Capítulo 4. Inconformidad

Teddy Lupin

Agosto, 2013

“El día de tu cumpleaños te veías tan preciosa, con ese vestido rojo, a penas tenías cinco añitos, pero, desde ese día, quedé prendado con tu cabello rojo fuego, único como tú; tus ojos, color verde; tu adorable sonrisa. Era agosto, por suerte McGonagall me dio permiso de salir de la escuela. Nos la pasamos increíble pequeña, tan risueña y aventurera cómo siempre”.

—Harry, no es lo mejor, déjamelo a mí, yo lo... —le decía a Harry enfurruñado por no poder convencerlo.

—He dicho que no y se acabó, de ahora en adelante quiero que te encargues de investigar más, antes de tratar de culpar a las personas.

—Pero si esta carta es más que evidencia que lo único que quieren es lastimar a Lily. No puedes permitir que eso ocurra.

—No lo voy a permitir, pero eso no quiere decir que porque te llegó una carta donde amenazan a Lily tiene que ser ese muchacho —terminaba de hablar el padre con el ceño fruncido—. Mientras tanto ya me encargué de poner a Scorpius al cuidado de Lily.

Empezaba  a sospechar que podrían estar involucrados los amigos del novio de Lily, después de todo sus familias no se habían alejado mucho de la magia oscura.

—Sabes que no está lo suficientemente preparado para cuidarla, déjamelo a mí, yo lo puedo hacer.

—He dicho que no, Lily no es tonta como para no enterarse que si tú vas es por algo y no podemos permitir que sospechen las demás personas.

—Entonces lo dejarás así? Si llegan y atacan créeme que no estarán lo suficientemente preparados para enfrentar dicho ataque.

—Por eso te estoy mandando a investigar y no quiero que me rezongues más.

—Está bien, cualquier noticia yo te la haré llegar —le dijo con los dientes apretados mientras salía aporreando la puerta de su oficina.

Estaba bastante molesto, porque nadie era lo suficientemente capaz para proteger a Lil como él lo haría.

No estaba siendo consciente de lo que pasaba en su camino cuando se estampó con James.

—Oye viejo, tranquilo.

—No estoy para bromas James.

Era verdad que Lily no confiaría en él para cuidarla, pero no había de otra, no confiaba en que estuviera a salvo con Scorpius, sabía que era bueno en defensa, pero en ataque no lo suficiente. Estaba decidido en vigilarla, sin importar que pareciera un acosador.

—Perdón, a veces olvido tu edad, pero hablando de otra cosa ¿Ya te enteraste de la nueva noticia?

Como podía preguntarle si ya se enteró de la nueva noticia si el mismo lo estaba diciendo: NUEVA. Se estaba empezando a desesperar, sólo estaba perdiendo tiempo valioso para ver por el bienestar de la pequeña princesa.

—Sabes, necesitas empezar a leer más y dejar de perder el tiempo, tu cerebro se está fundiendo.

—Te has vuelto muy hostil, ¿Por qué la agresividad?

—Por si no recuerdas James, tu hermana no está a salvo, sabes bien que corre gran peligro con unos asesinos sueltos y quieres que esté calmado. No tengo tiempo que perder, tengo que ocuparme de saber cómo está, cada segundo qué pasa es un segundo que ella podría ser atacada.

—Vaya, en verdad estás loco por ella —mencionó James mientras silbaba en alusión de lo que había dicho Ted.

—Creo que la palabra es enamorado —terminó diciendo mientras agachaba la cabeza, se sentía cansado, todo lo que había hecho por defender a Lily parecía que no tenía resultados. Separarse de su Luna para protegerla, duro entrenamiento para convertirse en Auror, misiones interminables para atrapar a los que estaban detrás. Sí, parecía que nada estaba dando frutos.

>> Lamento lo que te dije, sólo estoy bastante estresado, no he dormido bien. Más bien, no me han dejado dormir los pensamientos. Es que no dejo de pensar en quién podría estar detrás de esto.

—Sé que amas a mi hermana, pero creo que se te está saliendo de las manos este asunto. Deja que papá se encargue, no estás cargando todo sobre tus hombres. Además, sabes que Lily tiene a Scorpius para defenderla y aunque te pese escucharlo la ama y la defendería hasta dar la vida por ella.

—Lo sé, pero no me puedo sacar de la cabeza que está en peligro, empiezo a desconfiar de todo a mi alrededor sabes. Y está ese tonto de Malfoy, bien podría estar en su lugar…

—Lamentó decirte esto, pero Scorpius no es mala persona, y la defendería a capa y… —se quedó pensando si lo adecuado sería decir espada— varita, además tú fuiste el tonto que la dejó ir, él también se volvió Auror y nunca la dejó, como otro —opinó James mientras veía para otro lado.

—Gracias por ayudarme —mencionó sarcásticamente.

—Ya sabes, para eso son los amigos —decía el más joven de pelo castaño claro mientras le guiñaba el ojo.

—Hablando de otra cosa, necesito que hagas algo por mí.
 

Lily Potter

No supo en qué momento pasó, pero repentinamente se estaba empezando a sentir más exhausta, sintió un leve mareo, necesitaba apoyarse en algo o caería al suelo, y no ayudaba la preocupación que cargaba.