-¡Corre! Evangeline, se quema la casa!!! Tienes que salir- escucho y me levanto enseguida -digo,buenos días- Byron se ríe de la expresión que debo tener en este momento -¡Bobo! eso no se hace, me asustaste- digo fingiendo un puchero, este hombre está loco.
Ya lo extrañaba, habían pasado tres días desde que se fue ya que se presentó algo de último minuto y se quedó dos días más.
No me pueden culpar, extrañaba su dulzura, los pequeños detalles, el que me haga reír; mi yo de antes lo amaba, por eso el compromiso y eso....yo no lo amo pero el es muy bueno, no lo conozco casi nada pero a parte de eso no existe un motivo lógico para no quererlo
-jajajaja- está ahí riéndose como loco y yo aquí pensando que la casa se quemaba -ahora me debes una- le digo achicando los ojos -¿Cómo te fue?- le pregunto
-bien, unos problemas con unos provedores....cosas aburridas ¿Y tú cómo has estado estos días?- se sienta a un lado mío en la cama -bien-
El toma un cepillo que está cerca de la cama y empieza a pasarlo por el nido de pájaros que tengo por cabello, yo volteo a verlo
-¿Que estás haciendo?- le pregunto, se ve concentrado. El cómo siempre está arreglado y super guapo y yo aquí como loca recién salida del manicomio
-Te estoy peinando- toma mi cabeza y la gira con delicadeza para poder seguir peinandome y me da un beso en la cabeza, el es muy dulce
Escucho como suspira -Evangeline....cuanto te amo- dijo muy bajito pero alcance a escucharlo con claridad. Termina de peinarme y yo me volteo a verlo
-Y..yo.... Byron... yo - el acaricia mi mejilla -Shh, no tienes que decir nada. -Yo haré que me ames, solo mírame, seguro me amaras- dice jugando y se acomoda sus rubios cabellos, guiñándome uno de sus ojos azules. No sé si derretirme o morirme de la risa
Le sonrio y doy un abrazo. El sale para que yo pueda arreglarme, entro a la ducha y luego me pongo la ropa
Salgo y lo encuentro en la sala viendo una película, me siento a su lado y me pongo a ver de qué se trata, se ve entretenida.
Al día siguiente:
Me levanto y arreglo para iniciar el día, me pongo un jean claro con una de las blusas que compré
Salgo de la habitación y me pongo a buscar a Byron, no lo veo por ningún lado. Me cruzo con una muchacha que si no estoy mal trabaja aquí
-Buenos días, ¿Usted sabe dónde está.....mi prometido?- le pregunto a la joven mujer que tiene cara de amargada, su semblante cambia -Buenos días, señorita. El salió hace poco- umm seguro se fue al trabajo o algo así -ok, gracias- ella sigue con sus cosas y yo voy a la sala de la casa
¿Que haré hoy? Si mi antigua yo (así se me ocurrió llamarme porque me describen a alguien que lastimosamente no conozco y pues....) Era igual a mí, su vida debió ser bien aburrida....o bueno no, ella trabajaba y tenía un prometido súper sexy. Es lógico que yo no esté trabajando porque ¿Cómo estaría a cargo de una empresa alguien que no sabe ni dónde está parado?
En fin... ¡Ya sé! Voy a hablar con Taliana, Byron me dijo que podía salir cuando quisiera pero que tuviera cuidado y le dijera a Martin
Saco el teléfono y su número no es difícil de encontrar ya que solo tengo a Byron y a ella
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Quedamos en vernos y me envió una dirección, ya hablé con Martín y me van a llevar Lucas y Carlos.
Subo al auto y conducen hasta que llegamos a una especie de cafetería o restaurante al aire libre, es linda -ya llegamos Señorita Richards- Me dice Lucas y Carlos baja y abre mi puerta, excesivamente cliché -Gracias-
Avanzo hasta el local y veo a Taliana en una mesa y me acerco -Hola- le digo y ella nota al fin mi presencia -Hola mi querida asesina en serie, ¿Como estás?- se levanta y me da un abrazo -jajaja bien ¿y tú?-
-Muy bien,me alegra volver a verte- me dice y se vuelve a sentar -A mi también- me siento en una silla a su lado
Ella pide una malteada de cereza y yo una de chocolate -cuando terminemos voy a llevarte para que veas la ropa que diseño-
-ok, no puedo esperar para verla- desde que la vez se nota que es una fashionista pero no me imaginé que era una diseñadora y que tuviera una tienda -¿Cuál es tu color favorito?- levanta su mirada de la malteada y me mira esperando mi respuesta
-Umm.. creo que el dorado o el rosado pastel, el tuyo?-
-azul, aunque también el rojo- me dice la pelinegra pensativa
Terminamos las malteadas y empezamos a caminar hasta llegar a una tienda -bienvenida Evangeline, ven para que veas toda mi ropa- entra dando brinquitos y saluda a la mujer del mostrador y luego me lleva a dónde está la ropa ¡Me encanta! La ropa es hermosa y todo en este lugar me grita Taliana
-¡¡Me encanta!! Todo está tan hermoso, adoro la ropa- digo y ella sonríe -gracias, me alegra que te guste. La verdad esta es mi sede más bonita- dijo lo último más para ella misma
-Sede?- le pregunto -tengo unas cuantas de estás en algunas ciudades, esta fue la primera- wow, aunque no es extraño que sea muy exitosa, ella diseñó esto y es muyyy hermoso. Amo toda esta ropa
-ven! Vamos a probarte algo- toma mi mano y me guía hasta donde están unos vestidos -umm...pruebate este- me muestra un vestido corto de un color rosado muy claro, la verdad si es muyyyyy lindo
Le hago caso y entro en el probador y me lo pongo, me enamoré!! Tiene un pequeño escote de corazón y es de tiritas o como se diga, la parte de arribase ajusta muy bien a mi figura y abajo tiene unos cuantos volantes. Tiene pequeños detalles brillantes, me encanta; díganme básica, ridícula o yo que sé pero necesito este vestido
-me encanta! Te queda perfecto. Te lo tienes que llevar, se te ve hermoso-
-siii, es bellísimo. Eres una genia de la moda, toda la ropa que has diseñado es enserio la más linda que he visto-
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Salimos de la tienda luego de que yo pagará el vestido y ella me insistiera que me lo regalaba, al final gané yo y obviamente lo pagué, no podría aceptar su regalo