batalla.

El tercer anciano miraba a quien estaba seguro se trataba del jefe de los Akatsuki intentando determinar lo que sucedía allí.

¿Cómo fue posible que se hayan podido filtrar en la aldea sin que salte la alarma? Eso era algo imposible salvo que se tratara de un traidor.

—¿Quién eres realmente? — le preguntó el anciano
—Lo sabrás...en el otro mundo - respondió Naruto usando la voz de Kurama.

— Insolente — el anciano fue quien inició el ataque pero Naruto logró detenerlo usando un solo brazo, esto alarmó al anciano — ¿Qué...? ¿Cómo lo hiciste? — pero sin responder nada el ninja rubio empleó su otra mano para golpear al anciano en el pecho, y empujarlo varios metros atrás, aunque su ataque no fue ni la más leve sombra del de Sakura. — Eres...fuerte...te tomé a la ligera...

El anciano extrajo su chakra envolviendo su cuerpo con un manto de acero.

Naruto se lanzó a él empleando los formidables poderes de su primo.

Con el Sharingan podía ver en cámara lenta los diversos ataques de su enemigo y esquivarlos con gran facilidad para contra-atacar con una excelente predicción acertando cada uno de ellos.