—¿quieres? —pregunto con duda entregándole el desayuno a Nico y este solo asintió.
Layla sonrio viendo como el hombre miraba con duda, era la primera vez que probaba algo diferente para desayunar, suspiro viendo la cara expectante de Layla le dio una mordida.
—mm… —Nico abrió los ojos con sorpresa.
—¿está bueno? —el hombre asintió y siguió comiendo, Layla se rio dejando que el video siguiera corriendo, se acercó abrazando a Nico y dándole un beso en la mejilla.
Sabía que recibiría críticas por ello así que solo lo compartió en el grupo de sus amigas.
S: eso!!
Sara: ya esta convertido!
D: ahora es uno de nosotros
Enviaron varios sticker de victoria que hicieron reír a Layla.
—ya soy famoso? —Layla asintió.
—sip, pasaste la prueba. —afirmo, cuando se giró lo encontró tomando otra tanda de comida.
—¿Qué? ¿no puedo? —la inocencia en sus ojos le derritió el corazón a Layla.
—claro que puedes! —afirmo Layla riéndose.
Cuando hablaron en la consulta de no tomar café Layla estuvo más que feliz, ella funcionaba sin café de todas maneras, pero no podía dejar de hacerlo por Nico, ya había aprendido a cómo prepararlo para él.
Con un gran bostezo movió el cuerpo de un lado al otro, aun no se veía del todo su vientre abultado.
—estas cansada? —pero la mujer negó, Nico se levantó de la silla acercándose a ella, por la diferencia de altura Nico la tomó de las mejillas, viendo como las ojeras apenas se comenzaban a marcar bajo los ojos de Layla.
Ya habían llegado del viaje y él incluso estaba cansado, pero Layla estaba peor.
—ve a dormir ¿sí? —ella solo respondió volviendo a bostezar ganándose una leve risa de Nico quien le dejo un beso en la frente.
Una vez que la convenció de regresar a la cama, la vio quedarse dormida enseguida, se encargó de cerrar todas las puertas y dejar una nota en el refrigerador, salió de vuelta al trabajo temiendo por Layla, ya su hogar no era un lugar seguro, miro incluso por el retrovisor si algún auto lo seguía, pero cuando pensó que no era así, una moto le mantenía el paso, sentia que conocía el porte del hombre por lo que sin temos a equivocarse detuvo el auto viendo como la moto se estacionaba justo frente a él.
Cuando el hombre se quitó el casco solo confirmo que era el mismísimo Claus Makris, portando un traje de tres piezas.
¿no lo dejaría en paz?
Nico se bajó del auto dando un portazo, y con ceño fruncido vio al hombre relajado esperar en la moto.
—¿Qué haces? —la pregunta no le sorprendió, menos el malestar que expreso el hombre.
—tambien me agrada verte —a pesar de la ironía Claus miro a ambos lados de la carretera viendo los autos pasar.
—prometiste alejarte de Lila.
—sip, lo hice, pero no esperaba que recibiera amenazas de un Hater tuyo —Nico lo miro sorprendido y más cuando el hombre saco del interior de su saco un sobre doblado, cuando lo tomo saco rápidamente una plantilla de información.
—¿es en serio? —Nico miro con incredulidad la fotografía en la hoja y los datos en ella.
—sí, créeme, si tu no vas a cuidarla, lo hare yo —Nico con el ceño fruncido el entrego de vuelta el papel a Claus.
—ese es mi trabajo, no tienes que desgastarte en ello —Claus se dignó a mirarlo con malestar levantándose de la moto.
—tu… no creo que te tomes esto en serio… pero no dejare la seguridad de Lila a un idiota veterinario —Nico solo retrocedió un par de pasos cuando Claus lo empujo del pecho.
Volvió a colocarse el casco y encendiéndola la moto, solo dejo una nube de humo a su paso y el papel que le había mostrado a Nico.
Este lo tomo aun sin poder creerlo ¿le avisaría a Layla? No, ya ella estaba lo suficientemente preocupada como para lidiar con esto ahora.
#188 en Joven Adulto
#3338 en Novela romántica
destino o casualidad, destino romance y amor, mafia amor tragedia
Editado: 20.08.2024