Actualidad.
— Jennifer... estos vestuarios están mal etiquetados, revísalos de nuevo — pidió su jefe — también consulta con Willy sobre las nuevas marcas que nos patrocinan y productos que han llegado. Los invitados son demasiados quisquillosos y lo revisaran todo después de nosotros.
— Pero... Lizzy...— ya lo reviso...
— Si digo que tú lo hagas entonces lo haces — le recordó.
Había pasado cuatro semanas, tal como dijo Willy, el puesto de coordinador seguía disponible pero a ella le quedaba un tiempo indefinido de suspensión. Jennifer pregunto por el ascenso pero le dijeron que era inexperta en esa área debido a sus permisos y falta de experiencia práctica, casualmente siempre estaba enferma cuando iba a asistir a un evento por lo que, automáticamente, fue descartada como posible candidata.
El señor Ruvalcaba decía que era un pretexto por lo tanto no era apta para el puesto pero Lizzy sabía que se ponía tan nerviosa que terminaba en el hospital. Para ese entonces ya se le notaba el embarazo y Lizzy se enteró que está vez tendría mellizos. No sabía si felicitarla o no.
Además del trabajo, ella asistió a un bar con sus otros amigos (Mirta, Rodrigo, Tom, Adela y Piper) con quienes se divirtió. No podía decir que todo fue miel sobre hojuelas pues una o dos de esas noches, no tuvo ni idea de cómo llego a su casa pues amaneció totalmente adolorida en su cama como si hubiera hecho un trabajo realmente agotador pero no había rastro de quién la había llevado o algún pista de que hubiera sucedido algo que amenazara su integridad. Hasta llego a considerar que paso algo con algún desconocido. Incluso le quitó importancia si fue solo una aventura de una noche, no era la primera persona ni sería la única que lo hiciera. Prometió a si misma ser más consciente de lo que ocurría a su alrededor. Lo tomo como una mala noche y continúo como si nada.
Willy y ella no mencionaron nada de ese día pues no confundiría su relación, a fin de cuentas no fue la primera vez y ella estaba desesperada por sentir cariño. Mientras almorzaban, ella se quejó de su dolor menstrual (había pasado mucho tiempo con Willy como para sentir vergüenza) y que anunciaba el inicio de su periodo, era totalmente fastidioso. Jennifer se unía a ellos. Estaba molesta y su cara lo reflejaba.
— Lizzy... Hmmm... ¿Has estado en contacto con Alain? — pregunto
— No... Terminamos hace tiempo, ¿por qué? ¿Se te escapó?
— A lo mejor — suspiro — Willy... ¿nos dejarías hablar en privado?
— No, lo siento... tengo que cuidar de Lizzy. — contesto de inmediato.
Jennifer sonrió.
— Bien. Lizzy... verás Alain me dijo que tuvieron relaciones hace como un mes... si no te conociera diría que estás en tu período pero no es así ¿verdad? Sé que no es así recuerdo que siempre llevas parches térmicos en esos días y este mes no hay señales de que los lleves — saco de su bolsa una prueba casera de embarazo — por favor, hazla y sácame de la duda.
Lizzy la miro.
— Ok pero cuando la veas negativa quiero una disculpa. Sé que Alain no es el mejor hombre pero no es tan descuidado y yo tampoco.
— Lo sé... pero juramos no pelearnos por él y dejarlo decidir con quiere estar. Por favor.
Ambas se levantaron seguidas de Willy en caso de que hiciera algo. Lizzy entro al baño mientras los dos esperaban afuera. Leyó instrucciones, espero cinco minutos y sorpresa.
Dos rayas.
Embarazada.
— Hmmm Jennifer... esta prueba está caducada. ¿No trajiste otra? — dijo detrás de la puerta del baño. Se llevó la mano a la frente. ¿Cómo pudo dejar que pasara algo así? Quería creer que no estaba pasando pero de verdad no estaba pasando. Quería cambiarse de ojos y que el resultado fuera distinto.
— Ah, ¿de verdad? — y salió de prisa regresando después de 20 minutos. Le entrego tres cajas. Esta vez reviso la fecha de caducidad.
Lizzy hizo de nuevo la prueba y salió positiva. Uso agua en otra para que saliera negativa y dejo una cerrada. La positiva la oculto, Jennifer era algo distraída así que no lo notaría de inmediato si era el resultado que esperaba.
— Ves — dijo mostrándole el resultado negativo — está no la abrí.
— Ok... Gracias... ya me voy. — Sonrió y se despidió. Tiro las cajas de las pruebas. Seguramente fue un alivio. Lizzy jugaba con el buen corazón de Jennifer pero no podía engañar a Willy. A los ojos de su amigo, estaba anormalmente nerviosa.
Su amigo no dijo nada.
Después de terminar de trabajar, Lizzy estaba mirando su celular con interés, haciendo llamadas, hablando bajo y asintiendo rápido. Dejo a Willy sin despedirse y fue a una clínica privada donde conocía a alguien que la atendería sin hacer cita. No podía pensar en nada más y no negaría que estaba asustada.
La atendieron fuera del horario donde su médico confirmo que en efecto tenía tres semanas de embarazo. Lizzy miro el suelo, intento reír de miedo, que diablos le sucedió para que llegara a tal extremo, pero cierta pregunta la saco de sus pensamientos.
— ¿Quieres conservar el bebé?
— ¿Qué? ¿Puedo elegir? — reacciono sorprendida.
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embarazo no planeado, destinados a estar juntos, más allá del amor
Editado: 25.12.2023